Anexo:Retrato de hombre

Retrato de hombre o retrato de caballero son las denominaciones convencionales de los retratos pictóricos de personajes masculinos que no han podido ser identificados; aunque sí se ha establecido su condición de retrato, descartándose la posibilidad de otro tipo de representación (particularmente, la de pintura religiosa -imagen devocional de un santo-, u otras, como la alegoría -por ejemplo, El sueño del caballero (Pereda)-). A veces se suele completar su denominación con algún elemento identificativo de su atuendo u otras características distintivas. En el caso de no ser de edad adulta, se utilizan más adecuadamente las denominaciones retrato de niño, retrato de joven o retrato de anciano. En algunos casos son desconocidos tanto el retratado como el retratista.[1]


Antigüedad editar

En las técnicas principales de la pintura romana (mosaico y fresco) es menos habitual que en la escultura el género del retrato (retrato romano); aunque sí en dos tipologías muy concretas:

Edad Media editar

La presencia de donantes no identificados en pinturas religiosas del arte gótico permite considerar un "retrato de hombre" el detalle que lo recoja exclusivamente dentro de una composición mayor, o la tabla separada de un políptico. Véase retrato de donante.

Edad Moderna editar

El final del Gótico y el comienzo del Renacimiento coinciden con el Humanismo, cuyo antropocentrismo y búsqueda de la fama[2]​ estimula la producción de retratos, no obstante lo cual muchos de ellos no indican su identidad.


siglo XVI editar

siglo XVII editar

Edad Contemporánea editar

Véase también editar

Notas editar

Enlaces externos editar