Escaramuza de Many Branch Point

enfrentamiento durante la guerra de las Malvinas

La escaramuza de Many Branch Point fue un combate breve entre una patrulla argentina y una británica durante la Guerra de las Malvinas.

Escaramuza de Many Branch Point
Parte de Guerra de las Malvinas
Fecha 10 de junio de 1982
Lugar Bandera de Argentina Many Branch Point, Islas Malvinas
Coordenadas 51°31′45″S 59°24′53″O / -51.52925, -59.414747222222
Resultado Bandera de Argentina Victoria Argentina
Beligerantes
Bandera de Argentina Argentina Bandera del Reino Unido Reino Unido
Comandantes
Bandera de Argentina José Martiniano Duarte Bandera del Reino Unido Capitán Gavin Hamilton  
Unidades militares
Bandera de Argentina 1.ª Sección de la Compañía de Comandos 601 Bandera del Reino Unido Servicio Especial Aéreo
Fuerzas en combate
Bandera de Argentina 3 comandos Bandera del Reino Unido 192 Soldados
Bandera del Reino Unido 3 Comandos
Bajas
0 13 muertos
11 prisionero

Preludio editar

El 9 de junio diez efectivos de la 1.ª Sección de Asalto de la Compañía de Comandos 601 conducida por el teniente primero José Martiniano Duarte partió de Puerto Howard con destino a Many Branch Point. Su misión era establecer un puesto de observación para informar al comando argentino sobre la base británica en San Carlos. A la tarde cinco comandos regresaron quedando Duarte con tres suboficiales.[1]

Desarrollo editar

El 10 de junio la patrulla al mando del teniente primero Duarte se desplazaba en una sucesión de cerros que bordea la costa en busca de un mejor punto de observación. Encontraron y rodearon una suerte de callejón formado por dos filas de rocas de un largo de 20 metros. Escucharon un murmullo dentro del corredor, por lo que retrocedieron un poco para discutir si atacar o no. En ese momento un soldado británico salió del callejón. El teniente primero Duarte gritó al británico: «¿argentino o inglés?» y después dijo: «¡hands up!, ¡hands up!» (en español: ¡manos arriba!, ¡manos arriba!). El británico se lanzó a un costado y disparó su arma a los argentinos. Inmediatamente el tiroteo se generalizó.[2]

El teniente primero Duarte avistó en el callejón a dos combatientes británicos corriendo, a los cuales abrió fuego. Uno, el capitán Gavin Hamilton, cayó muerto. El otro, el cabo primero Charlie Fonseca, se rindió.[3][4]

Consecuencias editar

La Compañía de Comandos 601 despojó al cabo primero Fonseca de cartografía, una clave de comunicaciones y un código para hablar con el HMS Fearless (L10) y con la isla Ascensión.[5]

La noche del 10 de junio un grupo de tres fragatas británicas bombardeó posiciones argentinas en Puerto Howard. Los argentinos apreciaron imprecisión en los disparos, lo cual significaba que la pareja de soldados británicos estaban como observadores de artillería.[6][7]

Después los argentinos recuperaron al cadáver del capitán Hamilton, al cual le sustrajeron documentación y una baliza encendida.[8]​ Los argentinos velaron al capitán Hamilton junto al conscripto Fernández del Regimiento de Infantería 5 para sepultarlos en Puerto Howard.[6]​ Excepcionalmente, los argentinos permitieron que la bandera británica fuera colocada en su ataúd antes del entierro, en reconocimiento por su valor.

La tumba de Hamilton se halla en una colina.

Véase también editar

Referencias editar

  1. Ruiz Moreno, 2016, p. 345.
  2. Ruiz Moreno, 2016, pp. 346-347.
  3. Ruiz Moreno, 2016, p. 347.
  4. Bicheno, Hugh (2006) Razor's Edge: The Unofficial History of the Falklands War. London. Weidenfield & Nicholson. ISBN 978-0-7538-2186-2
  5. Ruiz Moreno, 2016, p. 348.
  6. a b Ruiz Moreno, 2016, pp. 351-352.
  7. Ruiz Moreno, 2017, pp. 345-346. Apenas había concluido esta tarea cuando se escuchó una explosión, que en un primer momento fue atribuida al estallido de una mina. Pero al rato se percibieron claramente tres cañonazos navales y todos buscaron cubiertas: los observadores ubicados en Monte María, atrás y arriba de Howard, indicaron posteriormente que se trataba de tres fragatas desde la distancia habitual de diez a doce kilómetros. El bombardeo duró hasta las tres de la mañana y fue muy impreciso: le faltaba observación. El teniente primero Fernández supuso que el primer disparo, aislado, fue un llamado al observador, al no recibir su comunicación: y los posteriores se limitaron a dirigirlos hacia las posiciones previamente marcadas —la ubicación de la Compañía B, sobre un cerro—, pero sin causar efectos.
  8. Ruiz Moreno, 2016, p. 349.

Bibliografía utilizada editar

  • Ruiz Moreno, Isidoro J. (2016). Comandos en acción (2.ª edición). Buenos Aires: Claridad. ISBN 978-950-620-312-2.