Diferencia entre revisiones de «Hacienda La Laguna (Puente del Obispo)»

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{{Ficha de bien de interés cultural|Laguna Grande Baeza.JPG|Hacienda La Laguna|Decreto 166/2007, de 5 de junio|Monumento|Jaén|Baeza|[[Siglo XVII]]|[[Siglo XIX]]|Industrial|regionalista|neoclasicismo|coor = {{coord|37|56|40.16|N|3|34|00.38|W|type:landmark}}}}
La '''hacienda la Laguna de Puente del Obispo''', en [[Baeza]] ([[Provincia de Jaén (España)|Provincia de Jaén]], [[España]]) es un conjunto de inmuebles que forman parte de una unidad socioeconómica y espacial, aunque su desarrollo histórico reciente los ha ido desvinculando en diferentes parcelas catastrales y usos diferenciados. El origen de la Hacienda se remonta al [[siglo XVII]], entonces propiedad de la [[Compañía de Jesús]], tal como lo atestigua la carta de compra de estos terrenos en [[1641]], y los textos posteriores, de [[1648]], que mencionan la transformación agrícola y residencial de «La Lagunilla», como «la obra mayor que se ha hecho en olivar y cortijo».
 
== Historia ==
La '''Hacienda La Laguna de Puente del Obispo''', en [[Baeza]] ([[Provincia de Jaén (España)|Provincia de Jaén]], [[España]]), es un conjunto de inmuebles que forman parte de una unidad socioeconómica y espacial, aunque su desarrollo histórico reciente los ha ido desvinculando en diferentes parcelas catastrales y usos diferenciados.
El conjunto residencial y productivo fue propiedad de la Compañía de Jesús desde el siglo XVII, orden que transforma el baldío en terreno de cultivo y de riego. En [[1767]] el rey [[Carlos III de España]] expulsa a la Compañía de Jesús y la Hacienda La Laguna pasa a la [[Casa Ducal de Alba]], uno de los principales grupos opositores de los Jesuitas. No obstante, en este período no existe constancia de que la explotación sufriera demasiados cambios ni en cultivos ni en arquitecturas.
 
En la primera mitad del [[siglo XIX]], en un contexto favorecido por la desamortización de [[Juan Álvarez de Mendizábal]], la propiedad de los terrenos es adquirida por la familia Collado, poseedores de los títulos de Marqueses de Viana, Vizcondes de Jarafe y, posteriormente, Marqueses de La Laguna. Éstos fueron claros impulsores de la infraestructura de la Hacienda, y fue bajo su titularidad cuando el ingeniero polaco [[Tomasz Franciszek Bartmański]] plantea para el proyecto de plantación de 100.000 [[Olea europaea|olivos]] la infraestructura de molturación plasmada en la singular bodega y los tres molinos aceiteros hidráulicos, así como el diseño de un moderno sistema de irrigación, que configuró el actual perfil de la Laguna Grande, y la red de canales que desembocan en un acueducto. Será durante los siglos XIX y [[siglo XX|XX]] cuando la Hacienda viva su momento de máximo esplendor arquitectónico conformando un gran conjunto organizado en torno a cinco patios y que distribuye a lo largo de la extensa propiedad una notable serie de edificios y construcciones auxiliares.
El origen de la [[Hacienda]] lo establecen las fuentes en el [[siglo XVII]] como propiedad de la [[Compañía de Jesús]], donde una carta de [[1641]] determina la compra de unos terrenos yermos para su explotación principalmente olivarera. En textos posteriores del [[siglo XVII|XVII]] se señala la existencia de "La Lagunilla", paraje que ya en [[1648]] fue irrigado con una canalización que la documentación cita como ''«la obra mayor que se ha hecho en olivar y cortijo»''. El origen del conjunto residencial y productivo parece enmarcarse de igual modo en ésta época.
 
Tras la segmentación del marquesado en el siglo XX, la Hacienda sufre un proceso de decadencia, hasta llegar a ser embargada y en 1989 abandonada y poco después expoliada. El progresivo deterioro se frena con el proyecto de rehabilitación de 1992, llevado a cabo tras la constitución en Baeza del Consorcio Hacienda «La Laguna», que tras la compra de la práctica totalidad de los edificios principales, plantea la construcción de un Hotel Rural, Museo del Aceite y la ubicación de la Escuela Regional de Hostelería.
Tras la expulsión de la [[Compañía de Jesús|Compañía]] en [[1767]] por el rey [[Carlos III]], la titularidad pasa a la [[Casa Ducal de Alba]], uno de los principales grupos opositores de los [[jesuitas]]. No obstante, de este periodo no existe constancia de que la explotación sufriera demasiados cambios ni en cultivos ni en arquitecturas.
 
== Descripción ==
En la primera mitad del [[siglo XIX|XIX]], en un contexto favorecido por la [[Desamortización (España)|desamortización]] de [[Juan Álvarez Mendizábal]], la propiedad de los terrenos es adquirida por la familia Collado, poseedores de los títulos de Marqueses de Viana, Vizcondes de Jarafe y, posteriormente, Marqueses de La Laguna. Claros impulsores de la infraestructura de la [[Hacienda]], es bajo su titularidad cuando el ingeniero polaco [[Tomasz Franciszek Bartmański]] plantea el proyecto de plantación de 100.000 olivos e infraestructura hidráulica de irrigación y molienda, consolidando el actual perfil de la [[Laguna Grande (Baeza)|Laguna Grande]], una red de canales que desemboca en un acueducto y la singular bodega y molino aceiteros.
 
En el conjunto patrimonial Hacienda La Laguna destacan cuatro elementos fundamentales:
Será durante los siglos [[siglo XIX|XIX]] y [[siglo XX|XX]] cuando la [[Hacienda]] viva su momento de máximo esplendor arquitectónico consolidando un gran conjunto organizado en torno a cinco patios y que distribuye a lo largo de la extensa propiedad una notable serie de edificios y construcciones auxiliares.
 
=== La Hacienda ===
Tras la segmentación del marquesado en el [[siglo XX]], en [[1992]] se constituye en [[Baeza]] el Consorcio Hacienda ‘La Laguna’, que tras la compra de la práctica totalidad de los edificios principales, plantea la construcción de un Hotel Rural, Museo del Aceite y la ubicación de la Escuela Regional de Hostelería.
Entendida como el conjunto de dependencias (viviendas nobles y de los trabajadores, almacenes, edificios auxiliares) organizadas originalmente en torno a cinco patios (dos de labor al sur, uno del señorío y otro auxiliar al norte y de acceso al Molino al oeste), infraestructura industrial (molino­fábrica, bodega, acueducto) y zonas ajardinadas, la mayor parte de ellas factura del siglo XIX. Arquitectónicamente, se enmarca dentro del estilo industrial y señorial. Elementos estratégicamente situados como [[Torre (construcción)|torres]], [[capilla]], [[Fuente (arquitectura)|fuentes]], [[Jardín|jardines]], portadas, rejería, [[moldura]]s y recercados en vanos, añaden una manifiesta distinción monumental.
 
