El Coloso de Nerón fue una estatua levantada en la Antigua Roma que representaba al emperador del mismo nombre. Realizado en bronce y de tamaño colosal (30 metros),[1]​ estaba situado frente a la plataforma del Templo de Venus y Roma, cerca del Coliseo Romano.

El Coloso de Nerón
Colossus Neronis
Localización
País Italia
Ubicación Roma
Coordenadas 41°53′28″N 12°29′29″E / 41.891111, 12.491389
Información general
Usos Escultura
Inicio 75 d. C.
Altura 31 m
Detalles técnicos
Material bronce
Localización del Coloso (en rojo en el centro) en un mapa de Roma.

Descripción editar

La estatua originalmente fue erigida por el emperador Nerón en el exterior del vestíbulo porticado de la Domus Aurea. Fue diseñada por el arquitecto griego Zenodoro y en un primer momento representaba a Nerón desnudo, como Sol-Helios.

Tras la muerte de dicho emperador, el emperador Vespasiano cambió la cabeza al añadir una corona de rayos, atributo del dios Sol, y nombrándolo Coloso Solís permaneciendo la estatua en su posición original, hasta que Adriano la trasladó varios metros, con ayuda de elefantes, para erigir el Templo de Venus y Roma. El Coloso fue situado sobre un pedestal de mampostería recubierto de mármol. Los restos que se conservaban de dicho pedestal fueron destruidos en 1936. El emperador Cómodo sustituyó la cabeza por una suya como Hércules, pero a su muerte fue restaurada a su forma anterior.[2]

No se sabe exactamente cuándo cayó el Coloso, cuya última mención se encuentra en la Cronografía de 354, probablemente fue destruido durante el saqueo de Roma de 410 o durante los terremotos del siglo V, y el metal fundido para reaprovecharlo. Es posible que se mantuviera en pie aún en la Alta Edad Media debido a que Beda el Venerable (672-735) habla de él en uno de sus poemas.[3]​ Lo cierto es que hacia el siglo XI d. C. los romanos habían transferido su nombre y poderes al anfiteatro próximo, el Coliseo.

Referencias editar

  1. Plinio el Viejo. Historia Natural. p. XXXIV.45. 
  2. Dión Casio. Historia Augusta. p. LXXII.22. 
  3. Howard Vernon Canter (1930). Venerable Bede and the Colosseum. Transactions and Proceedings of the American Philological Association. p. 150-164.