Cambio climático en América Latina

cambio climático en América Latina

El cambio climático en América Latina comprende las causas, efectos y estrategias de mitigación y adaptación al cambio climático disponibles para América Latina.

Una sequía particularmente intensa en Nicaragua en el 2011, documentada por el Centro Internacional de Agricultura Tropical.

El aumento de la temperatura desde el período industrial (1850) de 1 °C ya ha afectado distintos componentes del sistema climático de América Latina, incluyendo la temperatura, las precipitaciones, los fenómenos climáticos de El Niño y La Niña, los ecosistemas costeros y los glaciares tropicales.[1][2]​ Los impactos del cambio climático se suman a otras situaciones de degradación ambiental, como la deforestación,[2]​ lo que aumenta los efectos negativos del cambio climático.[3][4]

La ausencia de compromisos políticos, una institucionalidad débil[5][6]​ y brechas en el conocimiento científico son algunos de los factores que dificultan la capacidad de adaptación y la implementación de medidas de mitigación en América Latina.

En América Latina, la vulnerabilidad al cambio climático se suma a otras vulnerabilidades y riesgos, como la pobreza y la falta de acceso a infraestructuras básicas. Asimismo, la región se enfrenta a desafíos significativos en sostenibilidad ambiental y capacidad de adaptación al cambio climático debido a las características socioeconómicas.[7]​ El Quinto Informe del IPCC advierte sobre las "trampas de pobreza"[2]​ en las que la población rural y urbana de América Latina puede caer si los gobiernos no toman medidas de adaptación, si las medidas que toman son insuficientes, o si es maladaptación.

Emisiones de gases de efecto invernadero editar

Las emisiones de gases de efecto invernadero de América Latina representaban en 2018 el 8,3% del total global de emisiones.[8]​ El 46% de esas emisiones provenían del sector de energía, seguido por un 23% provenientes de la agricultura y la ganadería y un 19% de cambios en el uso del suelo (deforestación y silvicultura).[8]

Cabe resaltar, que esta región es particularmente vulnerable a los impactos negativos del cambio climático. Estas emisiones continúan en aumento, en especial en el sector energético, ya que el sector del transporte, es uno de los que más se ha incrementado en los últimos años[9]​. Por otro lado, los sectores de agricultura y ganadería, también se están incrementando debido a la expansión de las fronteras agropecuarias y por consiguiente la deforestación[7]​.

Impactos en el ambiente natural editar

Temperatura editar

La temperatura ha aumentado de manera significativa en toda América Latina, entre 0,7 °C y 1 °C desde 1970.[2]​ Se observa además un aumento de temperatura en los extremos. Hay un aumento en la temperatura media de los días más cálidos. El Quinto Informe del IPCC indica que bajo todos los escenarios SRES y todas las trayectorias RCP la temperatura para fines de siglo en América Latina va a aumentar,[2]​ con diferencias en el aumento específico según los escenarios y trayectorias.

Criosfera editar

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPPC en sus siglas en inglés) en el 2019 realizó un reporte especial sobre el Océano y la Criosfera en un Clima Cambiante.[10]​ De ese reporte de más de 700 palabras, la Alianza Clima y Desarrollo (Climate and Development Knowledge Network) sintetizó esta información y extrajo los mensajes claves para América Latina en una guía.[11]​ Dentro de los mensajes claves se indica que: las tierras congeladas de alta montaña de América Latina se están derritiendo y esto tiene consecuencias para la sociedad.

