Diferencia entre revisiones de «Bereberes»

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El ADN se trata de uno de los componentes más importantes, por no decir el más, con el que los historiadores han trabajado para resolver dudas genéticas, poblacionales o de diversas causas relacionadas con la demografía y los rasgos de una población determinada. Junto a este elemento existen otros que lo completan, como viene siendo el caso de las evidencias arqueológicas, es decir, los materiales y las evidencias escritas, las fuentes literarias.
Las poblaciones norteafricanas y las canarias, desde tiempos muy remotos, han estado conectadas ya sea por los diversos estudios biológicos que se han realizado desde la década de los ochenta o por la historia, la cual busca una respuesta al poblamiento de las islas y la relación que existe entre los canarios -antiguos tamazigh o bereberes- y los pobladores norteafricanos, principalmente los marroquíes.
 
Las evidencias apuntan a que, las poblaciones norteafricanas, comenzando por ellas, tienen cierta relación con las civilizaciones que se habían establecido en el levante peninsular o cerca de las costas del continente europeo. Varios son los análisis realizados y, entre ellos, destaca el mitocondrial o ADN, el cual intenta buscar una salida a la incógnita de cómo llegaron dichas poblaciones al continente africano. Según los estudios, existe una secuencia de genoma entre los yacimientos descubiertos en el Levante y los yacimientos procedentes del Norte de África, con una datación del 5.000 a.n.e. confirmando una continuidad genética a largo plazo en las regiones nombradas. Por otra parte, aunque estén alejados genéticamente compartiendo una ínfima parte, existe correlación entre aquellos cazadores-recolectores norteafricanos asentados en la zona del Magreb y aquellos establecidos en lugares cercanos como las costas europeas.
Aparte de las distintas pruebas genéticas, las cuales nos dan unos datos de vital importancia, como bien relatamos anteriormente las pruebas arqueológicas también nos remiten a un pasado más cercano, ofreciéndonos como resultado cerámicas de decoración cardial, la cual es muy común en las zonas costeras de la península itálica o ibérica. Si esta información se une a las evidencias genéticas no existe ningún tipo de duda de que, aunque sea de manera esporádica, existió contacto entre estas poblaciones hasta tal punto que pudieron partir de ellas.

La partición también se puede ver desde un punto de vista teórico, donde se muestran diferentes teorías sobre la neolitización. Haciendo un balance de la puesta en común según las diferentes investigaciones dadas, el Neolítico pudo haberse dado, pero no desde un punto de vista material, es decir, a través del difusionismo, sino partiendo de las ideas, hablando así de la teoría denominada “Percolativo o capilar” . Las evidencias materiales también se muestran en la fauna existente en aquel entonces, como, por ejemplo, el hallazgo de diversos elementos norteafricanos en yacimientos ibéricos, como materiales propios de África o el mismo elefante africano, afirmándose así en “el estudio del ADN obtenido de restos de Paleoloxodon reveló que sus parientes vivos más próximos son los actuales elefantes africanos del bosque (Loxodontacyclotis)”.Sin embargo, el contenido del ADN endógeno, tratándose del más estudiado para este tema, fue generalmente bajo entre las poblaciones norteafricanas y las poblaciones comprendidas en el levante peninsular o en las costas europeas, hablándonos de un 2.88% de relación entre uno y otro. No obstante, eso no descarta que las poblaciones pudieran haber entablado algo más que un mero contacto mental.
 
