El Siracusia (en griego: Συρακουσία) o Siracusana[nota 1]​ fue un navío mercante de la antigua Grecia para transporte de mercancía y pasajeros, perteneciente a la ciudad de Siracusa. Con 55 metros de largo, 14 metros de ancho, 13 metros de alto y una capacidad de carga de entre 1700 y 2000 toneladas, está considerado como uno de los mayores barcos de la Antigüedad.[1][2]​ Fue encargada su construcción al arquitecto naval Arquías de Corinto,[3]​ pero ante la complejidad de su botadura, se encargó (c. 240 a. C.) el diseño de un cabrestante a Arquímedes para dicha maniobra. Arquímedes también se encargó de continuar con la construcción del Siracusia.[4]​ La construcción de un barco lujoso para el transporte de trigo, y de tal envergadura, fue ideada y ordenada por el tirano Hierón II, quien también la costeó. Más tarde Hierón II se lo regaló a Ptolomeo II de Egipto[5]​ y fue renombrado como Alejandría.[nota 2]

Siracusia

Representación del Siracusia de 1798.
Historial
Tipo barco y embarcación
Operador Ciudad-Estado de Siracusa, Antigua Grecia
Características generales
Tonelaje 1000 tn
Eslora 55m
Armamento Una ballesta y dos catapultas
Propulsión Vela y remo
Tropas 400 soldados

La nave estaba arbolada con tres mástiles: palo mayor, mesana y trinquete.[6]​ Disponía de cuatro anclas de madera y ocho de hierro.[6]

La gran embarcación estaba diseñada con todo tipo de lujos para acomodar a hasta 600 personas. En términos de comodidad y lujo, equivaldría al Titanic en comparación con otros barcos de la época: contaba con un jardín, biblioteca, gimnasio, baño con agua caliente e incluso con un pequeño templo dedicado a la diosa Afrodita (protectora de marineros y viajeros por mar). Los niveles superiores se reservaban para los pasajeros y los inferiores para la tripulación y soldados. Dado que una nave de esta envergadura dejaría pasar grandes cantidades de agua a través del casco, el tornillo de Arquímedes fue utilizado a fin de extraer el agua de la sentina.[7]

Ateneo, escritor griego de finales del siglo II, cita una detallada descripción de la nave tomada de una obra más antigua de Mosquión, que se ha perdido, aunque se conserva un fragmento del tratado de este autor en Fragmente der griechischen Historiker 572, fr. 1.[nota 3]​ Según él, en la proa contaba con una gran catapulta y la cubierta superior del barco, más ancha que el resto de la estructura, estaba sostenida por atlas de madera bellamente tallados, había decoraciones en mármol y marfil y el piso de los espacios públicos estaba pavimentado con mosaicos que representaban la historia completa de la Ilíada.

En lo relativo a los problemas que se afrontaron en el diseño y construcción de la nave resalta la descripción de los esfuerzos realizados para proteger a la nave de los parásitos marinos, como la broma, incluyendo la cobertura de la quilla con brea y crin de caballo.[8]​ Se trata del primer ejemplo de una tecnología diseñada para evitar la acumulación de organismos, en lugar de en su eliminación posterior.

Véase también editar

Notas editar

  1. En Ateneo, Banquete de los eruditos (V, 208F), el nombre del barco es Siracusana.
  2. Alejandrina, según Ateneo, V, 208F.
  3. Se puede encontrar el texto completo de Ateneo, así como una discusión sobre la nave, en la obra de Casson, Lionel, Ships and Seamanship in the Ancient World, Princeton, 1971.

Referencias editar

  1. Ateneo, Banquete de los eruditos, V, 204E.
  2. Villar, Víctor R. (30 de noviembre de 2015). «El Siracusia, el barco más grande de la Antigüedad que diseñó Arquímedes». La Brújula Verde. Consultado el 20 de febrero de 2018. 
  3. Ateneo, Banquete de los eruditos, V, 206F-207A.
  4. Ateneo, Banquete de los eruditos, V, 207A-207C.
  5. Ateneo, Banquete de los eruditos, V, 208B.
  6. a b Ateneo, Banquete de los eruditos, V, 208E.
  7. Universidad de Huelva, «Arquimediano».
  8. Ateneo de Naucratis, Deipnosophistae, libro V, capítulo 40 (en inglés).

Bibliografía complementaria editar

  • Fik Meijer, André Wegener Sleeswyk: «On the Construction of the 'Syracusia' (Athenaeus V. 207 A-B)», The Classical Quarterly, New Series, Vol. 46, No. 2 (1996), pp. 575-578.
  • Jean MacIntosh Turfa, Alwin Steinmayer Jr: «The Syracusia as a Giant Cargo Vessel», The International Journal of Nautical Archaeology, Vol. 28, No. 2 (1999), pp. 105-125.