Creación de la República de Guatemala

La Creación de la República de Guatemala ocurrió el 21 de marzo de 1847 cuando el presidente del Estado de Guatemala, capitán general Rafael Carrera y Turcios firmó un decreto proclamando a Guatemala como República soberana e independiente,[1]​ separándola definitivamente de la patria federada centroamericana, y se hizo llamar «fundador de la Nueva República». Con esta medida Guatemala pudo iniciar sus acciones como Estado soberano y entablar relaciones con las potencias europeas,[2]​ y daba por el suelo a las aspiraciones del partido liberal de instituir una república centroamericana.

Antecedentes editar

Rafael Carrera fue el último gobernador del Estado de Guatemala y el primer presidente de la República. Asumió el poder en 1844, nombrado por el clero y el partido conservador dirigido por el Clan Aycinena.[Nota 1]​ Por ese entonces, José Milla y Vidaurre era liberal, y le escribió este himno crítico y mordaz al teniente general Carrera, himno que los liberales memorizaron de tanto repetir, a pesar de su escasa calidad poética:[3]

Himno Patriótico, en loor del Exmo. Teniente general, R. Carrera Jefe del Ejército, etc. con motivo de la expedición salvadoreña:

Quia pulvis es, et in pulverem reverteris
Porque eres polvo, y en polvo te convertirás

«Hijo de la miseria y de la nada
Tiranuelo opresor de un pueblo inerme
Zorra cobarde que acomete osada
a un gallinero que tranquilo duerme.

General, Director, héroe, caudillo;
Arcángel, qué sé yo cómo te llaman.
Entre bordados mal envuelto pillo
Ya los pueblos, de ti venganza claman.
Por entre esa comparsa de malvados,
Digna guardia de honor de tu persona,
Ellos van a pasar desesperados
A romper en tu frente tu corona.

En pos del enemigo corres tarde,
teniente general, pues ha sonado
Al fin tu hora falta, tiembla cobarde,
Dentro de tus harapos de soldado.»
«Excecrada y maldita tu memoria,
Excecrado será cuanto tú hiciste,
Y si ha de hablar de ti, dirá la historia,
Que tú ni aún ser déspota supiste.

Lobos, País, Carrera, veteranos
Del crimen, y en el terror de las banderas,
Farsa vil y burlesca de tiranos,
Parodis de Cartuch son charreteras.
Aycinena, Pavón fuera señores,[Nota 2]
Fuera con vuestro rancio servilismo,
¿Soñásteis ser tal vez conservadores,
O darnos una burla del torismo?

Honorable Marqués, no más Bretaña,
No más status quo ni tiranía:
Vaya que su excelencia... no se engaña,
Sin el statuquo, por Dios, ¿qué haría? [...]»
Tomado de: Hernández de León, Federico (30 de mayo de 1959). «El Capítulo de las Efemérides». Diario La Hora. .[3][4]

Como nota curiosa, debe indicarse que Carrera no solo no persiguió a Milla y Vidaurre, sino que dos años después, cuando Milla se hizo conservador, Carrera lo invitó a formar parte de su gobierno, en el que sirvió en diferentes posiciones hasta 1871; Milla también llegó a ser amigo y consejero de Carrera.[3]

Intento de colonia belga editar

En 1842, había arribado a Centroamérica un barco enviado por el monarca Leopoldo I de Bélgica;[5]​ cuando los belgas observaron las riquezas naturales que poseía la región de Izabal, decidieron establecerse en Santo Tomas de Castilla y construir infraestructura en la región. Carrera, aconsejado por Juan José de Aycinena y Piñol les dio la región a perpetuidad a cambio de que la compañía pagara dieciséis mil pesos cada año al gobierno de Guatemala.[6]​ Los colonos tenían que convertirse al catolicismo y adoptar la ciudadanía guatemalteca, pero tenían el privilegio de tener su propio gobierno;[5]​ también se comprometieron a dar al gobierno guatemalteco dos mil fusiles, a construir un puente de metal sobre el río Motagua y a construir un puerto en la bahía de Amatique, en la localidad de Santo Tomás de Castilla.[7]​ Además de las obras de infraestructura, Carrera consideraba que la colonia de belgas católicos era una buena contención a las pretensiones de los británicos protestantes y su contrabando comercial en Belice.[8]

Los primeros setenta y seis colonos arribaron junto con los fusiles prometidos y los primeros sacerdotes jesuitas que regresaban a Guatemala desde 1765; el representante de la colonia, Remy de Puydt prometió que otros setecientos colonos arribarían en los próximos meses e iniciarían los trabajos a que se comprometió para obtener la concesión.[9]​ Se estableció así la Colonia belga en Guatemala, pero las condiciones del área eran inhóspitas y empezaron a mermar rápidamente la salud de los belgas.[9]​ Para 1850, la colonia ya había fracasado, las obras de infraestructura prometidas no se construyeron, y los colonos belgas se habían dispersado al interior de la República de Guatemala.[10]

Colonización belga en 1844[11]
Grabados y mapas elaborados por los belgas

Creación de la República editar

Acta de fundación editar

La siguiente galería de imágenes muestra las páginas 73 a la 76 del libro Recopilación de las leyes de Guatemala, 1821-1869 de Rafael Pineda de Mont, impreso en 1869:[1]

Organización territorial editar

El 25 de febrero de 1848 la región de Mita fue segregada de Chiquimula, convertida en departamento y dividida en tres distritos: Jutiapa, Santa Rosa y Jalapa.[12]

Específicamente, los distritos quedaron de la siguiente forma:

Distritos del departamento de Mita[12]
Distrito Listado
Jutiapa Incluyó a:

Jutiapa como cabecera, Yupiltepeque, Asunción y Santa Catarina Mita y los valles aledaños que eran Suchitán, San Antonio, Achuapa, Atescatempa, Zapotitlán, Contepeque, Chingo, Quequesque, Limones y Tempisque; además, incluía a Comapa, Jalpatagua, Asulco, Conguaco y Moyuta.[12]

Santa Rosa Incluyó a:

Santa Rosa como cabecera, Cuajiniquilapa, Chiquimulilla, Guazacapán, Taxisco, Pasaco, Nancinta, Tecuaco, Sinacantán, Isguatán, Sacualpa, La Leona, Jumay y Mataquescuintla.[12]

Véase también editar

Notas editar

  1. El clero y el Clan Aycicena estaban al mando del III marqués de Aycineda: el sacerdote Juan José de Aycinena y Piñol, quien luego sería consejero de Carrera
  2. Se refiere aquí los miembros del clan Aycinena.

Referencias editar

Bibliografía editar