Diferencia entre revisiones de «Cordero de Dios»

Contenido eliminado Contenido añadido
PR:CW: Categorías: Más de una por línea
Sin resumen de edición
Línea 16:
 
== Evangelio de Juan ==
El título «Cordero de Dios» para Jesús aparece en el [[Evangelio de Juan]], con la proclamación inicial «He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo» en {{biblia|Juan|1:,29}}, siendo reafirmado al día siguiente en {{biblia|Juan|1:,36}}. Este segundo uso del título «Cordero de Dios» tiene lugar en presencia de los dos primeros apóstoles de Jesús, quienes inmediatamente le siguen, y se dirigen a él como «Rabí» con respeto y más tarde en la narrativa traen a otros a encontrarse con él.
 
Estos dos proclamaciones de Jesús como el Cordero de Dios se relacionan muy estrechamente con la otra proclama del Bautista en {{biblia|Juan|1:,34}}: «Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios». Desde una perspectiva cristológica, estas proclamas y el descenso del [[Espíritu Santo]] en forma de paloma en {{biblia|Juan|1:,32}} se refuerzan entre sí para establecer el elemento divino de la Persona de Cristo. En la cristología joánica, la proclama «que quita el pecado del mundo» comienza el desarrollo del tema salvífico de la muerte redentora y expiatoria de Jesús, seguida de su resurrección, que se basa en otras proclamas como «verdaderamente éste es el Salvador del mundo», pronunciada por los samaritanos en {{biblia|Juan|4:,42}}.
 
== Libro del Apocalipsis ==
El [[libro del Apocalipsis]] incluye más de veintinueve referencias a un cordero como león («inmolado pero en pie») que entrega la victoria en una forma que recuerda al Cristo resucitado. En la primera aparición del Cordero en Apocalipsis ({{biblia|Apocalipsis|5:,1-7}}) solamente el cordero (que es de la tribu de Judá, y la raíz de David) es encontrado digno de tomar el libro del juicio de Dios y romper los sellos. La referencia al cordero en {{biblia|Apocalipsis|5:,6}} se refiere a los siete espíritus de Dios, que aparecen por primera vez en {{biblia|Apocalipsis|1:,4}} y están asociados con Jesús, a quien están sujetos, junto con las siete estrellas.
 
En {{biblia|Apocalipsis|21:,14}} se señala que el Cordero tiene doce apóstoles. La entrega del rollo (es decir, el libro que contiene los nombres de aquellos que serán salvados) al cordero resucitado significa el cambio de papel del cordero. En el Calvario, el Cordero está sometido a la voluntad del Padre para ser muerto, pero ahora se le confía el juicio de la humanidad.
 
Desde el principio, el libro de Apocalipsis es presentado como una «revelación de Jesucristo» y, por lo tanto, el enfoque sobre el Cordero tanto como redentor y juez presenta el doble papel de Jesús: él redime al hombre a través del autosacrificio, sin embargo, también llama al hombre a dar cuenta en el día del juicio.
Línea 41:
Esta imagen del [[Mesías]] como Cordero de Dios proviene de los textos proféticos, especialmente [[Libro de Isaías|Isaías]] (Is 53, 7) y [[Ezequiel (profeta)|Ezequiel]] (Ez 46, 13-15), y es asumida en toda su plenitud primero por [[Pablo de Tarso|san Pablo]] en I Co 5, 7, y por [[Juan Evangelista|san Juan]] en el [[Apocalipsis]], libro en el que el Cordero de Dios aparece como representación directa de Jesucristo como Salvador y Juez:fidedigna river versailles
 
{{cita|Entonces vi, de pie, en medio del trono y de los cuatro Vivientes y de los Ancianos, un Cordero, como degollado; tenía siete cuernos y siete ojos, que son los siete Espíritus de Dios, enviados a toda la tierra. Y se acercó y tomó el libro de la mano derecha del que está sentado en el trono. Cuando lo tomó, los cuatro Vivientes y los veinticuatro Ancianos se postraron delante del Cordero. Tenía cada uno una cítara y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos. Y cantan un cántico nuevo diciendo: «Eres digno de tomar el libro y abrir sus sellos porque fuiste degollado y compraste para Dios con tu sangre hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación; y has hecho de ellos para nuestro Dios un Reino de Sacerdotes, y reinan sobre la tierra.» Y en la visión oí la voz de una multitud de Ángeles alrededor del trono, de los Vivientes y de los Ancianos. Su número era miríadas de miríadas y millares de millares, y decían con fuerte voz: «Digno es el Cordero degollado de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fuerza, el honor, la gloria y la alabanza.» Y toda criatura, del cielo, de la tierra, de debajo de la tierra y del mar, y todo lo que hay en ellos, oí que respondían: «Al que está sentado en el trono y al Cordero, alabanza, honor, gloria y potencia por los siglos de los siglos.» Y los cuatro Vivientes decían: «Amén»; y los Ancianos se postraron para adorar.|{{biblia|Apocalipsis|5:,7-14}}}}
 
== Iconografía ==