Ebionismo

corriente judeocristiana que rechazaba la divinidad de Cristo

Ebionismo o ebionaioi (griego: Ἐβιωναῖοι; derivado del hebreo אביונים ebionim, que significa «los pobres»), es un término patrístico que hace referencia a una o varias sectas judeocristianas que existieron durante el cristianismo primitivo, y que veían a la pobreza como una bendición.[1]​ Los ebionitas aceptaron una cristología adopcionista, viendo por tanto a Jesús como solo un hombre que, en virtud de su rectitud al seguir la Ley de Moisés, fue escogido por Dios para ser el profeta mesiánico, como Moisés. Los ebionitas, pues, mantenían una cristología «baja», es decir, afirmaban que Jesús era el Mesías pero rechazaban su preexistencia, esto es, que tuviera naturaleza divina y que su nacimiento hubiera sido virginal[2]​ e insistían en la necesidad de seguir los ritos y leyes judías cumpliendo preceptos como la circuncisión, el sábado o las prohibiciones alimenticias (cashrut).[3]

El sermón de la montaña por Carl Heinrich Bloch, 1890.

La gran mayoría de los ebionitas rechazaban como herejías las creencias cristianas ortodoxas en la divinidad de Jesús, en su nacimiento virginal y en la expiación sustitutiva o vicaria de los pecados que eran aceptadas por la iglesia primitiva, y en consecuencia creían que Jesús era hijo natural de José y María, que buscó abolir los sacrificios animales por medio de la proclamación profética, y que murió como mártir para llevar a toda Israel al arrepentimiento. Su nombre sugiere que otorgaban un especial valor a la pobreza voluntaria. Las últimas comunidades ebionitas podrían haber desaparecido alrededor del siglo V.

Más allá de la pobreza voluntaria, se decía que los ebionitas practicaban el vegetarianismo religioso y baños rituales. Insistían en la necesidad de seguir la Ley Escrita y el Sermón de la Montaña de Jesús; utilizaban uno, algunos o todos los evangelios judeocristianos,[4]​ como el Evangelio de los ebionitas, como sagrada escritura adicional a la Biblia hebrea, y veneraban a Santiago el Justo como ejemplo de rectitud y verdadero sucesor de Jesús (en lugar de Pedro), al tiempo que rechazaban a Pablo como falso apóstol y apóstata de la Ley. [5]

Dado que los registros históricos de los ebionitas son escasos, fragmentarios y controvertidos, gran parte de lo que se sabe o conjetura sobre ellos deriva de los Padres de la Iglesia, que veían a ciertos cristianos judíos como ebionitas y confundían en sus polémicas a diferentes grupos a los que tachaban de «judaizantes» heréticos. En consecuencia, se sabe muy poco con certeza sobre la secta o sectas ebionitas, y la mayoría, si no todas, las afirmaciones sobre ellos son especulativas. Los Padres de la Iglesia consideran a los ebionitas idénticos a otras sectas judeocristianas, como los nazarenos.

Referencias históricas editar

Los ebionitas se deben distinguir, tal y como Ireneo de Lyon deja claro ya en el siglo II, de los nazarenos, judíos creyentes en Jesús como Mesías, y descendientes de la primitiva iglesia judía de Jerusalén, que sí creían en la divinidad de Jesús y además celebraban el sábado como día de reposo del Señor.

Ya que no hay evidencia arqueológica autentificada para comprobar la existencia de los ebionitas, su naturaleza e historia no pueden ser reconstruidas de referencias que no han perdurado. Lo poco que se conoce de ellos viene de referencias críticas por influencias de antiguos teólogos y escritores de la iglesia cristiana, quienes los consideraban «heréticos» y «judaizantes».[6]​ Sin embargo, de acuerdo con los estudiosos de la actualidad quienes han estudiado su pertenencia a la historia, los ebionitas existieron como una comunidad distinta de la cristiandad temprana, antes y después de la destrucción de Jerusalén en el año 70 de nuestra era, pero fueron marginados y perseguidos por cristianos gentiles a pesar de la posibilidad de que hayan sido tan fieles a las enseñanzas de Jesús como el mismo Pablo de Tarso.[7][5][8]

Historia editar

En el año 140 de nuestra era, Justino Mártir, en su texto más antiguo que conocemos, describe una secta alejada de la iglesia que observa la Ley de Moisés, y que la sostienen como obligación universal.[9]​ En el 180 d. C., Ireneo de Lyon fue el primero en usar el término "ebionitas" para describir una secta herética y judaizante, que calificaba como tercamente aferrada a la ley.[10]​ En el 212 d. C., Orígenes remarca que el nombre deriva de la palabra hebrea "evyon", que significa pobre.[11]​ El más completo pero a la vez cuestionable relato viene de Epifanio de Salamis, quien escribió un tratado de herética en el siglo IV, denunciando 80 sectas heréticas, entre las cuales se encontraba el ebionismo.[12]​ Estas son descripciones generales de su ideología religiosa, aunque en ocasiones hay citas de sus evangelios, que de otra manera estarían perdidos para nosotros.

Usualmente dependiendo entre sí para su valoración, los Padres de la Iglesia distinguieron a los ebionitas de los carpocracianos, cerintos, elcesaiteos, Nazarenos, y sampsaenos, muchos de los cuales eran las primeras sectas de judíos discípulos de Jesús que sostenían su gnosticismo tradicional referentes al punto de vista cristiano que los ebionitas rechazaban. Eusebio de Cesarea menciona, sin embargo, que la minoría ebionista se acercó a hacer suyas estas ideas a pesar de continuar con el nombre de la secta.[13]

Véase también editar

Notas editar

  1. Cross, FL; Livingston, EA, eds. (1989). «Ebionites». The Oxford Dictionary of the Christian Church. Oxford University Press.  |editor2= y |editor2-last= redundantes (ayuda)
  2. «Ebionites». 
  3. Kohler, Kaufmann (1901–06). «Ebionites». En Singer, Isidore; Alder, Cyrus, eds. Jewish Encyclopedia. 
  4. Epifanio de Salamis, Panarion, 30:3:7 y 30:13:2
  5. a b Maccoby, Hyam (1987). The Mythmaker: Paul and the Invention of Christianity. HarperCollins. ISBN 0-06-250585-8. 
  6. Klijn A.F.J.; Reinink, G.J. (1973). Patristic Evidence for Jewish-Christian Sects. Brill. ISBN 90-04-03763-2. 
  7. Schoeps, Hans-Joachim (1969). Jewish Christianity: Factional Disputes in the Early Church. Translation Douglas R. A. Hare. Fortress Press. 
  8. Tabor, James D. (2006). The Jesus Dynasty: A New Historical Investigation of Jesus, His Royal Family, and the Birth of Christianity. Simon & Schuster. ISBN 0-7432-8723-1. 
  9. Ante-Nicene Fathers, Justin Martyr
  10. Ante-Nicene Fathers, Irenaeus
  11. Ante-Nicene Fathers, Origen, De Principiis
  12. Koch, Glenn Alan (1976). A Critical Investigation of Epiphanius' Knowdedge of the Ebionites: A Translation and Critical Discussion of 'Panarion' 30. University of Pennsylvania. 
  13. Ante-Nicene Fathers, Eusebius

Enlaces externos editar