En el extremo norte se encuentra el [[acueducto]], que recorre en forma de L el perímetro del paseo principal y deja a un lado el jardín o campo de variedad de olivos. La conducción consiste en una construcción de [[ladrillo]] formada por arcos de medio punto, el caz en la parte superior interior y en uno de sus extremos el cubo. Este inmueble formaba parte del conjunto hidráulico de acequias o canal de piedra que riega la finca, conectando con la [[laguna]], plantaciones de olivar, el [[estanque]] y las huertas de la Hacienda.
== Descripción formal de los inmuebles ==
La '''Hacienda'''. Entendida ésta como el conjunto de dependencias (viviendas nobles y de los trabajadores, almacenes, edificios auxiliares) organizadas originalmente en torno a cinco patios (dos de labor al Sur, uno del señorío y otro auxiliar al Norte y de acceso al Molino al Oeste), infraestructura industrial (molino – fábrica, bodega, acueducto) y zonas ajardinadas, la mayor parte de ellas factura del siglo XIX. Arquitectónicamente, se enmarca dentro del estilo industrial y señorial. Elementos estratégicamente situados como torre, capilla, fuentes, jardines, portadas, rejería, molduras y recercados en vanos, añaden una manifiesta distinción monumental.Al patio de señorío se accede por avenida arbolada, flanqueada al Este por jardín con estanque romántico y al Oeste por la vivienda, que presenta a ésta balconada y capilla. Un gran portón da paso a patio auxiliar de caballerizas previo, originalmente cerrado y en el que desde 1998 se abre el Jardín de Variedades del Museo de la Cultura del Olivo, y al que se presenta la portada principal compuesta por arquería de piedra de dos pisos de arcos de medio punto y con fuertes similitudes con un acueducto.
 
Estas últimas se encuentran en la parte más septentrional e inmediata a los inmuebles de la Hacienda, y constituyen uno de los elementos que reflejan la diversidad productiva (dentro de la predominancia del monocultivo de olivar) orientada a las necesidades autárquicas de abastecimiento de sus habitantes, característica propia de este tipo de arquitectura rural y antiguo modo de vida, previo a la mecanización y modernización agrícola, y contribuyendo a incrementar los valores patrimoniales del conjunto.
La portada, desproporcionada respecto a las dimensiones de la fachada, está compuesta por un total de seis arcos de mampostería divididos en dos pisos, los inferiores peraltados y los superiores rebajados. Los sillares exteriores están dispuestos de manera irregular, lo cual hace suponer una reintegración del elemento. Los tres arcos inferiores están apoyados sobre pilares de gran altura y entre los que se abre, en el centro, el portón de entrada y dos vanos enrejados de gran tamaño a cada lado. Las impostas del central están decoradas por sendas molduras. Los tres arcos superiores rompen a media altura el paño de sillares bajo la clave con la apertura de vanos que apoyan sobre el suelo de la planta interior y que no ocupan todo el ancho de la luz. En el arco izquierdo del piso superior es apreciable la irregularidad de algunos sillares, que pudieron ser recolocados o añadidos en un momento posterior, posiblemente para enmarcar la apertura de los vanos, ya que las dovelas de estos arcos superiores se apoyan directamente, sin impostas, en el paño del muro. Habiendo sido claramente reaprovechada la estructura, podría ser una de las partes más antiguas de la Hacienda.
 
En la parte norte, frente al actual [[Museo del Aceite]], y junto a la fábrica de aceite o molino, se halla la bodega de aceite, edificio de planta rectangular, con una cartela colocada en la fachada norte del inmueble con la fecha y autor de la obra de cantería: «AÑO 1868/SE CONSTRUYÓ POR JULIÁN PÉREZ». Se trata de una interesante construcción de mampostería diseñada con finalidad industrial funcional y artística, como se observa en la concepción espacial, en el neoclasicismo de las bóvedas vaídas que descansan sobre los pilares en la planta superior, y en las columnas de piedra con medias pilastras adosadas a sus lados. El edificio se dispone en dos plantas. En la planta baja se encuentran los diez grifos y desagües de hierro conectados con los depósitos cilíndricos de sillares de piedra que están alineados en un vasto volumen central que asciende hasta la planta superior. Para la medición del nivel del aceite de los depósitos existen diez reglas de cerámica y [[mampostería]] pintadas que se adosan a las paredes. A esta planta se accede por una [[escalera de caracol]] de hierro de forja. La carga de los depósitos se soporta mediante arbotantes que desembocan en los muros exteriores. En éstos se continúa la función de sustentación mediante contrafuertes semicirculares distribuidos a lo largo de los cuatro muros del inmueble, que se ven aligerados por los vanos jambeados de piedra, y con cerramiento de rejería. El acceso a la bodega se realiza mediante un túnel abovedado de sillares de piedra (que conecta con el Museo del Aceite), ya que el edificio está parcialmente cerrado para el mejor mantenimiento de la temperatura del aceite.
En cuanto a la '''bodega''', su interior es claramente neoclásico, evidente en bóvedas, columnas adosadas y concepción del espacio. Luis Berges, en su proyecto de Museo del Aceite, la describe:
Frente a la bodega se halla el actual Museo del Aceite, edificio que anteriormente fue la «carretería» de la Hacienda. Se trata de un edificio totalmente remodelado que contiene interesantes piezas de la industria artesanal de la molturación de la [[aceituna]], tanto autóctonas como de otras comarcas andaluzas.
El molino o fábrica de aceite es un inmueble de tejado a cuatro aguas, de una sola planta dividida esencialmente en tres estancias: la principal que ocupa todo el ancho de la crujía contiene el moledero, las bombas y tres [[Prensa hidráulica|prensas hidráulicas]] de hierro de fundición, y las dos secundarias, una destinada a los pozos aclaradores con su caldera y centrifugadora y otra, la de menores dimensiones, para los jamileros o depósitos soterrados para alpechines, tras la cual se accede a los aseos. En el exterior, a las espaldas de la fachada principal del molino, se halla una [[chimenea]] de ladrillo visto, elemento arquitectónico que formaría parte de la producción de aceite del molino.
 
Al señorío se accede por una avenida arbolada, flanqueada al este por un jardín con estanque romántico y al oeste por la vivienda. Las dependencias del señorío ocupan un lugar estratégico y central en la Hacienda, junto a los edificios de molturación y bodega, zona ajardinada y camino principal de acceso a la misma. El señorío, actual escuela de hostelería, cuya rehabilitación ha respetado la disposición de la planta del inmueble, tiene forma de cuadrícula con patio central interior que se adorna con fuente de piedra, para disfrute y privacidad de los antiguos propietarios. En la fachada este o posterior se encuentra un gran portalón de entrada recercado con sillares de piedra y una lápida que dice: «AQUÍ YACE / DON DIONISIO ECHAGÚE / FALLECIÓ EL DÍA 2 DE DICIEMBRE DE 1869 / A LA EDAD DE 65 AÑOS / SU QUERIDO SOBRINO / MARQUÉS DE LA LAGUNA / LE DEDICA ESTA MEMORIA / R.I.P.» En la fachada oeste se observa la capilla, que se aprecia por la presencia del pequeño [[campanario]] y la organización interior del espacio. Destaca la cúpula de nervios y el balcón alto para escuchar misa, espacio reservado exclusivamente a los [[Marqués|marqueses]], como signo de jerarquización social, frente a los empleados cuyos asientos se sitúan en la parte baja de la nave. El acceso principal al señorío se situaba en la fachada norte (frente al campo de variedades de olivos), como lo testimonian los dos pisos de arcos de medio punto de sillares de piedra.
{{cita|Es, sin lugar a dudas, la edificación más interesante de toda la Hacienda ‘La Laguna’. Construida en el año 1861 por un cantero llamado Julián Pérez, según reza en una cartela o tondo, se trata de una gran construcción de planta rectangular, la mayor parte de ella de sillería, que contiene en su interior otro gran volumen que se constituye por 10 grandes depósitos de forma cilíndrica y de 4.8 m de diámetro y de 5.2 m de altura, desde cuyo volumen central parten los pilares gemelos que soportan arcos de organización de la cubrición general del edificio, mediante bóvedas. Este gran volumen central se contrarresta mediante arbotantes que mueren en los muros del volumen exterior, en los que se abren enormes huecos de ventanas, jambeadas de piedra y defendidas por fuerte rejería.
 
