Diferencia entre revisiones de «Mario Lanza»

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Fue despedido en 1952, después de grabar las canciones de la cinta ''The Student Prince'' (''El príncipe estudiante''). La razón más frecuentemente citada en la prensa del momento fue su físico con sobrepeso, que le impedía lucir el vestuario de la película, pero según sus biógrafos la razón real fue una discusión que se generó con el director inicial de la cinta, [[Curtis Bernhardt]], quien exigió al tenor que grabara de nuevo la banda sonora porque le parecía que estaba cantada «''de una manera muy emocional''». Mario Lanza decidió no trabajar en esta película con este director, a no ser que fuese designado otro. La [[MGM]] se negó a sustituir a Bernhardt, y la película se hizo posteriormente con el actor [[Edmund Purdom]] doblando la voz de Lanza. Irónicamente, el director de la película fue [[Richard Thorpe]], el mismo hombre propuesto por Lanza ante MGM para sustituir a Bernhardt, y con quien había tenido una excelente relación de trabajo en ''El Gran Caruso''.
 
Deprimido por su despido, y con su confianza en sí mismo gravemente socavada, Lanza se convirtió en un virtual solitario durante más de un año, buscando refugio con frecuencia en el alcohol. Durante este período también estuvo muy cerca de la quiebra económica como resultado de las malas decisiones de inversión tomadas por su exapoderado artístico, y de sus hábitos de gastos fastuosos que le dejaron con unos 250 .000 [[dólar]]esdólares en deudas por impuestos.
Regresó a la actividad cinematográfica en 1955 en la cinta ''Serenade'' (''Serenata''), de [[Anthony Mann]], con [[Joan Fontaine]] y [[Sara Montiel]]. Sin embargo, a pesar de su fuerte contenido musical no fue una película tan exitosa como las anteriores. Se trasladó a Roma en mayo de 1957, donde trabajó en la película ''Las siete colinas de Roma'' (donde cantó la célebre canción "Arrivederci Roma") y volvió a realizar una serie de conciertos de fama en todo el Reino Unido, Irlanda y el continente europeo. A pesar de que su salud decaía, lo que se tradujo en una serie de cancelaciones durante este período, Lanza siguió recibiendo ofertas para óperas, conciertos, y películas.