Cuevas de la Lluera

Bien de Interés Cultural

Las cuevas de la Lluera son dos cavidades naturales de pequeñas dimensiones (a veces se utiliza la denominación cueva de la Lluera para la principal, obviando la pequeña, y desde el punto de vista arqueológico cueva de la Lluera I y cueva de la Lluera II). Contienen representaciones prehistóricas del Paleolítico, que se encuentran en la parroquia de San Juan de Priorio, en el municipio de Oviedo, Asturias (España). También se han encontrado restos arqueológicos de época Solutrense (21 000 a 17 000 AP) y del Magdaleniense Superior final. Los primeros asociados con parte de los grabados.[2][3]

Cuevas de la Lluera

Entrada
Localización geográfica
Continente Europa
Ecorregión Cornisa cantábrica
Situación San Juan de Priorio
Coordenadas 43°20′05″N 5°56′02″O / 43.3347, -5.93395
Localización administrativa
País EspañaBandera de España España
Comunidad Asturias Asturias
Localidad Oviedo
Hallazgos
Descubrimiento 1979
Condiciones de visita
Acceso Visitas en julio y agosto (viernes, sábado y domingo), reservando en 674 800 385 (miércoles a domingo, de 10 a 16 h.)
Mapa de localización
Cuevas de la Lluera ubicada en Asturias
Cuevas de la Lluera
Cuevas de la Lluera
Ubicación (Asturias).
Bien de interés cultural
Patrimonio histórico de España
Categoría Monumento (cueva)[1]
Código RI-51-0010089
Declaración 07-08-1997
Construcción Paleolítico Superior - Epipaleolítico

Descripción editar

La cueva principal fue descubierta en 1979 y consiste en dos cortas galerías que se unen por el interior y comparten una misma boca orientada al sur-sureste y contiene una serie de grabados, concentrados en la galería occidental, la más amplia, iniciándose en el porche y penetrando unos cinco metros hacia el interior.

Las representaciones comienzan en la pared oeste del pórtico con la de un caballo solitario. Progresando hacia la galería hallamos la representación de un uro o gran bóvido, un caballo, una cierva y un macho cabrío.[3][nb 1]​ Este conjunto, obra de un mismo momento, destacan otras figuras inacabadas de animales.

Ya en el interior de la galería, y en zona de menor iluminación, una concavidad bautizada como la Gran Hornacina reúne el repertorio figurativo más elaborado y sugestivo de la caverna. Frente a la confusión de lo precedente, aquí reina el orden en un bestiario dominado por la fórmula característica caballo-bóvido. Dos uros, la indicación del sexo es notable en ambos, se disponen inclinados de derecha a izquierda con la cabeza orientada hacia el exterior de la cavidad. Ambas figuras están completas, con las cabezas extendidas hacia delante como una prolongación de los cuerpos poderosos apoyados en cortas patas. Algún bóvido más, caballos incompletos, algunas ciervas, bisontes forman parte también del contenido de esta zona.

En la pared oriental, en el denominado Friso Anterior, dos grandes ciervas, una de las cuales se acerca al metro y medio de longitud, fragmentos de figuras inacabadas, etc. En el Friso Medio aparecen, entre otros, unas ciervas y un macho cabrío. En la Pequeña Hornacina, dos animales que podrían ser mamuts.

Cincuenta metros aguas arriba se abre otra pequeña cueva, cuyos muros acogen una quincena de figuras geométricas realizadas con la misma técnica que en la anterior, aparece el triángulo sexual femenino.

Estas cuevas podrían haber actuado como santuarios exteriores complementarios, resultando de la suma de los contenidos artísticos de ambos, figurativismo en la primera y abstracción en la segunda, el modelo iconográfico característico de las fases de madurez del arte rupestre paleolítico.

Acceso editar

Se llega por la carretera de Grado-Oviedo (N-634), tomando la desviación hacia Las Caldas y a la derecha por la AS-322 desde la que se asciende a San Juan de Priorio.

Notas editar

  1. Según indica Altuna, muchos de los trabajos sobre las representaciones del Paleolítico superior utilizan términos de forma no precisa o errónea. Así por ejemplo, no existe en zoología la familia de los «cápridos», ya que las cabras pertenecen a la familia de los «bóvidos», a la que también pertenecen bisontes o uros, pero el término bóvido no permite distinguir un bisonte o un uro. Algo semejante ocurre con el término cérvido que según autores puede incluir a los renos y casi nunca incluye a los corzos y otros que también son cérvidos (Altuna, 2002, pp. 21-22).

Referencias editar

  1. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. «Consulta a la base de datos de bienes inmuebles». Consultado el 29 de noviembre de 2017. 
  2. «Las cuevas». Cuevas de la Lluera. Archivado desde el original el 13 de abril de 2014. Consultado el 12 de abril de 2014. 
  3. a b Gobierno del Principado de Asturias. «Cueva de la Lluera» (PDF). Tito Bustillos. Centro de arte rupestre. Archivado desde el original el 27 de diciembre de 2013. Consultado el 12 de abril de 2014. 

Bibliografía editar

Enlaces externos editar