Sin embargo, el contenido del ADN endógeno, tratándose del más estudiado para este tema, fue generalmente bajo entre las poblaciones norteafricanas y las poblaciones comprendidas en el levante peninsular o en las costas europeas, hablándonos de un 2.88% de relación entre uno y otro. No obstante, eso no descarta que las poblaciones pudieran haber entablado algo más que un mero contacto mental. La frontera de Gibraltar probablemente pudiera haber sido el punto de partida como lo fue mucho más adelante para poblaciones como los fenicios, romanos o vándalos. De lo que sí existe constancia es que las poblaciones bereberes, de las Islas Canarias, por ejemplo, ya estaban mezcladas con los europeos antes de la conquista romana del territorio hispano o magrebí. También es indispensable comentar que a este lugar del continente africano se le denomina la tierra de las caras blancas, en contraposición a la tierra de caras negras que se ubica en el África Subsahariana, dándonos como resultado que, aunque vivan en el mismo continente, no pertenecen ni a la misma etnia y ni comparten el mismo ADN al cien por cien. Esto, físicamente, puede explicar también la relación que existe entre los europeos y los africanos pertenecientes al área del Magreb. En definitiva, existen diversas evidencias genéticas, aunque sean relativamente frágiles, que afirman la relación entre las poblaciones de Europa y las pertenecientes al continente africano.
En definitiva, existen diversas evidencias genéticas, aunque sean relativamente frágiles, que afirman la relación entre las poblaciones de Europa y las pertenecientes al continente africano.
=== Origen de los ''amazigh'' canarios ===
La colonización prehistórica canaria siempre se ha tratado de un tema bastante estudiado y castigado, no sólo por los diversos investigadores que fomentan la historia escribiéndola y transmitiéndola, sino porque, al ser un hecho singular que solamente ocurre en un archipiélago conformado por ocho islas, las teorías que surgen son diversas y muchas de ellas no se comparten entre sí. El ADN se ha tratado, ni más ni menos, que de uno de los elementos más importantes utilizados en la comunidad científica para poder combatir las diferentes teorías que surgen en referencia a los primeros habitantes canarios y de donde proceden. Para ello, se ha llevado a cabo un estudio mitocondrial que conecta al antiguo aborigen del archipiélago con el antepasado más cercano encontrado en África, uniendo así los olvidados linajes aborígenes canarios.
 
El ADN se ha tratado, ni más ni menos, que de uno de los elementos más importantes utilizados en la comunidad científica para poder combatir las diferentes teorías que surgen en referencia a los primeros habitantes canarios y de donde proceden. Para ello, se ha llevado a cabo un estudio mitocondrial que conecta al antiguo aborigen del archipiélago con el antepasado más cercano encontrado en África, uniendo así los olvidados linajes aborígenes canarios.
Según las evidencias arqueológicas, los primeros pobladores se remontan al siglo I a.n.e. (Atoche, 2013), sin embargo, se ha dado mayor apoyo a los bereberes del noroeste africano para conformar los orígenes de los denominados comúnmente “guanches” o bereberes canarios. Los estudios nos hablan de una posible mezcla con los ibéricos, es decir, los pertenecientes a la Península Ibérica, en cuanto al linaje paterno, mientras que en el materno se conserva aún el linaje bereber. Esto se explica a través de las relaciones que tuvieron los castellanos con las indígenas establecidas en las islas, las cuales proceden sin ninguna duda del Norte de África, pudiendo ser esclavas y luego liberadas tras casarse con los castellanos colonizadores.
La constitución del ADN bereber en las poblaciones canarias oscila entre un 42-73% de compatibilidad genética, principalmente con aquellas poblaciones provenientes de Mauritania o Marruecos, derivado del fondo genético materno.
 
Los estudios realizados sobre los cuerpos humanos pertenecientes a aborígenes canarios revelan que, aparte de compartir carga genética con los norteafricanos, se demuestra que la mitad de carga genética también está compartida con los humanos procedentes del sur ibérico. Esto nos da una revelación de que, aquellas poblaciones bereberes no sólo tienen una procedencia norteafricana, sino también externa de dicho continente creándose así una sociedad multiétnica.
Los estudios realizados sobre los cuerpos humanos pertenecientes a aborígenes canarios revelan que, aparte de compartir carga genética con los norteafricanos, se demuestra que la mitad de carga genética también está compartida con los humanos procedentes del sur ibérico. Esto nos da una revelación de que, aquellas poblaciones bereberes no sólo tienen una procedencia norteafricana, sino también externa de dicho continente creándose así una sociedad multiétnica. A su vez, también existen estudios arqueobotánicos que nos demuestran la existencia de relación entre las poblaciones norteafricanas, principalmente en la zona de Marruecos, con aquellas poblaciones prehispánicas del pequeño continente canario. Las plantas, según los diversos estudios, fueron de gran valía para contextualizar los estudios genéticos nombrados anteriormente, hablando así de un proceso evolutivo tanto desde un punto de vista cultural como material, a través de materia prima procedente del continente africano, bereber. Las Islas Canarias fueron colonizadas o en el siglo I a.n.e, como nombramos anteriormente, o en el primer milenio d.n.e procedentes del continente africano. Centrándonos en la segunda hipótesis para así esclarecer aún más la relación existente, el estudio de ADN sobre la cebada, tratándose de un cultivo bastante extenso realizado por los diversos canarios hasta la llegada de los conquistadores canarios, nos refleja una serie de datos que, posiblemente, relacione directamente a los indígenas canarios con las poblaciones del Norte de África. A su vez, no solamente se han basado en estudios carpológicos, sino también en estudios culturales observando cómo, hasta día de hoy, los habitantes de Marruecos siguen consumiendo dicha cebada, siendo uno de los elementos más comunes en su dieta, como lo fue para las poblaciones prehispánicas de Canarias.
 