A continuación del señorío, al sur, se ubicaban los dos antiguos patios de servicio, actualmente transformados en dependencias hoteleras. De ellos sólo el orientado a la parte este conserva su estructura original, contando con la fuente original de piedra y enchinado alrededor. Más al sur, tras la actual zona de aparcamiento, se sitúan las que antaño fueron las veintidós viviendas de los trabajadores, los inmuebles en peor estado de conservación y actualmente inutilizados. Se hallan alineadas a ambos lados de una larga calle enchinada y son de una arquitectura sencilla, sin añadidos, y seriada. En la fachada este una simple moldura une las ventanas de cada casa. Este elemento decorativo, junto a puertas y chimeneas, son los únicos indicios que a lo largo de la calle distinguen unas viviendas de otras. Quedan fuera, al oeste, tres viviendas que son [[Cronología|cronológicamente]] más antiguas que las anteriores. Estas últimas construcciones, hechas de mampostería, con pequeñas ventanas, grandes portones y suelo empedrado, denotan la sencillez y rusticidad, propia de las antiguas viviendas de jornalero. Los rollizos cubren la totalidad del techo en las habitaciones comunes y con chimenea, siendo evidente el cañizo en las anexas. Es posible que existiera en algunas un falso techo para crear una cubierta plana en las habitaciones y un «soberao», hecho que parece atestiguar la existencia de rebordes a media altura de los muros. En la cocina de estas antiguas casas se aprecia la chimenea y una pequeña despensa empotrada en la pared o «chinero».
Este gran edificio posee contrafuertes semicirculares exteriores en sus cuatro fachadas, lo cual viene a acentuar su carácter de arquitectura pensada para soportar interiormente grandes presiones creadas desde los diez depósitos circulares.
 
=== Laguna Grande ===
A esta edificación existe adosada otra, de reducidas dimensiones pero de idéntico criterio constructivo, desde el cual existe una salida en túnel hacia el exterior de la finca.|—(Luis Berges Roldán, 2ª fase del "Proyecto de Museo del Aceite en la Hacienda La Laguna de Baeza", marzo de 1994)}}
{{AP|Laguna Grande (Baeza)}}
La denominada «[[Laguna Grande (Baeza)|Laguna Grande]]» es un embalse alimentado por las aguas del [[río Torres]] para irrigación de la explotación olivarera. La delimitación propuesta recoge el total de sus límites, camino que lo bordea, caseta de reparto de aguas que contiene la llave de paso de hierro de fundición y chortal canalizado al oeste. La construcción es sencilla, cerrándose el perímetro con diques de tierra (evidentes en el sector noreste) y muros de mampostería, proyectándose un rectángulo de 470 por 540 [[metro]]s. Sin embargo, el área suroeste sufre en mayor medida inundaciones y filtraciones de agua, por lo que el rectángulo trunca esta esquina en cuatro lados. El resultado es una gran superficie de 23 [[hectárea]]s la cual mantiene actualmente su aprovechamiento agrícola.
 
=== Puente sobre el río Torres ===
El '''molino''', es de una sola planta dividida esencialmente en tres estancias, la principal - que ocupa todo el ancho de la crujía - ocupada por el moledero, las bombas y prensas hidráulicas, y dos secundarias, una destinada a los pozos aclaradores con su caldera y centrifugadora y otra, la de menores dimensiones, para los jamileros o depósitos soterrados para alpechines, tras la cual se accede a los aseos. Exteriormente, el conjunto contaba con tres tolvas para la entrada de la aceituna al Norte y con otra de gran tamaño al Oeste para la salida del orujo.
El Puente sobre el río Torres fue construido en el siglo XIX como acceso monumental a la Hacienda. Posee un solo ojo de más de 10 metros de luz para poder salvar el desnivel del terreno, con arco peraltado de buena cantería y siendo el resto de sillares de inferior piedra y calidad. Carece de [[tajamar]]es debido al poco [[Caudal (fluido)|caudal]] del río. La decoración del pretil es sencilla y reformada en la actualidad.
 
=== Fuente Nueva ===
Las '''viviendas de los trabajadores''', alineadas a ambos lados de una larga calle, son de una arquitectura sencilla, sin añadidos, y seriada. En la fachada Este una simple moldura une las ventanas de cada casa. Ésta, junto a puertas y chimeneas, son los únicos indicios que a lo largo de la calle distinguen unas viviendas de otras. Quedan fuera, al Oeste, tres viviendas que son cronológicamente más antiguas que las anteriores. Son éstas últimas construcciones de mampostería, pequeñas ventanas, grandes portones y suelo empedrado que denotan una mayor pretensión agrícola. Los rollizos cubren la totalidad del techo en las habitaciones comunes y con chimenea, siendo evidente el cañizo en las anexas. Es posible que existiera en algunas un falso techo para crear una cubierta plana en las habitaciones y un sobrado, hecho que parece atestiguar la existencia de rebordes a media altura de los muros.
La Fuente Nueva está situada en el camino de acceso a la Hacienda y fue construida en el siglo XIX. El sencillo estanque de piedra se completa con un ornamental muro de ladrillo, enmarcado de [[sillar|sillería]], que sirve de escenario al caño. Éste, un sobrio tubo metálico, está embutido en un sillar de piedra, sobre el cual se muestra una vacía placa conmemorativa. Corona el muro una moldura pétrea a modo de [[Cubierta (construcción)|alero]], elemento de mayor distinción arquitectónica. Bajo el caño sobresale un canalillo moldurado que conduce el agua hacia el estanque, con el que comparte la misma piedra. El desagüe se dispone a la izquierda, mediante conducción oculta bajo una escalera. El muro y alero están coloreados en rojo inglés, destacando sobre el blanco de los sillares y el color natural de la piedra del estanque y canalillo.
 
== Referencias ==
'''Laguna Grande'''. Embalse alimentado de las aguas del Río Torres que sirvió para irrigar los 100.000 olivos con los que contó la Hacienda en el siglo XIX y cuyo paraje ya fuera explotado por la Compañía de Jesús en el XVII. La delimitación propuesta recoge el total de sus límites, camino que lo bordea, caseta de reparto de aguas y chortal canalizado al Oeste. La construcción es sencilla, cerrándose el perímetro con diques de tierra (evidentes en el sector Noreste) y muros de mampostería, proyectándose un rectángulo de 470 por 540 metros. Sin embargo, el área Suroeste sufre en mayor medida inundaciones y filtraciones de agua, por lo que el rectángulo trunca esta esquina en cuatro lados. El resultado es una gran superficie de 23 hectáreas la cual mantiene hasta la fecha su aprovechamiento agrícola.
{{Bienes.info|BOJA|125|26 de junio de 2007|url=http://www.andaluciajunta.es/portal/boletines/2007/06/aj-bojaVerPagina-2007-06/0,23344,bi%253D695756731881,00.html}}
 
'''Puente sobre el Río Torres'''. Construido en el XIX como acceso monumental a la Hacienda. Posee un solo ojo de más de 10 metros de luz para poder salvar el desnivel del terreno, con arco peraltado de buena cantería y siendo el resto de sillares de inferior piedra y calidad. Carece de tajamares debido al poco caudal del río. La decoración del pretil es sencilla y reformada en la actualidad.
 
