Usuario:Nattalarceres/Taller

Brecha digital etaria editar

 

Brecha digital hace referencia a las diferencias de uso y acceso a las redes digitales, la que se centra principalmente en el rango etario. Los jóvenes y los adultos pueden clasificarse en general como “usuarios principales”, mientras que personas de mayor edad pueden catalogarse como “usuarios periféricos” o “usuarios excluidos” de Internet a los efectos de la búsqueda de información, la comunicación y la producción de materiales. Influyen en ella otros factores, tales como los estereotipos perpetuados por las industrias tecnológicas, cuyos públicos objetivos no parecieran incluir a los adultos mayores. [1]

Antecedentes editar

En Chile, según la Novena Encuesta de Acceso y Uso de Internet realizada en 2018 por la Subsecretaría de Telecomunicaciones, el 49,1% de las personas mayores de 60 años nunca ha usado Internet. En la misma encuesta, se revela que un 54% en los hogares en los que residen adultos mayores cuenta con acceso a internet.[2]

El Servicio Nacional del Adulto Mayor (SENAMA), informa que en 2006 había cerca de un 7% de usabilidad de Internet por parte de adultos mayores, actualmente esa cifra está cercana al 32%. El principal factor que determina y constituye la brecha digital tiene que ver con el acceso; por un lado, al aparato o plataforma en sí, y por otro lado a la conexión. Eso a su vez está determinado por factores geográficos y económicos, por lo que es transversal a toda la población, no solo a la tercera edad.

Inclusión digital editar

Para atender la brecha digital, se fomentan diversas acciones de inclusión digital para que las personas puedan acceder y aprovechar la tecnología de forma equitativa, con especial atención a grupos poblacionales tales como, adultos mayores, personas con discapacidad, pueblos originarios, personas que viven en zonas rurales, mujeres y niñas.

Inclusión digital en el marco de la Unión Internacional de Telecomunicaciones editar

 
Logo Unión Internacional de Telecomunicaciones

En el año 2002, a través de la Resolución 56/183, la Asamblea General de la ONU creó la CMSI (Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información) en donde se reconoce que las TIC son una herramienta indispensable para el desarrollo sostenible en nuestras sociedades. La CMSI es una cumbre global, en donde participan los representantes de los países de las naciones unidas, del sector privado y de la sociedad civil. Lo fundamental de esta cumbre se centra en que implementa líneas de acción y políticas públicas que aseguran un correcto uso y acceso a las TICs[3]

Por otro lado también existe la CMDT (Cumbre Mundial de Desarrollo de Telecomunicaciones), La que apoya a comunidades locales específicas (niños, jóvenes, personas mayores, mujeres, personas con discapacidad y pueblos indígenas) a través de asociaciones, colaboraciones e iniciativas de múltiples partes interesadas, para implementar hojas de ruta, acciones, actividades y proyectos escalables para reducir la brecha digital y contar con un acceso y uso más inclusivos e igualitario de las TIC para todas las personas.

En la CMDT que se hizo en Buenos Aires en el año 2017, se hizo la resolución 58º “ Accesibilidad a las TIC para las personas con discapacidad, incluidas las personas con discapacidades relacionadas con la edad.

La UIT destaca cuatro grandes acciones en materia de inclusión digital. La primera orientada en facilitar la conectividad y el acceso a la tecnología. La segunda a crear habilidades digitales por grupo poblacional. La tercera en impulsar la colaboración institucional en todos sus niveles (academia, sector público y privado, sociedad civil y organismos internacionales). Y la cuarta, en fortalecer la recolección y análisis de datos desagregados relacionados con la accesibilidad a las telecomunicaciones/TIC por grupo poblacional, con el objetivo de crear estadísticas de accesibilidad e indicadores relevantes que contribuyan en el diseño de políticas públicas en materia de telecomunicaciones y desarrollo digital

Las personas mayores no son participantes activos en las sociedades digitales en las que viven y existe un enorme espacio para ampliar el uso de Internet entre estas personas en la región. Las facilitaciones en diferentes sistemas del estado, las nuevas actualizaciones en la web, hacen que los adultos mayores, se queden cada vez más atrás “La brecha digital etaria supone que quienes no son nativos digitales deben desplazarse hacia un contexto comunicativo en que la alfabetización tradicional es preponderantemente desplazada por la alfabetización digital”

“Se reconoce hoy que la población mayor está más alejada del uso eficiente de las tecnologías de la información, situación en que el factor etario es relevante pero no de incidencia única.”[4]

Algunos ejemplos son la tramitación electrónica de los procesos de e-Justicia en el país, la Oficina Judicial Virtual (OJV), utilizando la Clave Única del Estado que vale, en estos casos, como firma electrónica simple.[5]​ En tiempos de pandemia, la poca conexión que tenían los adultos mayores con sus familiares y con el mundo en sí, al no sacarle un buen uso a la tecnología.[6]

Realidad nacional editar

En Chile, el 24,5% de la población sobre 60 años del primer quintil ha utilizado internet en los últimos tres meses del período consultado, frente al 64,1% de la población del quinto quintil, que utilizó internet en el mismo lapso; además, un 55,2% de la población sobre 60 años contestó que nunca había usado un computador.

Las estadísticas de TIC disponibles para América Latina muestran que el grupo etario de personas mayores es el más aislado de las tecnologías digitales, lo que da cuenta de una profunda brecha de la era digital. Las evidencias científicas demostraron que el uso de medios de comunicación social digitales puede reducir la percepción de soledad y/o aislamiento en personas mayores. Internet puede favorecer un mayor contacto entre personas mayores y sus familias, servir como fuente de apoyo, dar mayor sentido de pertenecer a una comunidad y reducir la soledad.

