Diferencia entre revisiones de «Batalla de Beirut (1912)»

El [[Fuerzas Armadas de Italia|ejército italiano]] temía que los barcos de la Armada otomana en el Mediterráneo atacasen los abastos y tropas que marchaban al [[África Oriental Italiana|África Del este italiana]]. El contraalmirante [[Paolo Thaon di Revel]] recibió la orden de impedirlo, eliminando para ello los barcos enemigos que se encontrasen en la rada de Beirut. Contó para ellola misión con docdos cruceros acorazados: el [[Giuseppe Garibaldi (1901)|''Giuseppe Garibaldi'']] y el [[Francesco Ferruccio (1905)|''Francesco Ferruccio'']],<ref name="Earle, 1092">Earle 1912, p. 1092.</ref> ambos de la [[Claseclase Giuseppe Garibaldi|''Giuseppe Garibaldi'']] [[Clase Giuseppe Garibaldi|clase]] y armados con dos cañones de diez pulgadas situados en torretas, diez de seis pulgadas, seis de cuatro con siete pulgadas, diez de seis libras, diez de una libra, dos ametralladoras Maxim y cinco tubos torpederos.<ref>Brassey 1898, p. 36.</ref>

Por su parte, los otomanos tenían en Beirut una corbeta, la {{Barco|Ottoman ironclad|Avnillah||2}} y el torpedero ''Angora''.<ref>Beehler 1913, p. 54.</ref> Este era un barco relativamente nuevo, botado en 1906 y armado con dos cañones de treinta y siete milímetros, dos tubos torpederos de catorce pulgadas y dos torpedos por tubo.<ref>Gardiner 1985, p. 392.</ref> El ''Avnillah'', por el contrario, era una antigua corbeta blindada construida en 1869. Había sido remozada en 1907 y se le añadieronhabía añadido cuatro cañones de tres pulgadas y ocho de seis libras. Contaba además con un tuvo torpedero de catorce pulgadas.<ref>Gardiner 1985, p. 389.</ref> Así, la potencia de fuego de la escuadra italiana era muy superior a la otomana.

Los dos cruceros italianos arribaron ante el puerto enemigo e hicieron un disparo de fogueo a los barcos anclados en la rada.<ref name="Earle, 1092">Earle 1912, p. 1092.</ref> El jefe de flotilla otomana, que se hallaba a bordo de la ''Avnillah'', despachó una lancha a parlamentar con los buques enemigos. Mientras, ordenó al ''Angora'' que se colocase junto al [[Muelle (construcción)|muelle]]. La lancha volvió a las siete y media con un ultimátum del contraalmirante Di Revel para el valí de Beirut en el que se le exigía la entrega de los dos barcos de guerra antes de las nueve de la mañana.<ref>{{Cita libro|título=Article 5 – No Title|editorial=The New York Times|fecha=26 February 1912|página=1|url=https://timesmachine.nytimes.com/timesmachine/1912/02/26/100519427.pdf}}</ref> El mensaje llegó a su destinatario a las ocho y media, que se avino a ello, pero no tuvo tiempo de dar la orden antes del plazo fijado por el enemigo. Por consiguiente, los italianos emprendieron el bombardeo de los barcos enemigosotomanos a las nueve.<ref>Hidden 1912, p. 456.</ref>

Los italianos dispararon contra la corbeta enemiga a seis kilómetros de distancia. Los otomanos trataron en vano de defenderse hasta las 9:35, cuando ellos fuegoproyectiles enemigo logróitalianos incendiarincendiarron la corbeta. Los estragos causados por el bombardeo y la inferioridad de fuego hicieron que finalmente la Avnillah izase la bandera blanca y que la tripulación la abandonase. Entonces el ''Garibaldi'' se acercó al puerto y atacó al ''Angora'' a una distancia de seiscientos metros, aunque el cañoneo no logró averiarlo.<ref name="Earle, 1092">Earle 1912, p. 1092.</ref> Disparó además un torpedo para destruir totalmente la ''Avnillah'', que se desvió e impactó en unas barcazas cercanas, de las cuales hundió seis.<ref>Beehler 1913, p. 97.</ref> El crucero disparó un segundo torpedo que dio de lleno en la corbeta, que se hundió hacia las once en las someras aguas del puerto; los cruceros italianos se retiraron hacia el norte.<ref>Beehler 1913, p. 55.</ref> Volvieron hacia las 13:45 y reanudaron el ataque a las naves enemigas. El único navío de guerra aún en condiciones de combatir era el ''Angora'', al que empezó a bombardear el ''Ferruccio'', que lo hundió tras tres minutos de castigo. A continuación, los buques italianos se alejaron con rumbo oeste.<ref name="Earle, 1094">Earle 1912, p. 1094.</ref>

El ataque italiano acabó con las fuerzas navales otomanas de Beirut, eliminó la amenaza a los transportes que cruzaban el Mediterráneo oriental y garantizó que Italia gozase del dominio del [[Mar Mediterráneo|mediterráneoMediterráneo]] meridional durante el resto de la guerra. Por añadidura, infligió copiosas bajas a los otomanos. Los dos navíos de guerra fondeados en Beirut habían sido hundidos y tan solo en el ''Avnillah'' fallecironfallecieron cincuenta y uno de sus tripulantes y otros diecinueve resultaron heridos.<ref name="Buyuktugrul">Büyüktuğrul, p. 84.</ref> Por su parte, los italianos no sufrieron bajas ni desperfectos, pues ningún proyectil enemigo alcanzó a los cruceros.<ref>Beehler 1913, p. 106.</ref> La ciudad también sufrió estragos por el bombardeo italiano. Las balas perdidas del bombardeo desataron varios incendios que destruyeron varios bancos y parte de la [[Oficina de aduana|aduana]], entre otros edificios. El bombardeo y los incendios consiguientes causaron la muerte de sesenta y seis civiles fueron y cientos de heridos.<ref name="Earle, 1094">Earle 1912, p. 1094.</ref>

El Gobierno otomano ordenó cuatro días después a los valiatos[[valiato]]s de Beirut, [[Alepo|Aleppo]] y [[Damasco]] que expulsasen a los ciudadanos italianos que se encontrasen en ellos, más de sesenta mil, como represalia por el ataque. Pese a ello, la superioridad naval obtenida les permitió a los italianos enviar refuerzos a Eritrea sin temer posibles acometidas de la Armada enemigo, por lo que se considera que la batalla fue una victoria táctica y estratégica para Italia.<ref name="Earle, 1094">Earle 1912, p. 1094.</ref>

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