Las Islas Canarias fueron colonizadas o en el siglo I a.n.e, como nombramos anteriormente, o en el primer milenio d.n.e procedentes del continente africano. Centrándonos en la segunda hipótesis para así esclarecer aún más la relación existente, el estudio de ADN sobre la cebada, tratándose de un cultivo bastante extenso realizado por los diversos canarios hasta la llegada de los conquistadores canarios, nos refleja una serie de datos que, posiblemente, relacione directamente a los indígenas canarios con las poblaciones del Norte de África. A su vez, no solamente se han basado en estudios carpológicos, sino también en estudios culturales observando cómo, hasta día de hoy, los habitantes de Marruecos siguen consumiendo dicha cebada, siendo uno de los elementos más comunes en su dieta, como lo fue para las poblaciones prehispánicas de Canarias.
Por otra parte, como se nombro con anterioridad, la población del Norte de África también muestra cierta relación genética con los europeos, tal y como estaba establecido para los habitantes canarios, sin embargo ¿Esto nos puede dar un resultado óptimo? Lo que si debemos de tener en cuenta es que, de una manera u otra, relaciona a las poblaciones canarias con un pasado completamente mixto, ya sea norte africano o no trae consigo una gran relación con el Levante o el continente europeo. Las dataciones obtenidas a través de radiocarbono (AMS) nos muestran la evidencia de cebada muy parecida a la de Norte de África, fruto del intercambio entre los canarios y norteafricanos o de relación genética directa. Nosotros, para seguir analizando este hecho, nos centraremos en la relación genética puesto que los últimos estudios sobre dicho tema demuestran que las Islas Canarias, después de haber sido colonizadas por los primeros pobladores, se encontraba aislada hasta la llegada de los normandos y castellanos. Por lo tanto, se concluye que existe un genotipo de los especímenes canarios y norteafricanos que coinciden entre sí, aunque el canario presenta cierta diversidad genética, esto puede corresponder a que tanto los restos carpológicos como las personas pudieron proceder de diferentes lugares como Argelia, Túnez o Marruecos. Sin embargo, la mayor parte de las evidencias apuntan a que Marruecos, aparte de ser el sitio más cercano en cuanto a geografía, también existen más resultados que asemejan a dicha población con la prehispánica de canarias.
 
Las dataciones obtenidas a través de radiocarbono (AMS) nos muestran la evidencia de cebada muy parecida a la de Norte de África, fruto del intercambio entre los canarios y norteafricanos o de relación genética directa. Nosotros, para seguir analizando este hecho, nos centraremos en la relación genética puesto que los últimos estudios sobre dicho tema demuestran que las Islas Canarias, después de haber sido colonizadas por los primeros pobladores, se encontraba aislada hasta la llegada de los normandos y castellanos. Por lo tanto, se concluye que existe un genotipo de los especímenes canarios y norteafricanos que coinciden entre sí, aunque el canario presenta cierta diversidad genética, esto puede corresponder a que tanto los restos carpológicos como las personas pudieron proceder de diferentes lugares como Argelia, Túnez o Marruecos. Sin embargo, la mayor parte de las evidencias apuntan a que Marruecos, aparte de ser el sitio más cercano en cuanto a geografía, también existen más resultados que asemejan a dicha población con la prehispánica de canarias.
En definitiva, la mitad de los estudios establecidos demuestran que hubo relación directa entre las poblaciones procedentes del Norte de África, los bereberes, y las poblaciones prehispánicas de las Islas Canarias, no sólo en evidencias antropológicas y culturales, sino también carpológicas y genéticas, las cuales nos dan más veracidad sobre el poblamiento de las Islas Canarias y, en consecuencia, adentrarnos un poco más en las poblaciones bereberes que cruzaron parte de océano Atlántico para asentarse en dichas tierras fértiles, deshabitadas y con una gran cantidad de materias primas, aparte de las traídas por ellos como la higuera o la cebada. El patrimonio genético es algo fundamental con lo que podemos, a día de hoy, gracias a los diversos estudios y análisis que se realizan, relacionar a la población magrebí con la antigua canaria y, a su vez, con la población europea antigua del Neolítico Tardío, de la cual pudieron proceder las poblaciones norteafricanas.
=== Líbico - bereber ===