Los glaciares ubicados en zonas tropicales han experimentado retrocesos de manera sostenida en las últimas tres décadas, intensificando la tendencia de retraimiento.[2]​ La pérdida de glaciares se ha intensificado a partir de 2010, sobre todo en la zona de la Cordillera de los Andes de Argentina y Chile.[12]​ La situación es particularmente crítica en los glaciares tropicales andinos.[2]​ Estos glaciares son la principal fuente de agua dulce para agricultura, energía hidroeléctrica y consumo humano en países como Perú, Bolivia, Colombia y Venezuela.[13]​ La retracción de los glaciares en estas zonas ocasiona deslaves y cambios en los cursos de los ríos, lo que amenaza las poblaciones que en las áreas bajas de la montaña.[11]

Las cuencas hidrográficas y líneas divisorias de agua sufren impactos locales y regionales de gran alcance debido a los cambios en la criósfera.[11]​ La escorrentía en los ríos alimentados por los glaciares están disminuyendo y esto no se pueden revertir. Se prevé que los pequeños glaciares que se encuentran en los Andes pierdan el 80% de su masa de hielo actual para el 2100 bajo escenarios de altas emisiones.[11]​ Se espera que el derretimiento de los glaciares y el permafrost liberen metales pesados, especialmente mercurio, lo que reduce la calidad del agua para los organismos de agua dulce, así como para el uso doméstico y agrícola.

Los ecosistemas de alta montaña, incluyendo especies de plantas, como las de animales, ya están siendo afectados a medida que el hielo y la nieve se derriten y retroceden. Se están observando desplazamientos de especies desde altitudes más bajas hacia mayores alturas en las montañas , y algunas especies se quedarán sin un hábitat con un clima adecuado para sobrevivir.[11]

Los desastres naturales en las zonas de alta montaña han aumentado. Los deslizamientos de tierra, como resultado del derretimiento de la criósfera están afectando a las personas y la infraestructura. En las próximas décadas se proyecta que este retroceso de los glaciares causará que las laderas sean menos estables y se espera que aumenten la cantidad de lagos glaciares. Habrá inundaciones por desbordes violentos de los lagos glaciares, deslaves y avalanchas de nieve en nuevos lugares y en diferentes estaciones.[11]

Precipitaciones editar

La región percibe el 30% de la precipitación mundial y una tercera parte de los recursos hídricos renovables del mundo, ya que cuenta con vastas cuencas como son la del río Amazonas y la del río de La Plata, pero la distribución espacial y temporal de la precipitación es muy heterogénea y eso genera serias dificultades de acceso al agua. 

Las precipitaciones aumentaron en el Sud-Este de América del Sur, como es el sudeste de Brasil, centro este de Argentina, Uruguay, y Paraguay, partes de Bolivia, noroeste de Perú y Ecuador; y, por el contrario, disminuyeron en el centro-sur de Chile, el Nor-Este de Brasil, sur de Perú y parte de Centroamérica y México.[7]​ Estas tendencias  crecientes y  decrecientes  de las  precipitaciones, así como el acortamiento de la estación lluviosa, aumento en la frecuencia e intensidad de eventos hidrometeorológicos extremos, mayor frecuencia de huracanes severos y aumento en el nivel medio del mar.[14]​ Los patrones de precipitaciones ya están cambiando en el sistema climático de América Latina, con aumentos en las inundaciones y en las sequías. La región sudeste de América del Sur ha experimentado un aumento en las precipitaciones, mientras que la región centro y sur de Chile experimenta un aumento en las sequías.[2]

Proyecciones editar

  • Para mediados de siglo, se prevé que el aumento de la temperatura y la disminución de la humedad del suelo harán que la sabana reemplace gradualmente al bosque tropical en la cuenca oriental del Amazonas.
  • Para fines del siglo XXI, el calentamiento en América del Sur llegaría a los 4 °C con reducción de las lluvias en la región tropical y aumentos (15-20%) en el sud este de América del Sur, así como se espera que aumenten la cantidad de días y noches cálidas y las lluvias intensas.[7]
  • En las zonas más secas, el cambio climático probablemente agravará la sequía, lo que provocará la salinización (aumento del contenido de sal) y la desertificación (degradación de la tierra) de las tierras agrícolas. Se prevé que la productividad del ganado y algunos cultivos importantes como el maíz y el café disminuyan, con consecuencias adversas para la seguridad alimentaria. En las zonas templadas, se prevé que aumenten los rendimientos de la soja.
  • Se prevé que el aumento del nivel del mar aumentará el riesgo de inundaciones, el desplazamiento de personas, la salinización de los recursos de agua potable y la erosión costera en las zonas bajas.
  • Se prevé que los cambios en los patrones de precipitación y el derretimiento de los glaciares afectarán significativamente la disponibilidad de agua para el consumo humano, la agricultura y la generación de energía.

