Diferencia entre revisiones de «Ildefonso Cerdá»

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→‎Nacimiento Urbanístico: Scripta Nova. Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales. Universidad de Barcelona [ISSN 1138-9788]. Nº 61, 1 de abril de 2000.
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Nació en el [[Mas]] Cerdá de la Garga,<ref group=nota>En algunas publicaciones figura como «mas El Serdà»</ref> una propiedad que su familia poseía desde el [[siglo XIV]], en [[Centellas]], [[Osona]], [[provincia de Barcelona|Barcelona]].<ref name="gencat">{{cita web |url=http://www.gencat.cat/diue/doc/doc_23739348_1.pdf |título=Turisme de Catalunya: Exposició Cerdà |autor=[[Generalidad de Cataluña]] |fechaacceso=30 de octubre de 2009 |idioma=catalán|urlarchivo=http://web.archive.org/web/http://www.gencat.cat/diue/doc/doc_23739348_1.pdf|fechaarchivo=23 de noviembre de 2015}}</ref> Fue el cuarto hijo –tercero de los varones– de seis hermanos, en el seno de una familia con raíces documentadas en la [[Plana de Vic]] desde [[1440]].<ref name="permanyer">{{cita libro|autor=Lluís Permanyer|título=L'Eixample: 150 anys d'història|ubicación=Barcelona|editorial=Viena Edicions / Ajuntament de Barcelona|año=2008|isbn=978-84-8330-508-9}}</ref> Pese a su ascendencia rural, los Cerdá eran gente de mundo con intereses ligados al comercio americano, un hecho que sin duda estimuló el espíritu abierto, las inquietudes y la fe en el progreso del joven Ildefonso.<ref name="gencat"/>
 
Ingeniero, científico y político español nacido en Centelles (Barcelona) en 1825. Perteneciente a una familia liberal, Cerdá inició sus estudios de ingeniería en la Escuela de Ingenieros de Caminos y Puertos de Madrid. En los años que duró su período formativo, de 1836 a 1841, se introdujo en las corrientes de pensamiento progresista. Esto hizo que en un principio estuviera más interesado en la política que en la urbanización; fue una de las cabezas visibles del Partido Progresista en Barcelona. En la capital catalana desempeñó diversos cargos durante toda su vida. Además en 1850 fue elegido diputado en Cortes por esta misma ciudad. Destinado por su padre a la carrera eclesiástica, cursó estudios de [[latín]] y [[filosofía]] en el seminario de [[Vich]], ciudad donde su familia, de tradición [[Liberalismo|liberal]], se refugió durante la [[Guerra de los Agraviados]] en [[1827]]. Tras enfrentarse con su padre para cambiar su orientación profesional, en [[1832]] se trasladó a [[Barcelona]], donde inició los estudios de [[arquitectura]], [[matemáticas]], [[náutica]] y [[dibujo]] en la [[Escuela de la Llotja]]. No obtuvo el título de [[arquitecto]] y, en septiembre de [[1835]], se trasladó a [[Madrid]] para estudiar en la [[E.T.S.I. Caminos, Canales y Puertos (Universidad Politécnica de Madrid)|Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos]], donde obtuvo el título de ingeniero el año en [[1841]], tras muchas penurias económicas debidas a la falta de apoyo familiar.<ref name="permanyer"/>
 
El [[20 de junio]] de [[1848]] se casó con la pintora Magdalena Clotilde Bosch Calmell, hija del banquero Josep Bosch Mustich,<ref name="permanyer"/> con quien tuvo cuatro hijas:<ref name="ICC">{{cita web |url=http://www.icc.es/web/content/pdf/ca/common/cartoteca/fons_documental/viladevall_cerda.pdf |título=Inventari de la documentació personal de Cerdà |autor=[[Instituto Cartográfico de Cataluña]] |fecha=abril de 2007 |fechaacceso=30 de octubre de 2009 |formato=PDF |idioma=catalán|urlarchivo=http://web.archive.org/web/http://www.icc.es/web/content/pdf/ca/common/cartoteca/fons_documental/viladevall_cerda.pdf|fechaarchivo=23 de noviembre de 2015}}</ref> Pepita, Sol, Rosita y [[Clotilde Cerdá|Clotilde]], que fue una conocida instrumentista de [[arpa]].<ref>Simón Palmer, María del Carmen ([[Consejo Superior de Investigaciones Científicas|CSIC]]): [http://cvc.cervantes.es/obref/aih/pdf/09/aih_09_2_011.pdf ''Actas del IX Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas''] [[Instituto Cervantes]], agosto de 1986</ref> La relación matrimonial no funcionó bien y Clotilde, la hija menor, fue fruto de las relaciones [[adulterio|adúlteras]] de su esposa, aunque Cerdá la reconoció como propia. Finalmente, en [[1862]] el matrimonio se separó.<ref name="ICC"/>
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Con la muerte prematura de su padre (1787-1844) y de sus dos hermanos, Ramon (1808-1837) y Josep (1806-1848), heredó un patrimonio importante que le permitió renunciar, en [[1849]], a su cargo oficial en Obras Públicas, reorientar su profesión, entrar en política y dedicar, como él mismo describió, «''mi fortuna toda entera, todo mi crédito, todo mi tiempo, todas mis comodidades, todas mis afecciones, y hasta mi consideración personal en la sociedad, a la idea urbanizadora''».<ref name="permanyer"/>
 