'''Fuente Nueva'''. Situada en el camino de acceso a la Hacienda y construida en el siglo XIX. El sencillo estanque de piedra se completa con un ornamental muro de ladrillo, enmarcado de sillería, que sirve de escenario al caño. Éste, un sobrio tubo metálico, está embutido en un sillar de piedra, sobre el cual se muestra una vacía placa conmemorativa. Corona el muro una moldura pétrea a modo de alero, elemento de mayor distinción arquitectónica. Bajo el caño, sobresale un canalillo moldurado que conduce el agua hacia el estanque, con el que comparte la misma piedra. El desagüe, a la izquierda, mediante conducción oculta bajo una escalera. El muro y alero están coloreados en rojo inglés, destacando sobre el blanco de los sillares y el color natural de la piedra del estanque y canalillo.
 
== Datos históricos ==
 
=== El origen de la explotación. El Colegio jesuita de San Ignacio ===
En 1641 el padre Francisco de Bilches, rector del Colegio jesuita de San Ignacio de Baeza, dirige una misiva al secretario provincial de Andalucía de la Compañía. En ella informa a su superior de la compra de unos terrenos yermos en La Mancha (Mancha Real) para ampliar el patrimonio, por entonces escaso, del Colegio. A lo largo de ese año de 1641, la correspondencia volverá a insistir en estos terrenos, identificándolos como unos baldíos lindantes entre el término de Mancha Real y de Baeza y como parte de la venta que el Rey Felipe IV hizo a la primera villa. Bilches, en estas cartas, los identifica como la Fuente de la Parra, los baldíos bajos, Caballos y La Lagunilla o Laguna y en 1648 explicita que se ha efectuado una conducción de agua hacia un olivar que «es la obra mayor que se ha hecho en olivar y cortijo» de un agua «dulce y rica», de la que desconocemos con certeza si su procedencia partía de Laguna Grande.
 
Toponímicamente, el nombre de La Laguna es el que más claramente ha permanecido, por lo que es de suponer su presencia ya a la hora de la compra tal vez a modo de humedal natural. En cuanto a Caballos, existe al sur de la Laguna una Loma del Caballo que podría encajar, con todas las salvedades, con lo mencionado por Bilches.
 
Sobre la Fuente de la Parra, es más confusa su situación. Cerca del lugar marcado por estos topónimos entramos en Ríez, que pertenece al término municipal de Mancha Real (frontera en la que la primera misiva situaba parte de los terrenos comprados), en cuya histórica dehesa existía una Fuente de la Parra de la que nacía un arroyo de igual nombre, ambas denominaciones hoy desaparecidas de la cartografía aunque, por lo que conocemos<ref>LÓPEZ CORDERO, J.A. Y LATORRE GARCÍA, J. (1996): ''Relación histórica hombre-medio en Sierra Mágina: los Baldíos de Mancha Real''. En Summuntán. Revista de Estudios de Sierra Mágina, nº 7. Páginas 131 a 150</ref>, cercanas a Jimena. De ser ésta la Fuente de la Parra citada, los límites se marcarían por unos vértices demasiado dispares, aunque, por otro lado, se aproximarían a la orientación que posteriormente tuvo el Marquesado de La Laguna, conteniendo recursos como las rentables salinas y las canteras (diseminadas ambas a lo largo del territorio y dando lugar a diversos topónimos). Los denominados baldíos bajos podrían homogeneizar el polígono descrito y dar mayor sentido a la delimitación.
 
Extraña sin embargo que en el manuscrito del siglo XVII de la ‘Historia de Baeza’ del padre jesuita Francisco de Torres, no se mencione explícitamente el paraje, máxime si tanta era su extensión y riqueza a pesar de tratarse a la hora de la compra de unos terrenos sin cultivar.
 
Si bien la ‘Historia de Baeza’ empezó a redactarse años antes, el mismo autor indica al final de la misma que el domingo 18 de abril de 1677 era día ''«de mi gran Patriarca San Ignacio de Loiola, en cuio Collegio lo escribí»'', por lo que debería estar enterado de primera mano de la explotación e incluso beneficios de La Laguna.
 
En el folio 174 explica, en referencia a la construcción del propio Colegio de San Ignacio que ''«Toda la obra paró, quando su Magestad se valió de los juros, y porque no se perdiesse la fundación, sacaron a los seminaristas los superiores, pues ni para la mitad del sustento era bastante lo que daba el Rey, dexaron al Retor por administrador, y a otros tres que le acompañassen, y lo que sobraba del gasto del sustento de estos pocos, se a ido criando vn oliuar, que hasta ahora no a tenido prouecho; ya con el fruto que rinde se acabó el templo y se ba perfiçionando la casa»''
 
No es posible extraer del texto anterior la certeza de que sea ésta una referencia a las tierras compradas en 1641. Francisco de Torres repasa en varias ocasiones el paraje sin realizar mención directa a La Laguna, aunque eso sí, dejando bien claro la calidad productiva de sus terrenos en una exagerada alabanza a su tierra. Así en el folio 325: ''<nowiki>«Por tres leguas corre el Riato de Torres, hasta que muere en Guadalquivir, avaxo de la Puente del Obispo, en las orillas se crían las famosas granadas, que en Baeza llaman de Santo Domingo, o de Torres [...] De este Riato diçe el Maestro Patón grandes alabanças por sus finas y castiças granadas y otras frutas, pero no sólo es de buen nombre por las granadas, sino también por los Batanes, que tienen, porque sus aguas haçen y afinan más y mexor que otras, la ropa que en ellos se laba de los ricos paños que se labran en Baeza. Este temperamento tan sano es la causa de hallarse en sus tierras hierbas mediçinales y de mucha estima que a su tiempo vienen arbolarios a coxerlas para la preuençion de las boticas y conserbas»</nowiki>''
 
En el folio 338, ''«Esparto ay en nuestras tierras ''<nowiki>[de Baeza]</nowiki>'' tanto que nunca por mucho, que los antiguos y modernos sacaron basta para apurarlo. En tiempo de Carthagineses y Romanos se gastaba en texido y torcido, haçían con él velas de los navuios para nauegar»''. Y sobre las citadas salinas, que tanta importancia cobrarán el futuro Marquesado, en el folio 347, cita ''<nowiki>«en el pago, que diçen las Caballerías, están vnas famosas salinas de la çiudad [...] Ay otras salinas no tan copiosas junto a Guadalquivir en la dehesa Carrascal, término de Baeza; hablando Estrabón de la Turdetania, dice que tienen los andaluçes tanta sal, que para sacarla de donde se benefiçia se aiudan del azada; y aún ríos de sal, no pocos montes de sal ay de la misma manera, que con la experiençia de la vista lo emos comprobado en dos de nuestras tierras»</nowiki>''.
 
