Pedro Mariño de Lobera

Cronista hispano
(Redirigido desde «Pedro Mariño de Lobeira»)

Pedro Mariño de Lobera (Pontevedra, Galicia, 1528 - Lima, Perú,1594) fue un militar y cronista español que, tras haber participado en la Conquista de Chile, dejó un relato de sus sucesos en la obra Crónica del Reino de Chile.

Mariño de Lobera
Información personal
Nombre completo Pedro Mariño de Lobera[1]
Nacimiento 1528
Pontevedra, Galicia
Fallecimiento 1594
Lima, Perú
Residencia España
Francia
Cuba
Panamá
Perú
Chile
Nacionalidad Imperio español
Ciudadanía Imperio español
Etnia Español
Religión Católico
Familia
Cónyuge Francisca de Miranda y Marañón
Hijos Ana y Alonso
Familiares Suegra Mencia de Marañón
Información profesional
Ocupación Explorador, escritor, historiador y militar Ver y modificar los datos en Wikidata
Obras notables Crónica del Reino de Chile

Biografía editar

Sus padres fueron Hernán Rodríguez de Lobera y Rivera, y Constanza Mariño Marinas de Sotomayor. Contrajo matrimonio con Francisca de Miranda hija de Mencia de Marañón[nota 1]​ y de esta unión nacieron dos hijos: Ana y Alonso.

Vida profesional editar

De profesión soldado, después de servir en la guerra entre España y Francia, viajó en 1545 a América. Estuvo bajo el mando de Pedro de La Gasca cuando este último recibió la orden del rey Carlos V de poner fin a la sublevación de Gonzalo Pizarro en el Perú. Mariño se unió a las fuerzas de La Gasca en La Habana.[nota 2]​ Se trasladó a Lima y permaneció en el Perú hasta su viaje a Chile, en 1551. En este territorio participó activamente junto a Pedro de Valdivia y a Francisco de Villagra en las campañas que el primero realizó en el Sur, destacándose como soldado. También, estuvo presente en las campañas de los gobernadores García Hurtado de Mendoza y Rodrigo de Quiroga.

El hijo de Pedro, Alonso, le acompañó en algunas de sus campañas y en la batalla de Codico:[2]

"Alonso Mariño de Lobera que estuvo cinco días preso entre los adversarios con tres heridas peligrosas y fue libre de las prisiones por la buena diligencia de su padre"
[3]

Posteriormente, en pago de sus servicios, se le concedió una encomienda de indígenas en la ciudad de Valdivia, donde era vecino. Desempeñó el cargo de corregidor de la misma ciudad, prestando su ayuda para socorrer a las víctimas de la inundación que, producto del terremoto de 1575, cegó el desagüe del lago Riñihue, tal como volviera a suceder con el terremoto de 1960. Más tarde fue también corregidor de Camaná, en la costa sur del Perú, volviendo posteriormente a Lima.

En sus últimos años trabó amistad con el jesuita Bartolomé de Escobar, quien también había estado en Chile, entregándole los manuscritos de su Crónica del Reino de Chile para que los corrigiera y editara. Sin embargo, el texto nunca fue impreso en la época. Sólo en 1865 fue publicado en el volumen VI de la Colección de Historiadores de Chile y documentos relativos a la Historia Nacional de ese país. Murió en Lima el año 1594.

El origen de su escrito: Crónica del Reino de Chile editar

En la época de la Conquista, era común que algunos conquistadores escribieran acerca de las vivencias y situaciones de las que eran parte y testigos. Soldado de profesión, Mariño de Lobera no estuvo ajeno a estas labores y dejó un importante legado a la historia de Chile en su manuscrito. El texto original de este no ha llegado a nuestros días y lo que de él se conoce se debe a la pluma del sacerdote jesuita Bartolomé de Escobar, quien recibió -de parte del virrey del Perú García Hurtado de Mendoza- el encargo de revisar y corregir los apuntes de Mariño. Esta labor dio forma definitiva a la Crónica del Reino de Chile, obra que, en estricto rigor, es muy diferente a la que pudiera haber escrito un simple soldado. En sus pasajes, es fácil advertir la pluma de una persona conocedora del arte de escribir, lo que estaría indicando la intervención del padre Escobar.