Impactos en las personas editar

Impactos económicos editar

La distribución desigual de los ingresos en la región genera altos niveles de pobreza, en especial en las zonas rurales. Esta situación genera mayor vulnerabilidad a las condiciones climáticas.[7]​ El 25% de las exportaciones de América Latina proviene del sector agrícola.[8]​ Uno de los desafíos más grandes para la región es el alto grado de primarización de las economías.

Agricultura editar

El impacto del cambio climático en los países de América Latina es significativo, por su dependencia de la agricultura y los recursos naturales, por su poca capacidad adaptativa en diversos segmentos de la población, así como la ubicación geográfica de algunos países.[7]

Se espera que la región sudeste de América del Sur, tenga un incremento o se sostenga, la producción agropecuaria hasta mediados del siglo, en la región central de Chile y el centro oeste de Argentina no se afectaría la seguridad alimentaria pero sí podría verse afectada en el Noreste de Brasil, parte de la Región Andina y Centroamérica, que podrían afectar el rendimiento de los cultivos y las economías locales[7]​ Distintos modelos muestran que habrá un rendimiento en los principales cultivos de granos en América Latina y partes del Caribe.[15]​ Esto no solamente afectará a la economía sino que también pondrá en riesgo la seguridad alimentaria de estos países.[8][15]

Por otro lado, se esperan desplazamientos en altitud y latitud de las zonas para el cultivo y el aumento de enfermedades, lo cual perjudicaría a los sectores más pobres de la región, esta situación, podría verse agravada con el retroceso de los glaciares, reducción de la precipitación y el aumento en la evapotranspiración, desencadenando a su vez, mayor vulnerabilidad en abastecimiento de agua en las zonas semiáridas y los Andes tropicales para la producción de alimentos y demás usos.[7]

La deforestación, debido a la expansión de las actividades agropecuarias, ha agravado el  proceso de degradación del suelo, la  pérdida de biodiversidad  y  el aumento de la vulnerabilidad de las comunidades expuestas a inundaciones, deslizamientos de tierra y sequías.[7]​ El alto grado de desertificación ya existente en América Latina constituye un riesgo para la seguridad alimentaria en la región.[11]​ El Informe especial sobre el cambio climático y la tierra advierte una disminución del 8% al 14% del producto agrícola como efecto de la desertificación.[11]