Por último, destacar que en el folio 336, en referencia al «Pan, Bino, i aceite de Baeza», cita que ''«por la parte del Mediodía de Baeza, en Santo Domingo del Campo, ValdeJaén, la Fuente el olibar, Torre Gil de Olit, viñas y olibares»''. Parece claro que menciona directamente el territorio en el que se enclava la actual Hacienda. De hecho, menciona a Gil de Olid, una histórica cortijada muy próxima al Puente del Obispo. Si alguno de los restantes topónimos que menciona, como la Fuente el Olivar, pudo referirse o no al paraje de La Laguna, es algo que desconocemos.
 
Sí está claro en los textos que las aguas del Río Torres y de Arroyo Vil (al Oeste), eran las utilizadas para el riego de los olivos. Aguas que eran compartidas en su uso con los Trinitarios Descalzos de Baeza.
 
Un siglo después, el rastreo podemos seguirlo a través del Catastro del Marques de la Ensenada. En el Libro I del término municipal de Baeza (1752), se relacionan los ''«Bienes pertenecientes al Colegio de Señor de San Ignacio, de la Compañía de Jesús»,'' indicándose una hacienda ''«en el sitio que llaman de La Laguna y Cañada del Hornillo»''. Basándose en esta fuente, Rodríguez-Moñino establece sus límites comprendiendo un total de 766 fanegas.
 
De los edificios, el Catastro menciona ''«una casa molino de aceite en el sitio que llaman de La Laguna y Cañada del Hornillo, distante de la población de Baeza dos leguas y tiene 10 de varas de frente y veinte de fondo y se compone de dos piedras, cuatro vigas y demás aderezos de una bodega, con veintisiete tenazas<ref>''Diccionario de la Real Academia Española de 1780'' (en [http://buscon.rae.es/ntlle/SrvltGUIMenuNtlle?cmd=Lema&sec=1.0.0.0.0. www.buscon.rae.es]) «TENAZA. En los molinos de aceyte se llama el fin de la viga»''</ref> [...] En el cuerpo del molino se hallan otras tres tenazas»''.
 
Es evidente que resulta exagerado que un edificio de algo más de 8 metros de ancho por 16 de largo contuviera tanto como se describe, especialmente cuatro prensas de viga y un molino de dos piedras, a no ser que el tamaño de estos últimos fuese anormalmente reducido.
 
En cuanto al resto de edificios, se describe una casa ''«para la habitación y custodia de las gentes y ganados en los tiempos de la sementera»''. Con dos cuartos, una caballeriza y un pajar en planta baja y ocho cuartos en la primera, medía algo más de 13 metros de ancho por 25 de largo. Una alameda cerraba sus límites.
 
Según el Catastro, por tanto, esta primitiva hacienda propiedad de los jesuitas distaba mucho de la que actualmente conocemos. Su uso estaba destinado exclusivamente para los jornaleros en tiempos de recolección, sin existir un área residencial permanente o de mayores pretensiones nobles y siendo su ocupación estacional, incluyendo la explotación de frutales (como los granados citados por Francisco de Torres) u otros recursos.
 
=== La ampliación territorial. De la Casa Ducal de Alba a los Marqueses de La Laguna ===
Quince años después de este inventario, en 1767, los jesuitas son expulsados del reino de España por Carlos III. Mientras los barcos en que fueron exiliados eran recibidos a cañonazos en el Vaticano, la Hacienda La Laguna no cayó en el olvido. El 20 de diciembre de 1772, cuatro meses antes de la orden papal de extinguir la Compañía, la Casa Ducal de Alba, uno de los principales grupos hostigadores contra los jesuitas y a favor del nuevo monarca, formaliza la compra de estas tierras.
 
El acta notarial de venta, de partida, contradice un dato: las 766 fanegas atribuidas en el Catastro de la Ensenada a la Compañía, se traducen ahora en 3000, cuando el título deja clara su anterior pertenencia: ''«venta real judicial de la hacienda llamada de La Laguna, término de esta ciudad [Baeza] y de la villa de Mancha Real que fue propiedad de los regulares de la Compañía de Jesús que habitaron la casa de Señor San Ignacio de Loyola de ella y pertenece a sus temporalidades ocupadas»''. El Catastro no debería estar equivocado, o al menos no en tal número.
 
Así, esta cantidad de tierras, descaradamente multiplicada, no solo concede a la Casa de Alba las propiedades de los jesuitas, sino que habría que suponer que se incrementaron con otras anexas aprovechando la ocupación, concediendo así el Rey a sus aliados una valiosa muestra de agradecimiento: en lugar de 493 hectáreas, la Casa Ducal recibiría 1932 a través de una única compra.
 
La cantidad necesaria se obtuvo a través de la enajenación del juro de la villa de Oropesa (Toledo), propiedad de la Casa de Alba y cuantificado en 1.333.333 reales. La autorización del monarca se obtuvo ya en 1770, citando los textos que la intención no era otra que utilizarlo para la compra de las propiedades de la Compañía de Jesús.
 
No obstante, las fuentes parecen dejar claro que los duques no realizarían grandes cambios en La Laguna. Mantendrían la red de acequias, los edificios ya existentes y se limitarían a su simple explotación. A pesar de que el 25 de agosto de 1773 un acta capitular del concejo de Baeza concede al Duque de Alba la vecindad en la ciudad a petición de su administrador, su presencia en estas tierras sería prácticamente nula.
 
Un nuevo cambio de titularidad, el que daría a la Hacienda la imagen que conocemos, se produce en algún momento posterior a la [[Desamortización (España)|desamortización]] de [[Juan Álvarez Mendizábal|Mendizábal]] ([[1836]]), promulgada durante la [[regencia]] de [[María Cristina de Borbón]] debido a la minoría de edad de la futura [[Isabel II de España|Isabel II]].
 
La venta pública de propiedades de la Iglesia, aunque pretendía una mayor socialización de la titularidad de la tierra, en realidad benefició a nobles y burgueses urbanos que pudieron convertirse fácilmente en terratenientes. En concreto el territorio de La Laguna, muy dividido por los herederos de la Casa de Alba, poseía aún partes de los Trinitarios Descalzos de Baeza, por lo que la desamortización favoreció las tentativas de compra para crear un gran latifundio.
 
El legajo ''«Antecedentes de la Finca La Laguna y otras del marqués»'' del Archivo Histórico Municipal de Baeza posee textos fechados entre 1839 y 1855, y es el que establece la primera base documental de la nueva propiedad. Por él sabemos que es la familia Collado, emparentada en San Sebastián pero residente en Madrid, la que realiza la compra de la práctica totalidad de los terrenos<ref>La división a través de las herencias y ventas que realiza la Casa de Alba es la que provocó que a lo largo del territorio permanecieran pequeñas propiedades aisladas, las cuales son evidentes en la cartografía histórica referenciada y citadas, por otro lado, en textos como la «Certificación del Registro de la Propiedad del partido de Baeza» de 5 de mayo de 1882 que se verá más adelante</ref>, ampliándolos con algunas otras parcelas, entre ellas las desamortizadas a los Trinitarios.
 
El senador vitalicio José Manuel Collado Parada figura como primer propietario, pero sería su hermano político, Dionisio Echagüe, el que administraría la Hacienda y el que se relacionaría directamente con la misma.
 