Materias de su libro editar

Temas relacionados editar

Su crónica editar

En la obra llama la atención la imprecisión y la vaguedad del relato de la primera parte de la Conquista de Chile, más específicamente hasta la llegada de García Hurtado de Mendoza. Esto contrasta con la segunda parte, que corresponde precisamente al gobierno de Hurtado de Mendoza. Los hechos y las hazañas del antiguo gobernador de Chile -quien facilitó a Escobar parte de los documentos con que contaba- son narrados con claridad. La Crónica del Reino de Chile es, de entre las crónicas de la conquista de Chile, la que con mayor frecuencia incluye relatos de sucesos extraordinarios y sobrenaturales.

Véase también editar

Referencias editar

Notas editar

  1. Marañón, Mencía. Burgos, p. m. s. XVI – ?, s. m. s. XVI. Encomendera. Mencía Miranda nació en Burgos o sus alrededores, y posiblemente era pariente de Juan Gómez Marañón, escribano del monasterio y barrio de Las Huelgas.Viajó a Chile junto a su marido Alonso de Miranda en 1553. Es uno de los pocos matrimonios constatado, pues lo habitual es que los expedicionarios pasaran a las nuevas tierras mientras eran aún solteros.Mencía se distinguió por la práctica de la caridad con los necesitados, tanto españoles como indígenas.El matrimonio se estableció en la ciudad de la Imperial, recién fundada. Allí estaban cuando se produjo el alzamiento indígena de 1553, al que sucedió una hambruna por falta de siembras. La caridad de su esposo, Alonso de Miranda, no le impidió tomar las armas contra los indígenas rebeldes cuando se produjo el ataque de Lautano a la Imperial en 1554. En esta ciudad fue encomendera junto a su marido, trasladándose a Valdivia después de que el gobernador Villagra les usurpara la encomienda hacia 1561. Tuvieron varias hijas: Francisca de Miranda, casada con Pedro Mariño de Lobera, el cronista; Bartolina de Miranda, casada con el capitán Hernando de Aranda Valdivia; María de Miranda, casada con Juan Castañón; y Mariana de Miranda, casada con Francisco Herrera de Sotomayor. La menciona el cronista Mariño de Lobera. Mujer de Alonso de Miranda, vivían en los alrededores de Burgos y pasaron a Chile. Era muy caritativa, daba limosnas a los indios y curaba a los enfermos, hasta tal punto que su casa llegó a parecer un hospital. El matrimonio se estableció en la ciudad de la Imperial, recién fundada. Allí estaban cuando se produjo el alzamiento indígena de 1553, al que sucedió una hambruna por falta de siembras. La caridad de su esposo, Alonso de Miranda, no le impidió tomar las armas contra los indígenas rebeldes cuando se produjo el ataque de Lautano a la Imperial en 1554. En esta ciudad fue encomendera junto a su marido, trasladándose a Valdivia después de que el gobernador Villagra les usurpara la encomienda hacia 1561. Tuvieron varias hijas: Francisca de Miranda, casada con Pedro Mariño de Lobera, el cronista; Bartolina de Miranda, casada con el capitán Hernando de Aranda Valdivia; María de Miranda, casada con Juan Castañón; y Mariana de Miranda, casada con Francisco Herrera de Sotomayor. Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Contratación, 5.537, l-I, fol. 112v.; Chile, 41, pieza 4. J. T. Medina (recop.), Colección de Documentos Inéditos para la Historia de Chile, Santiago de Chile, 1888-1889; P. Mariño de Lobera, Crónica del Reino de Chile, Madrid, Atlas, 1960 (Biblioteca de Autores Españoles, vol. 131), pág. 351; C. Ruiz González, Los Burgaleses en Chile durante el siglo XVI, tesis doctoral, Valladolid, Universidad, 1983 (inéd.).
  2. Según las crónicas, durante la guerra entre España y Francia su padre lo alistó "mirando por el honor de S.M. le puso la espada en la cinta" y juntos lucharon a favor del rey. Y, "con el permiso y la bendición de Don Hernán", ya como capitán, viajó con su mujer e hijos a América en 1545, y se instaló en Panamá (Nombre de Dios) y después en Cuba. En un momento dado decide volver a Pontevedra pero no pudo hacerlo porque La Gasca, que se lo encontró en el puerto de La Habana listo para partir, en nombre del Rey le encomendó una misión que lo llevaría a México para comunicar al virrey de este país, Antonio de Mendoza, que vigilara las costas de Nueva España "para que no saliesen auxilios para el traidor Pizarro, alzado con el estandarte real". Pizarro, finalmente fue vencido por las tropas de La Gasca en el valle de Xaquixaguana en 1550, y fue decapitado.

Bibliografía editar

Enlaces externos editar