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'''Mihai Eminescu''' o '''Mihail Eminovici''' ([[15 de enero]] de [[1850]] [[Botoșani|Botosani]], [[Moldavia]]- [[15 de junio]] de [[1889]], [[Bucarest]], [[Rumania|Rumanía]]) fue un [[poeta]] del [[romanticismo|romántico tardío]]. Fue [[poeta]], [[Prosa|prosista]], [[periodista]] y [[filósofoperiodista]], calificado por la crítica literaria como la voz poética más importante de la literatura rumana. Posiblemente es el poeta [[Rumanía|rumano]] más conocido a nivel mundial, siendo sus obras más conocidas ''Luceafărul'' (''El lucero''), ''Mai am un singur dor'' (''Me queda un solo deseo''), y ''5 Scrisori'' (''Cinco Cartas'').
Era un miembro activo de la [[Sociedad Literaria|Sociedad Literaria "Junimea"]], siendo además afiliado al [[Partido Conservador de Rumanía]] y periodista en "[[Timpul]]" (el periódico oficial del Partido Conservador).
=== Años universitarios ===
En [[octubre]] de 1869 entra en la Facultad de Filosofía de [[Viena]] como estudiante extraordinario, es decir como simple oyente, faltándole el diploma de Bachillerato. Conoce a [[Ioan Slavici]] y a otros estudiantes rumanos de [[Transilvania]] y [[Bucovina]] y entra en una sociedad de estudiantes llamada "''România junǎ''" ("''La joven Rumanía''"). Los años de universidad fueron en realidad para Eminescu años de profundizar en las grandes obras de la cultura occidental (y algunas de la cultura oriental). Usará sus conocimientos en sus obras literarias y en su actividad periodística (trabajando también en una teoría para el desarrollo económico del nuevamente establecido estado rumano, teniendo en cuenta la identidad cultural del pueblo). A pesar de los consejos de sus amigos (el crítico literario [[Titu Maiorescu]] le había prometido un puesto de profesor de filosofía en la [[Universidad de Iaşi]]) y su familia, no quiere obtener ningún diploma, la explicación siendo quizás sus ideas influenciadas por el Romanticismo. Conoce a [[Veronica Micle]], quien será su inspiración para sus poesías de amor; la correspondecia entre los dos indica que Eminescu estaba realmente enamorado de ella, pero sus decisiones en ésta relación dejan algunos signos de interrogación; de toda manera, nunca llegaron a vivir juntos.
'''Eminescu y Nietzche'''
El surgimiento de quienes fundaron los cimientos de la cultura para las sociedades humanas es mucho más que la manifestación de la inteligencia con la que fueron dotados, de la capacidad nativa de crear. Eminescu completa su genio al estudiar la cultura antigua y clásica de los Vedas hindúes y el budismo, pero está marcado por las concepciones de los grandes filósofos y literatos alemanes: Kant, Goethe, Schopenhauer, Heine, Nietzsche, particularmente influyente en esa etapa.
La gran mayoría de los historiadores y críticos literarios consideran acertadamente que la importancia de Eminescu para la cultura rumana es equivalente a la de Goethe para la cultura alemana. El sorprendente paralelismo entre las visiones filosóficas, la manera de pensar, de comprender las cosas y las circunstancias de Mihai Eminescu y el enfoque similar de los mismos temas de su alemán contemporáneo Friederich Nietzsche, también inspirado en Goethe, también son evidentes.
Es digno de mención y semejanza física de [[Eminescu]] y [[Nietzsche]]. El hecho parece ser solo una coincidencia. Sin embargo, una de las tesis de Nietzsche se refiere al fenómeno de la interdependencia entre el aspecto físico y el aspecto espiritual del hombre. Está convencido de que la forma en que se ve una persona, sus características, independientemente de su valor estético, retrata a la perfección el ser interior de la persona (al nivel del subconsciente e incluso inconsciente), por lo tanto, percibe la complejidad interna de su naturaleza.
Si estamos de acuerdo en que a través de la educación y el entrenamiento, la adquisición de dogmas, ideologías, etc., la conciencia tiene la capacidad de cambiar el estado primario inicial de un personaje nativo, así como algunas características físicas nativas, podemos aceptar la idea de que las similitudes en La aparición de los dos pensamientos virtuosos podría revelar elementos más sutiles que una combinación aleatoria de cosas.
Una primera analogía entre el trabajo de Mihai Eminescu y Friederich Nietzsche es la discusión insistente sobre la condición del hombre genio en este mundo. La maestra era "estrella", como se informó en otro lugar, el poeta aclara el destino trágico genio casi absurdo. Admirado o arruinado, el genio sigue siendo incomprensible, herméticamente, marginado. "El genio nunca muere, pero tampoco tiene suerte", dice Eminescu. Diálogo con el yo mismo. Revela que la naturaleza mediocre, del hombre mediocre, tiende a descender a cualquier forma de genio a su nivel a través de alabanzas banales o vanas.
Otro tema común para los escritos de Eminescu y Nietzsche es la religión y la espiritualidad, especialmente el zoroastrismo. Aunque Nietzsche, a primera vista, parece ser un ateo convencido, debemos señalar que critica el aspecto social del cristianismo, teniendo en cuenta, en particular dogma de que promueve la abstinencia del vicio, en lugar de promover la sublimación del vicio. Según la opinión del filósofo, esto da lugar a hipocresía y debilidad, sin estimular el acercamiento del hombre de la divinidad.
En este libro, "Así habla Zarathustra", el profeta Zoroastro confiesa su revelación, predicando la idea de que el hombre debe autocomplacerse, autotransformarse, autollamarse en el Superhombre por sus propias fuerzas, sin esperar la ayuda "externa". En el cuento de Eminescu "Pobre Dionisio", el libro de Zoroastro abre las puertas a los misterios de Dios y, por lo tanto, contribuye a su evolución.
=== Madurez ===
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