El título de Marqués de la Laguna<ref>La familia, a lo largo de los años, llegaría a poseer otros títulos nobiliarios, como los de Marqueses de Viana y Vizcondes de Jarafe (procedente éste último del nombre de una cortijada muy próxima, situada entre el río Torres y la Loma del Caballo). No obstante, los tres títulos citados pasarían ya en el siglo XX a la Casa Ducal de Alba.</ref> le fue concedido a José Manuel Collado por la reina Isabel II en 1862. Casado con la hermana de Dionisio, lo heredaría su hijo, el también senador Fermín de Collado y Echagüe, siendo éste el que ligaría el título nobiliario con el de Grande de España en1882 por orden de Alfonso XII como ''«una señalada prueba de Mi Real aprecio por vuestros servicios en pró de la agricultura y de la riqueza pública»<ref>''«Testimonio del Real Despacho de la Grandeza de España concedida al Señor Marqués de la Laguna»'' (30 de noviembre de 1882). [http://www.senado.es/historia/senadores/senadores.html Archivo del Senado]. Signatura HIS-0239-05(3).</ref>.
 
Fermín de Collado, a la muerte de su tío Dionisio, le dedicó en memoria la lápida que estuvo situada en el suelo de la capilla y que hoy encontramos en la alameda al Oeste de la Hacienda:
 
''«AQUI YACE / D. DIONISIO ECHAGÜ[E] / FALLECIO / EL DIA 2 DE DICIEMBRE DE 1869 / A LA EDAD DE 65 AÑOS. / SU QUERIDO SOBRINO / MARQUES DE LA LAGUNA / LE DEDICA ESTA MEMORIA. / R.Y.P.»''
 
Quería hacer constar así que, a pesar de ser su padre el titular de la Hacienda, fue su tío el que verdaderamente quedó ligado a esta esencial etapa de la Hacienda, ya que a su muerte en 1869 se habría construido la práctica totalidad de la infraestructura que hoy conocemos.
 
=== La transformación tecnológica. El proyecto de Franciszek Bartmański ===
El ingeniero militar [[Tomasz Franciszek Bartmański]] nace en Polonia en 1793. Activo participante en su país de la revolución de 1830-31 contra el zar de Rusia, la cual resultó un fracaso, en 1832 se ve obligado a viajar a Francia. Trabajará en diversos proyectos en el país, especialmente en viarios y puentes, y en sus colonias de Argelia y Egipto. Para este último redacta uno de los primeros proyectos estructurales conocidos que hicieran viable la unión del mar Mediterráneo y Rojo.
 
Llega a España en 1844, donde destacaría en la construcción de líneas de ferrocarril, siendo contratado para las líneas Madrid Aranjuez y Valencia Cartagena. Participaría además en el proyecto del Gasómetro madrileño. Entre 1844 y 1848, año en el que abandona nuestro país, es llamado por José Manuel Collado para proyectar los trabajos hidráulicos de la Hacienda La Laguna, concluyendo el suministro en 18 meses.
 
En Baeza redacta su conocida obra «Manual de economía doméstica», la cual editaría en Madrid. En otro texto suyo, el artículo «Recuerdos de España del año 1848», ofrece una gran cantidad de detalles en referencia a La Laguna de evidente valor documental:
 
''«El agua en una masa de veinte millones de pies cúbicos, almacenada en un barranco natural y cerrado por un lado por un muro, se distribuía por medio de un canal por toda la plantación, e iba hasta la casa, a una larga milla de distancia, donde construí unas cisternas refinadoras de agua para beber y para otras necesidades de la casa. El agua dirigida por otro canal mueve los molinos de aceite y una piedra de harina.''
 
''La hacienda La Laguna, quitada a los frailes después de la supresión de los conventos, adquirida por el propietario por tres millones al Gobierno, hoy con un valor de ocho millones, posee aún varios millares de olivos, a los que las leyendas locales les atribuyen la antigüedad de a. de C. Estos árboles todavía dan fruto. [...] La época de la recolección de la aceituna cae, como más tarde, alrededor de la Noche Vieja.''
 
''Entonces al lugar de la recolección acuden familias enteras de las tierras vecinas, alimentándose con los productos proporcionados por el propietario. Estos suelen componerse de los frutos de la vecindad.''
 
''Los padres de familias van a lo largo de la línea de los olivos [...] Las madres con los niños y con el resto de la familia, siguiéndoles, recogen la aceituna caída al suelo en unos capachos alargados trenzados de esparto y con ellos cargan a los mulos o burros enviados desde la Hacienda. El sueldo se cuenta según el número de capachos suministrados a la Casa a costa del propietario. Los que varean los olivos, llamados varas, reciben el pago diario, aparte. La gente de la casa que trae la aceituna en los capachos, la vierte en el patio recubierto de piedra. En medio del patio se levanta un pilar alto y enorme, fabricado de ladrillo, encima del cual, trepando por una escalerilla preparada la gente vierte la aceituna de los capachos y se va apilando en un montón grande en el patio. Unos cuantos molinos, trabajando noche y día, muelen la medida adecuada de aceituna. La piedra de forma cónica movida por una mula machaca la aceituna echada sobre la tabla de piedra, hasta hacer la pulpa. La masa se transporta luego a la prensa [...] Se colocan los capachos formando una pila, es decir una columna, entre las cuatro columnas de hierro de la prensa hidráulica [...] Al lado de la prensa están dos calderas de hierro para calentar agua, con la cual se riega los lados, o sea, costados de la pila para hacer más fácil la extracción del aceite de la pulpa. El aceite exprimido mezclado con el agua, se derrama por la pila hasta llegar a una estría que circunda la base o sea el cilindro. De esta estría va a unas ollas enormemente grandes de barro que pueden contener más de doscientas libras de aceite cada una, enterradas bajo la tierra. Para que el agua se separe del aceite, junto a la gran olla (tinaja) [...] hay otra menor, y otra más. La primera se llama infierno y las otras purgatorios.''
 
''[...] Las prensas, tubos de desagüe y de conducción de agua y otros detalles de las máquinas, según el proyecto por mí preparado, los hice fundir en Sevilla, a donde viajé con este fin dos veces. Las prensas fundidas sometidas a pruebas en la fábrica, yo las aceptaba, pagaba y mandaba enviar en nuestros carros a casa a distancia de 180 millas.''
 
''[...] A parte de las mencionadas obras hubo también otras, como la construcción adecuada de los edificios, riegos del terreno por medio de canales, etc. Inicié una compañía para canalizar el río Guadalquivir desde la sierra, para el riego de los terrenos cercanos hasta la ciudad de Córdoba</nowiki>. Los planes y presupuestos que preparé fueron aceptados con entusiasmo. La realización de estas grandes empresas la interrumpí en el año 1848, cuando hube de abandonar España»''
 
Tanto la imagen actual de Laguna Grande como el acueducto, al igual que la proyección de la bodega, son igualmente trazados suyos, la mayor parte de los cuales no vería terminados. El cantero encargado de erigir la bodega, Julián Pérez, de hecho la fecha en 1861.
 