Cada vez resulta más evidente, sin embargo, que el acceso a los medios digitales no es uniforme entre los países y dentro de cada uno, lo que lleva a concluir que los posibles beneficios no se distribuyen por igual entre los distintos grupos de población. De hecho, los posibles efectos de los medios no son automáticos ni llegan a todas las personas.

En términos generales en la literatura se identifican tres perspectivas vinculadas a la noción de ciudadanía digital. Una segunda mirada que se enfoca en nuevas formas de participación y la brecha entre las acciones de intervención de los ciudadanos desde nuevas dinámicas en red usando medios digitales y la capacidad de las instituciones de encauzar dichas acciones, reconociendo las nuevas lógicas y principios vinculados al espacio digital.

Programas editar

Adulto digital[7] editar

Programa del gobierno chileno, para impulsar la digitalización de los adultos mayores de todo el país. La ex primera dama, Cecilia Morel, expresó que “una de las premisas de nuestro programa “Adulto Mejor” es que nuestras personas mayores se integren a la sociedad, que hagan redes, que no se aíslen, que estén conectadas.

Los cursos son Ciberseguridad en entornos de aprendizaje digital: Computación básica; Comunicación en entornos digitales; Formulación y evaluación de proyectos; Ideas para crecer tu negocio; Liderazgo, Marketing digital y Trabajo en equipo. Los cursos ya se encuentran disponibles en la plataforma www.sence.cl

Programa de Inclusión Digital de Personas Mayores editar

Este programa impartido por el Servicio Nacional del Adulto Mayor en Chile busca incentivar el acceso de los adultos mayores a computadores, mediante la instalación de 200 computadores reacondicionados en 32 centros de adultos mayores. El programa incluye capacitaciones y alfabetización digital en el uso de computadores y de internet. Cubre alrededor de 6.400 adultos mayores en 16 regiones del país, según las estimaciones del SENAMA.

Travesía 100[8] editar

Esta fundación ofrece acceso a una plataforma de e-learning que le enseña a los adultos mayores a digitalizarse mediante manuales e instructivos que abordan desde el uso de Smartphones a Excel. Para Travesía 100 digitalizarse significa aprender a usar el correo, el Smartphone, navegar en la web y perderle el miedo. Ellos ofrecen talleres que motivan a entender esto. Los cursos se pueden encontrar en www.travesia100.cl

Fundación Amanoz[9] editar

Busca combatir la soledad de los adultos mayores. Ofrecen acompañamiento presencial y telefónico a adultos mayores en residencias. Cuentan con 450 voluntarios, quienes además están capacitados para informar e instruir respecto al uso de las tecnologías, pagos de cuentas y acceso a beneficios.

Fundación Revivir[10] editar

La fundación tiene presencia en cinco regiones de Chile y los programas que ofrecen están dirigidos a adultos mayores autovalentes y vulnerables, todos los beneficiarios pertenecen al 40% más pobre.

Administran condominios de viviendas tuteladas, en donde residen de manera independiente personas mayores que tienen pocas redes de apoyo, los monitorean para que puedan obtener sus beneficios. Tienen alianzas colaborativas con distintas universidades para que se los acompañe y contenga emocionalmente a aquellos que han visto deteriorada su salud mental

Véase Tambien editar

Enlaces Externos editar

Referencias editar

  1. Pariente, Emiliana (24 de julio de 2020). «Brecha digital y tercera edad, ¿se están quedando fuera?». La Tercera. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  2. Martínez, Mata, Vega, Yolanda, Susana, Marco (Diciembre 2020). «brechas de inclusión digital en Chile». informe inclusion digital_21en (subtel.gob.cl). 
  3. Letelier Loyola, Enrique (23 de mayo de 2019). «Acceso a la justicia y brecha digital en los adultos mayores. Informe sintético sobre la cuestión en Chile». Trayectorias Humanas Trascontinentales (5). ISSN 2557-0633. doi:10.25965/trahs.1374. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  4. Letelier Loyola, Enrique (23 de mayo de 2019). «Acceso a la justicia y brecha digital en los adultos mayores. Informe sintético sobre la cuestión en Chile». Trayectorias Humanas Trascontinentales (5). ISSN 2557-0633. doi:10.25965/trahs.1374. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  5. Letelier Loyola, Enrique (23 de mayo de 2019). «Acceso a la justicia y brecha digital en los adultos mayores. Informe sintético sobre la cuestión en Chile». Trayectorias Humanas Trascontinentales (5). ISSN 2557-0633. doi:10.25965/trahs.1374. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  6. Kusumota, Andreotti Diniz, Mendonça Ribeiro,Costa da Silva,Galhardo Figueira, Resende Rodrigues,Partezani Rodrigues, Luciana, Maria Angelica, Renato, Lara Lesa, Ana Laura, Fernanda, Rosalina Aparecida (30 de enero de 2022). «Impacto de los medios de comunicación social digitales en la percepción de soledad y aislamiento social en las personas mayores». Impacto de los medios de comunicación social digitales en la percepción de soledad y aislamiento social en las personas mayores. 
  7. Martínez, Mata, Vega, Yolanda, Susana, Marco (diciembre 2020). «brechas de inclusión digital en Chile». informe inclusion digital_21en (subtel.gob.cl). 
  8. Pariente, Emiliana (24 de julio de 2020). «Brecha digital y tercera edad, ¿se están quedando fuera?». La Tercera. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  9. Pariente, Emiliana (24 de julio de 2020). «Brecha digital y tercera edad, ¿se están quedando fuera?». La Tercera. Consultado el 25 de noviembre de 2022. 
  10. Pariente, Emiliana (24 de julio de 2020). «Brecha digital y tercera edad, ¿se están quedando fuera?». La Tercera. Consultado el 25 de noviembre de 2022.