Cambio climático por país de América Latina editar

Referencias editar

  1. «4 efectos del cambio climático que ya se pueden ver en América Latina». BBC News Mundo. Consultado el 19 de abril de 2021. 
  2. a b c d e f g h Magrin, G.O., J.A. Marengo, J.-P. Boulanger, M.S. Buckeridge, E. Castellanos, G. Poveda, F.R. Scarano, and S. Vicuña, 2014: Central and South America. In: Climate Change 2014: Impacts, Adaptation, and Vulnerability. Part B: Regional Aspects. Contribution of Working Group II to the Fifth Assessment Report of the Intergovernmental Panel on Climate Change [Barros, V.R., C.B. Field, D.J. Dokken, M.D. Mastrandrea, K.J. Mach, T.E. Bilir, M. Chatterjee, K.L. Ebi, Y.O. Estrada, R.C. Genova, B. Girma, E.S. Kissel, A.N. Levy, S. MacCracken, P.R. Mastrandrea, and L.L. White (eds.)]. Cambridge University Press, Cambridge, United Kingdom and New York, NY, USA, pp. 1499-1566.
  3. Sampaio, Gilvan; Nobre, Carlos; Costa, Marcos Heil; Satyamurty, Prakki; Soares‐Filho, Britaldo Silveira; Cardoso, Manoel (2007). «Regional climate change over eastern Amazonia caused by pasture and soybean cropland expansion». Geophysical Research Letters (en inglés) 34 (17). ISSN 1944-8007. doi:10.1029/2007GL030612. Consultado el 19 de abril de 2021. 
  4. López-Rodríguez, Sara R.; Blanco-Libreros, Juan F. (2008-03). «Illicit crops in tropical America: deforestation, landslides, and the terrestrial carbon stocks». Ambio 37 (2): 141-143. ISSN 0044-7447. PMID 18488560. doi:10.1579/0044-7447(2008)37[141:icitad]2.0.co;2. Consultado el 19 de abril de 2021. 
  5. Keim, Mark E. (2008-11). «Building human resilience: the role of public health preparedness and response as an adaptation to climate change». American Journal of Preventive Medicine 35 (5): 508-516. ISSN 1873-2607. PMID 18929977. doi:10.1016/j.amepre.2008.08.022. Consultado el 19 de abril de 2021. 
  6. Lesnikowski, A C; Ford, J D; Berrang-Ford, L; Paterson, J A; Barrera, M; Heymann, S J (1 de octubre de 2011). «Adapting to health impacts of climate change: a study of UNFCCC Annex I parties». Environmental Research Letters 6 (4): 044009. ISSN 1748-9326. doi:10.1088/1748-9326/6/4/044009. Consultado el 19 de abril de 2021. 
  7. a b c d e f g h i Magrin, Graciela O. (Diciembre de 2015). Documento de Proyecto Adaptación al cambio climático en América Latina y el Caribe. Consultado el 01/06/2022. 
  8. a b c d Sánchez, Luis; Bárcena Ibarra, Alicia; Samaniego, Joseluis; Galindo, Luis Miguel; Ferrer, Jimy; Alatorre, José Eduardo; Stockins, Pauline; Reyes, Orlando et al. (31 de diciembre de 2018). La economía del cambio climático en América Latina y el Caribe: una visión gráfica. Consultado el 4 de julio de 2021. 
  9. Bárcena, Alicia; Samaniego, Joseluis; Peres Núñez, Wilson; Alatorre, José Eduardo (2020). La emergencia del cambio climático en América Latina y el Caribe ¿seguimos esperando la catástrofe o pasamos a la acción?. ISBN 978-92-1-047955-4. OCLC 1246621839. Consultado el 2 de junio de 2022. 
  10. poloczanska, elvira (8 de marzo de 2020). «The IPCC Special Report on Ocean and Cryosphere in a Changing Climate - a view from the mountain tops to the deepest depths». dx.doi.org. Consultado el 28 de julio de 2021. 
  11. a b c d e f g h CDKN. «El Informe Especial del IPCC sobre Cambio Climático y la Tierra: ¿Qué significa para América Latina?». Climate and Development Knowledge Network. Consultado el 19 de julio de 2021. 
  12. «El estado del clima en América Latina y el Caribe... | E-Library». library.wmo.int. Consultado el 17 de agosto de 2021. 
  13. «Glaciares tropicales andinos: ¿con fecha de expiración?». Sostenibilidad. 24 de diciembre de 2013. Consultado el 20 de julio de 2021. 
  14. Magrin, G.O. (2014). Central and South America. In: Climate Change 2014: Impacts, Adaptation, and Vulnerability. Part B: Regional Aspects. Contribution of Working Group II to the Fifth Assessment Report of the Intergovernmental Panel on Climate Change. Cambridge, United Kingdom and New York, NY, USA: Cambridge University. 
  15. a b Rodríguez De Luque, Jesús J.; González-Rodríguez, Carlos E.; Gourdji, Sharon; Mason-D’Croz, Daniel; Obando-Bonilla, Diego; Mesa-Diez, Jeison; Prager, Steven D.; Rodríguez De Luque, Jesús J. et al. (2016-12). «Impactos socioeconómicos del cambio climático en América Latina y el Caribe: 2020-2045». Cuadernos de Desarrollo Rural 13 (78): 11-34. ISSN 0122-1450. doi:10.11144/Javeriana.cdri3-78.iscc. Consultado el 4 de julio de 2021. 

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