Años más tarde, encontramos un valioso texto que refleja la imagen final del conjunto una vez terminadas las obras y que describe someramente sus límites y origen. El de 5 de mayo de 1882, gracias a la aceptación como senador de Fermín de Collado y Echagüe, el Registro de la Propiedad de Baeza emite un certificado<ref>«Certificación del Registro de la Propiedad del partido de Baeza». [http://www.senado.es/historia/senadores/senadores.html Archivo del Senado]. Signatura HIS-0239-05(4).</ref> de sus propiedades, recogiendo un documento anterior y describiendo la Hacienda de este modo:
 
''«Hacienda llamada de la Laguna, termino de esta ciudad, compuesta de tres mil ochocientas fanegas de tierra del marco de quinientos estadales de once tercias castellanas: treinta y un mil olivas biejas: cuarenta y seis mil idem nuevas: tres alamedas con cuatro mil setecientos pies: tres mil almendros: trescientas encinas: una viña con diez y nueve mil vides: una huerta con cuatrocientas cincuenta varas de area, caz, dos cascadas, fuente asiento y enlosado del jardin, casa tejada y agua de pie: una casa principal: un molino de aceite: otro arinero con todos sus artefactos: un argibe deposito de aceite, almacenes: una bodega baja: patio de la labor: un tinado nuevo: otro pequeño: un pajar: casa nueba para aceituneros: dos casas viejas para idem: un casaron: una casa en el tejar: un horno de teja: otro de cal: un jardin con mil doscientas cincuenta y tres varas de pared, fuente, asientos, plantas y arboles: una casa pequeña llamada la Herreria: otra llamada de los Descalzos: otra nombrada de Mendoza: otra llamada del Alamillo: ocho casas cortijos nombrados de Jarafe: una casa castillo: y una hermita; sin expresar la superficie de los edificios, de las olivas, viña, arboles frutales, encinas y alameda; cuya hacienda enmedio de la cual se encuentran varias propiedades agenas, linda á Levante con tierras de Don Antonio Joaquin de Viedma hasta el Puente de Gil de Olid, el riato arriba hasta el Canalon, el Salado arriba hasta el termino de Jimena, ó sea lindando á la Dehesa de las Yeguas de esta Ciudad, al Sur con dicho termino de Jimena, á Poniente con Royo de Vil y al Norte Riveras del Rio Guadalquivir; y tiene ademas en el termino de Mancha Real nuevecientas ochenta fanegas de tierra y trece mil olivas nuevas. La deslindada hacienda correspondia al Excelentisimo Señor Don José Manuel Collado y Parada, vecino que fue de Madrid, Caballero Profeso de la Orden Militar de Alcantara y Senador del Reyno, por compra hecha á varios herederos y legatarios de la difunta Excelentisima Señora Doña Maria Teresa de Silva Silva [sic] Albarez de Toledo, Duquesa de Alba, Condesa de Oropesa, Marquesa de Carpio, viuda de Villafranca, y otras adquisiciones hechas á diferentes personas segun se expresa en las inscripciones trascriptas que anteceden»''
 
=== Explotación, aislamiento y decadencia de la Hacienda en el siglo XX ===
Oficialmente, el conjunto sería inaugurado aprovechando la visita que el rey Alfonso XIII realiza en enero de 1912 a tierras giennenses, siendo recibido por el Marqués de Viana, hijo político de Fermín de Collado (el cual fallece el 18 de mayo de ese mismo año). La revista giennense Lope de Sosa realiza la crónica, describiendo:
 
''«El Excmo. Sr. Marqués de Viana, Sumiller de Corps de Su Majestad, posee en la llamada finca «La Laguna», el magnífico Cortijo de Labor, en el que recientemente ha instalado una fábrica de extracción de aceites, utilizando los aparatos inventados por el Excmo. Sr. Marqués de Acapulco y por D. Guillermo Quintanilla<ref>Don Lope de Sosa con esto no hace sino justificar unos antecedentes nobles para la maquinaria de la Hacienda, obviando el proyecto de Franciszek Bartmański y el cual sería más justo citar (recordemos que fue el que mandó fundir y recoger las prensas y tubos de desagüe y de conducción de agua en Sevilla). El marqués de Acapulco que se cita aquí, Pedro Prado y Mesía, curiosamente también senador vitalicio, supuestamente ideó a principios del XIX la técnica llamada de extracción parcial en frío del aceite, consistente en extraer el primer zumo de la aceituna a través de un simple filtro, zumo de primera calidad que algunos denominan «la flor del aceite». Guillermo Quintanilla es un conocido ingeniero agrónomo de la época. El criterio de autoridad es algo frecuente en esta revista provincial y por otro lado característico de este tipo de publicaciones burguesas del XIX y hasta de nuestros días.</ref>, con modificaciones que son –puede decirse- el más moderno y progresivo avance en esa industria. Su Majestad había de inaugurar la fábrica aquella y para asistir al acto invitó el Sr. Marqués a numerosas personas de su amistad, conocedoras del problema olivarero y factores de él, vitalísimos.''
 
''[...]Inaugurada que fué la fábrica y puesta su maquinaria en movimiento, el Rey la inspeccionó toda, bajando a los subterráneos donde se hallan los depósitos y celebrando los adelantos que supone instalación tan compleja.''
 
''Luego, en la lonja del cortijo, se sirvió la comida [...]»''
 
El amplio marquesado se completaba con otras muchas explotaciones y edificaciones. Las numerosas salinas diseminadas a lo largo del territorio eran arrendadas para conseguir una mayor renta y una parte de la materia prima era almacenada en un depósito cercano al conjunto de la Hacienda. Esta sal permitía además el acceso a otros productos básicos que no eran producidos en la propiedad a través del mercado. Destacan los numerosos topónimos que aún se conservan, como el Arroyo Salado o el Camino de las Salinas. Las de Las Escuelas, una de las mayores, contaban con una parrilla compuesta por cerca de un centenar de balsas y aún funcionaban hasta hace unos años. De hecho, el suministro eléctrico de la vivienda cercana fue cortado en octubre de 2003.
 
Dos centrales hidroeléctricas llevaban la luz a lo largo del territorio, las de Tilín Tilín (1910 – 1930) y de Garcíez o El Molinillo (1903 – 1962). Esta última estaba dedicada exclusivamente al suministro de la Hacienda La Laguna y de la almazara anexa al Palacio de los Marqueses de Viana en Garcíez, monumental edificio pendiente de finalizar en próximas fechas su proceso de declaración como Bien de Interés Cultural. La administración del Palacio de Garcíez por los herederos de los Marqueses de Viana perviviría por más tiempo que la Hacienda.
 
De hecho, la titularidad de La Laguna cambiaría nuevamente en 1930, pasando al financiero mallorquín Juan March y Ordina, que la mantendría en pleno funcionamiento. Sin embargo, el territorio comienza un imparable proceso de división. De este modo, La Hacienda quedaría como una parcela aislada y consolidada, priorizándose su actividad como almazara debido a la cuantiosa reducción de olivar de propiedad y perdiendo gran parte de su significado. Algunas de las casas de los jornaleros serían otorgadas con el tiempo en propiedad, caerían en desuso muchos de los edificios auxiliares y otros cambiarían su propósito. El patio al Norte, donde actualmente se sitúa el Jardín de Variedades, debió ser uno de los que más notara la división del latifundio y de la autosuficiencia de la Hacienda. La red eléctrica, por otro lado, pronto sería traída de fuera, perdiendo el monopolio de sus centrales hidroeléctricas, las cuales serían abandonadas.
 
