La sociología es la ciencia social que se encarga del análisis científico de la sociedad humana o población regional. De manera sucinta se puede decir que esta estudia la sociedad humana, a los grupos humanos y las relaciones que forman la sociedad. Ello significa que la sociología analiza las relaciones (de producción, distribución, consumo, solidaridad, división del trabajo, etc.) que se establecen entre esos grupos humanos (la familia, los clubes, las pandillas, las asociaciones, las instituciones, etc.). En general pretende dar cuenta de las interacciones sociales, las instituciones, la producción y las formas de sociedades existentes.
Este artículo trata sobre las relaciones en las redes sociales. Para conocer el término que abarca todas las relaciones entre individuos en el mundo o la World Wide Web, consulte Red social.El grafo social es un tipo de grafo que representa las relaciones sociales entre diferentes entidades. En síntesis, es un modelo o representación de una red social, sustentada en la teoría de grafos. Este término se ha descrito como «el mapa global de todo el mundo y cómo están relacionados». El concepto ya era utilizado en 1964, aunque en el contexto de las isoglosas. Asimismo, Leo Apostel usó dicho concepto, originalmente llamado sociograma, en este contexto durante el año 1978.
Posteriormente, fue popularizado cuando Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, lo utilizó para referirse a la red social de relaciones entre los usuarios del servicio de redes sociales proporcionados por Facebook. Ello ocurrió en el marco de la conferencia Facebook F8, el 24 de mayo de 2007, cuando fue utilizado para explicar que la plataforma de Facebook se beneficiaría del gráfico social, tomando ventaja de las relaciones entre los individuos que Facebook ofrece para ofrecer una rica experiencia en línea. Aquella ha sido la definición más amplia para referirse a un gráfico social de todos los usuarios de Internet.
El grafo social es un concepto abstracto que describe las relaciones entre las personas en línea, en contraposición a la idea de una red social, que describe las relaciones en el mundo real. Los dos conceptos son muy similares, pero existen algunas diferencias de menor importancia. Por ejemplo, el gráfico social es digital y, más importante aún, se define explícitamente por todas las conexiones en cuestión.
La sociología del conocimiento es el estudio de la relación entre el pensamiento humano y el contexto social en el que surge, y los efectos que las ideas predominantes tienen en las sociedades. No es un área especializada de la sociología. En su lugar, se ocupa de amplias cuestiones fundamentales sobre el alcance y los límites de las influencias sociales en la vida de las personas y la base sociocultural de nuestro conocimiento sobre el mundo. La sociología del conocimiento tiene una subclase y un complemento. Su subclase es la Sociología del conocimiento científico. Su complemento es la sociología de la ignorancia.
La sociología del conocimiento fue iniciada principalmente por el sociólogo Émile Durkheim a principios del siglo XX. El término empezó a generalizarse en la década de 1920, cuando varios sociólogos de lengua alemana escribieron sobre el tema: entre ellos destacan Karl Mannheim, con su obra Ideología y utopía, y Max Scheler. El dominio del funcionalismo a mediados del siglo XX supuso que la sociología del conocimiento permaneciese en un lugar secundario dentro del pensamiento sociológico. En gran medida, fue reinventada y aplicada a los estudios sobre la vida diaria en la década de los sesenta, en especial por Peter L. Berger y Thomas Luckmann en La construcción social de la realidad (1966) y sigue estando en la base de los métodos de comprensión cualitativa de las sociedades humanas.
Aunque resulta muy influyente en la sociología contemporánea, la sociología del conocimiento ha tenido un impacto más significativo sobre la ciencia, especialmente por su contribución a la discusión y comprensión de la propia naturaleza de la ciencia, sobre todo a través de la obra de Thomas Kuhn, sobre La estructura de las revoluciones científicas.
Toda sociedad es una sociedad moral. En ciertos aspectos, este carácter es aún más pronunciado en las sociedades organizadas. Debido a que el individuo no es suficiente para sí mismo, es de la sociedad que recibe todo lo necesario para él, ya que es para la sociedad para quien trabaja. -Emile Durkheim, La división del trabajo social (1893)