A pesar de haber nacido en Pescina se trasladó pronto a Roma, donde recibió su educación.<ref name="bailly11"/> Mazarino se formó con los jesuitas en el Colegio Romano, a donde fue enviado con siete años,<ref name="bailly12">[[#Bibliografía|Bailly (1969)]], p. 12.</ref> y se mostró como un alumno brillante y un joven con encanto para sus profesores y condiscípulos.<ref name="bailly12"/>
Acabados sus estudios, secon hizounos pajasdieciséis años, comenzó una época disipada, por lo que sus padres, gracias a patronazgo nuevamente de los Colonna, le enviaron a estudiar [[derecho canónico]] a España, a la [[Universidad de Alcalá (histórica)|Universidad de Alcalá de Henares]].<ref name="bailly14">[[#Bibliografía|Bailly (1969)]], p. 14.</ref> Durante sus tres años de estancia en la península ibérica aprendió el castellano a la perfección, habilidad que más tarde le sería de gran utilidad.<ref name="bailly14"/> Aún libertino, se enamoró de una española y, a punto de casarse, fue engañado para regresar a Italia para evitar la boda por su compañero de estudios, el hijo de su patrón el condestable Colonna.<ref>[http://historiasdealcala.wordpress.com/2014/03/07/el-amor-imposible-del-cardenal-mazarino/ José Antonio Perálvarez. El amor imposible del Cardenal Mazarino. Historias de Alcalá. 07/03/2014.]</ref><ref name="bailly14"/> De vuelta en Italia completó sus estudios.<ref name="bailly15">[[#Bibliografía|Bailly (1969)]], p. 15.</ref>