Este aislamiento, debido a la modernización de las últimas décadas del siglo, provocaría un menor rendimiento económico de una almazara que había quedado anticuada, a pesar de que las últimas reformas que conocemos en el Molino se llevarían a cabo en octubre de 1986<ref>En la planta del molino archivada en el expediente de declaración como Bien de Interés Cultural (Delegación Provincial de la Consejería de Cultura) se lee la anotación que el 5 de octubre de 1986 los molederos fueron sustituidos por trituradoras de martillo y que se instalaron seis prensas más'' «con bombas de hasta cinco cuerpos».''</ref>. Los últimos propietarios, quebrarían en beneficios y serían embargados por dos entidades financieras. Los trabajadores que aún estaban ligados a la Hacienda, cuentan cómo se suspendieron sus sueldos. A cambio, los propietarios les prometieron el aceite almacenado en la bodega, descubriendo más tarde que los depósitos habían sido llenados con agua y que solo flotaba una pequeña cantidad en su superficie<ref>Entrevista directa con antiguos trabajadores. ''Documentación técnica para la declaración de Bien de Interés Cultural, categoría Monumento, a favor de la Hacienda ‘La Laguna’ en Baeza (Jaén)'', Delegación Provincial de la Consejería de Cultura, enero de 2004.</ref>.
 
Los impagos motivaron que los edificios sufrieran el expolio de la práctica totalidad de bienes muebles y de toda clase de elementos desmontables. Buena parte de los antiguos trabajadores se trasladaron a Puente del Obispo, que vería aumentada considerablemente su población. En junio de 1989 la Hacienda sería abandonada.
 
=== Transformación. El Consorcio Hacienda La Laguna ===
El 3 de diciembre de 1992 se constituye en Baeza el Consorcio Hacienda La Laguna con la intención de convertir el recinto en un área destinada al Turismo Rural. Así, proceden a la compra progresiva de los terrenos inmediatos al conjunto y proyectan la construcción de un espacio hotelero, restaurantes, zona de ocio, museo del aceite y escuela de hostelería. En 1998 se inaugura el Museo de la Cultura del Olivo gestionado por la empresa baezana de servicios turísticos Pópulo.
 
Aunque de calidad muy dispar, las diversas reformas que desde 1992 se han acometido en la hacienda, han beneficiado su conservación. La bodega presenta un correcto estado de conservación y el acueducto, aunque seccionado para abrir una entrada, aún está en pie. Sea como fuere, la Hacienda ha recuperado su actividad tras una época de incertidumbre. La declaración de Paraje Natural a favor de La Laguna Grande y el mantenimiento de su uso agrícola, por otro lado, han garantizado igualmente su conservación.
 
== Notas ==
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== Bibliografía ==
*DE TORRES, Francisco (1677): ''Historia de Baeza''. Estudio y edición de José Rodríguez Molina. Excmo. Ayuntamiento de Baeza, 1999
 
*OGÁYAR FERNÁNDEZ, Blas (2004): ''Documentación técnica para la inscripción genérica colectiva de presas y saltos de energía hidroeléctrica de la provincia de Jaén''. Fichas: «Garcíez; El Molinillo» y «Tilín Tilín». Junta de Andalucía, Consejería de Cultura, Dirección General de Bienes Culturales.
 
*RODRÍGUEZ-MOÑINO SORIANO, Rafael (1996): ''Historia de la Hacienda ‘La Laguna’''. Consorcio Hacienda La Laguna. Baeza, Jaén.
 
*''Don Lope de Sosa. Crónica Mensual de la Provincia de Jaén. Núm. 159, marzo de 1926: «Así fue la visita que S.M. el Rey de España hizo a varios lugares del Reino de Jaén, en el mes de Enero del presente año». Págs. 88 y 89 (Edición Facsímil. Riquelme y Vargas Ediciones. Jaén, 1983)''
 
*''Gran Enciclopedia de Andalucía. ''Tomo IV, página 1886 (entrada ‘Haciendas de Olivar’). Promociones Culturales Andaluzas, S.A. Sevilla, 1979
 
==== Fuentes documentales ====
*[http://www.senado.es/historia/senadores/senadores.html Archivo del Senado]. [http://www.senado.es/cgi-bin/BRSCGI?CMD=VERDOC&BASE=HISE&DOCN=000001534 Signatura HIS-0239-05]: "Expediente personal del Senador por derecho propio Marqués de Laguna D. Fermín de Collado y Echagüe", legislatura de 1882.
 
*Archivo fotográfico de ''Paisajes Españoles, S.A''. Francisco Silvela, 44. 28028 Madrid. Fotografías 418778 y 418779. Vuelo realizado el 2 de junio de 1983.
 
*Plano de población 1:2000 de La Laguna. Instituto Geográfico y Estadístico, 1891. Código ICA 89-004838. ''Catálogo de Cartografía Histórica de Jaén''. Tomo I, Página 190 (2452). Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Instituto de Cartografía de Andalucía. Sevilla, 2000.
 
*Plano de riego sin escala de los Estados del Excmo. Señor Marqués de Viana; La Laguna; Olivar y cortijo de labor, 1930?. Código ICA 88-048808. ''Catálogo de Cartografía Histórica de Jaén''. Tomo I, Página 176 (2245). Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Instituto de Cartografía de Andalucía. Sevilla, 2000.
 
*Plano de riego sin escala con Croquis de la zona de La Laguna, 1930?. Código ICA 88-048809. ''Catálogo de Cartografía Histórica de Jaén''. Tomo I, Página 176 (2246). Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Instituto de Cartografía de Andalucía. Sevilla, 2000.
 
*Plano de riego 1:5.000 de La Laguna, Lote de la Excma. Señora Marquesa de Tenorio, 1930?. Código ICA 88-048810. ''Catálogo de Cartografía Histórica de Jaén''. Tomo I, Página 176 (2247). Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Instituto de Cartografía de Andalucía. Sevilla, 2000.
 
*Plano 1:50.000 del término municipal de Baeza y sus vías pecuarias por el perito agrícola E. Gallego, 1957. Código ICA 88-016322.'' Catálogo de Cartografía Histórica de Jaén''. Tomo I, Página 183 (2357). Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Instituto de Cartografía de Andalucía. Sevilla, 2000.
 
== Enlaces externos ==
*[http://www.juntadeandalucia.es/boja/boletines/2007/125/d/28.html BOJA 125, de 26 de junio de 2007]: Decreto 166/2007, de 5 de junio, por el que se declara Bien de Interés Cultural, con la categoría de Monumento, la Hacienda La Laguna de Puente del Obispo, en Baeza (Jaén)
 
*[http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/servtc5/ventana/mostrarFicha.do?idEspacio=7398 Ventana del Visitante de los Espacios Naturales Protegidos de Andalucía]: Paraje Natural Laguna Grande
 
*[http://www.ehlaguna.com/ Página oficial del Hotel y Escuela de Hostelería La Laguna]
 
*[http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/servtc5/ventana/mostrarFicha.do?idEspacio=7398 Ventana del Visitante de los Espacios Naturales Protegidos de Andalucía] - Paraje Natural Laguna Grande
*[http://www.museodelaculturadelolivo.com/ Página oficial del Museo de la Cultura del Olivo]
 
[[Categoríacategoría:Bienes de interés cultural de JaénAndalucía]]