Además de pionero del urbanismo, Ildefonso Cerda fue también un político de cariz progresista: diputado a Cortes en Madrid, regidor del Ayuntamiento de Barcelona en diversas etapas e incluso presidente de la Diputación de Barcelona en 1873.
En los últimos días de su vida, enfermo y semiarruinado, pues el gobierno le debía los honorarios de muchos de los trabajos realizados, se trasladó al balneario de Las Caldas del Besaya, en Cantabria, donde murió el [[21 de agosto]] de [[1876]].<ref name="ICerda"/> El día 23 de agosto el diario ''La Imprenta'' publicó una nota necrológica con las palabras siguientes: «''El señor Cerdá era liberal y tenía talento, dos circunstancias que en España perjudican y suelen crear muchos enemigos...''»<ref name="rueda"/>
 
En los últimos días de su vida, enfermo y semiarruinado, pues el gobierno le debía los honorarios de muchos de los trabajos realizados, se trasladó al balneario de Las Caldas del Besaya, en Cantabria, donde murió el [[21 de agosto]] de [[1876]].<ref name="ICerda" /> El día 23 de agosto el diario ''La Imprenta'' publicó una nota necrológica con las palabras siguientes: «''El señor Cerdá era liberal y tenía talento, dos circunstancias que en España perjudican y suelen crear muchos enemigos...''»<ref name="rueda" /> Los años dedicados a sus estudios y la cantidad de trabajos que la Administración le debía habían resultado fatales para sus finanzas. Menospreciado por algunos de sus contemporáneos, su papel fundamental en la transformación de Barcelona parece hoy indiscutible.
 
En [[1971]], y coincidiendo con la reimpresión de su ''Teoría general de la urbanización'', sus restos mortales fueron trasladados y enterrados en el [[Cementerio de Montjuic|Cementerio Nuevo]] de Montjuïc en Barcelona.<ref name="enciclopedia">{{cita web |url=http://www.enciclopedia.cat/fitxa_v2.jsp?NDCHEC=0017038 |título=Ildefons Cerdà i Sunyer |autor=[[Gran Enciclopedia Catalana]] |fechaacceso=31 de octubre de 2009 |idioma=catalán}}</ref>
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[[Archivo:PlaCerda1859b.jpg|center|600px|thumb|Su principal proyecto urbanístico: el [[Ensanche de Barcelona]], conocido como el [[Plan Cerdá]] (1859), donde se aprecia la retícula de cuadrados achaflanados y las diagonales programadas.]]
 
Al tiempo que desarrollaba su actividad política, en la [[Años 1850|década de 1850]] Cerdá siguió realizando estudios de urbanización. Su objetivo era hacer una ciencia de esta materia, por lo que se dedicó por entero a cimentar sus bases. En 1859, la propia reina, Isabel II, y sin consultar con las autoridades de Barcelona, le encargó la creación de un plan para el ensanche de Barcelona.
 
Las propuestas [[jurista|jurídicas]] de Cerdá para las ciudades de Madrid y Barcelona, propiciaron una nueva legislación, pero se encontró falto de precedentes, tanto por la legislación estatal como la extranjera. En ''Cuatro palabras sobre el Ensanche'' (1861) desarrolló extensamente el sistema de compensación y la técnica de reparcelación como medio para conseguir una justa distribución de los beneficios y de los gastos del planeamiento urbanístico entre los propietarios y la obtención de terrenos de forma proporcionada y edificables en proporción a la parcela aportada, sistema incluido más tarde en el Proyecto de ley de [[Manuel Posada Herrera|Posada Herrera]] e incorporado un siglo después a la ''Ley del Suelo'' de 1956.
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Institucionalmente también fue despreciado. El concurso del ensanche fijaba la adjudicación del nombre del ganador a una calle principal del entramado. A Cerdá se le negó este premio hasta que en los años 1960 la plaza Cerdá tomó su nombre. Se trata de una plaza ubicada fuera de la trama que él mismo realizó, con una marginalidad urbanística mantenida hasta hace poco tiempo y recordada por los constantes problemas de inundaciones por un mal diseño del alcantarillado, curiosamente una de las máximas preocupaciones de Ildefonso Cerdá. De la misma manera, se le negó un monumento que ya había sido diseñado en 1889 por [[Pere Falqués]] y que el alcalde [[Francesc Rius]] no quiso llevar a cabo.<ref name=monument/>
 
=== '''Nacimiento Urbanístico''' ===
 
==== La búsqueda de una "ciencia de la urbanización" frente al "arte de la construcción de ciudades": ley general para 'sujetar' el empirismo facultativo ====
Ildefonso Cerdá y el nacimiento de la Urbanística: la primera propuesta disciplinar de su estructura profunda
 
Con Ildefonso Cerdá y por vez primera en la corta historia de la disciplina de la Urbanística, de la que él mismo fue su creador y sistematizador indiscutible, se identifican los fundamentos científicos y se inicia el largo desarrollo de este moderno y amplio campo de conocimiento. Y ello lo articuló Cerdá novedosamente, primero, mediante la integración metodológica en el Urbanismo (técnica aplicada de la Urbanística) del Derecho público y la Economía inseparablemente entrelazada, en tanto que disciplinas estructuradoras del diseño físico-espacial del proyecto o plan. Y, en segundo lugar, Cerdá aborda por primera vez, para que la nueva disciplina fuese verdaderamente científica, un análisis reduccionista del espacio socialmente configurado mediante el ejercicio sistemático del regressus o reductio esenciales desde lo aparente, complejo e intrincado de la ciudad y el territorio, hasta su constituyente más simple, sencillo y elemental. Propone así la unidad universal de la entidad casa-predio-vial, configurando con ella la díada inescindible de vías-intervías, constitutiva de la estructura profunda del todo. Cerdá entendería este análisis reductor como necesario para poder articular y reconstruir un conocimiento científico globalizador y complejo (la 'colonización', la 'urbanización' y la 'rurización') sobre los ladrillos, átomos u objetos fundamentadores de un saber disciplinado, recomponiendo así la totalidad sintéticamente desde una perspectiva global y de integración holista.
 
Ya muy tempranamente, en el mismo prólogo de la Teoría de la Construcción de Ciudades (en adelante TCC, 1859a:), Cerdá enuncia una nueva forma crítica de aproximarse metodológicamente a los problemas urbanos «de fundación de nuevas ciudades y de reforma y ensanche de las existentes», rompiendo con el hacer 'facultativo' y proyectualista anterior y planteando la necesidad de elaborar una teoría general que "sujetara" y universalizara (nomotética) el enfoque particularista y proyectual (idiográfico) bajo el que se hallaba sometido por los artistas y arquitectos de las Bellas Artes(1). Empezando con las lamentaciones que tantas veces habría de repetir, en un texto clave a mi entender, Cerdá puntualiza:
 
Además del ensanche de Barcelona, su faceta científica se completó con otras importantes obras. Su legado urbanístico se resume en su obra más importante: Teoría general de la urbanización y aplicación de sus principios a la reforma y ensanche de Barcelona (1867). La visión urbanística de la ciudad de Barcelona, además de con las obras citadas, se completa con otros escritos: Monografía estadística de la clase obrera de Barcelona en 1856 (1856) y Anteproyecto (1855), y diversos textos anexos a estos dos. Cerdá se proponía elevar los problemas particuliares de la urbanización a un nivel más abstracto de una universal Teoría de la construcción de las ciudades. Intentó desarrollar una ciencia social específica que acabase con las contradicciones atávicas entre la innovación tecnológica y la organización socio-espacial. Llevó a cabo una práctica urbanística que trataba de superar el desequilibrio entre la ciudad que existe, lo que él llamaba el continente, y la población que la mora o contenido. Su aportación fue pionera en los estudios de urbanística moderna. Ildefonso Cerdá murió en Caldas de Besaya (Santander) en 1876.
 
== Principales obras ==