Tarsis

lugar mencionado en la Biblia

Tarsis (en hebreo :תרשיש Taršyš, en griego:Θαρσείς Tharseis) es un topónimo que aparece en el Tanaj (Antiguo Testamento) con varios significados inciertos, más frecuentemente como un lugar (probablemente una gran ciudad o región) lejos del otro lado del mar desde Fenicia (el actual Líbano) y la Tierra de Israel. Se decía que Tarsis había exportado grandes cantidades de metales importantes a Fenicia e Israel. El mismo topónimo aparece en las inscripciones acadias del rey asirio Esarhaddon (fallecido en 669 a. C.) y también en la inscripción fenicia de la Piedra de Nora (800 a. C.) en Cerdeña; su ubicación exacta nunca se conoció y finalmente se perdió en la antigüedad.

Con el tiempo, surgieron leyendas en torno a él, por lo que su identidad ha sido objeto de investigaciones y comentarios académicos durante más de dos mil años.

Actualmente, Tarsis es el nombre de un pueblo moderno en el Líbano, y Tharsis es un pueblo moderno en el sur de España.

Identificación editar

El nombre Tarsis se menciona en la Biblia por vez primera en los días de Salomón.[1]

  • Flavio Josefo (Antiquitates Iudaicae i. 6, §) se refiere a la ciudad de "Tarshush", identificándola como la ciudad de Tarso en el Asia Menor.
  • En los escritos asirios del reinado de Asarhaddón se menciona a Tarsis (Tarsisi), pero no se la identifica con ningún lugar concreto. Con anterioridad a esto, los asirios se referían a Tarsis (Tarsisi) como Tarzi.

Recientes investigaciones han mostrado que los metales que el Antiguo Testamento asocia con Tarsis existían también en los Montes Tauro, por lo que algunos autores modernos han pensado que quizás Tarsis se hallara en esa región.

  • La Biblia emplea el término barcos Tarsis para indicar, designar o denotar grandes barcos adecuados para viajes largos hacia dondequiera que fuera su destino;[2]​ algunas traducciones de la Biblia, incluyendo la NVI, van más lejos con respecto a la traducción, y la frase "barco(s) Tarsis" la traducen como "barco(s) mercante(s) comerciale(s)" (en la NVI no está de esta forma. Antes dice: "Jonás se fue, pero en dirección a Tarsis, para huir de Yahweh. Bajó a Jope, donde encontró un barco que zarpaba rumbo a Tarsis", y la huida de Jonás puede ser tomada como una huida a 'un lugar muy muy lejano' en vez de dar un término geográfico preciso.[3]

Otra especulación de los tiempos modernos propone que el término Tarsis puede ser derivado del griego tarsos, que es el nombre de la pala de los remos empleados en los barcos antiguos. En el Mar Mediterráneo, los barcos que usan sólo velas a menudo se quedaban varados sin viento, mientras que los barcos de remeros podían continuar la travesía.[4]​ Por lo tanto, los -buques mercantes- barcos Tarsis se servían más probablemente de remeros en lugar de velas.

Sin embargo, algunos siguen creyendo que puede referirse a Tarso, en Cilicia, de donde era Saulo, quien después fuera conocido como Pablo de Tarso.[5]

Se dice que Tarsis es una palabra fenicia, derivada a su vez del acadio, que significa “fundición”, “refinerí­a”. Este nombre se dio a las localidades donde los fenicios desarrollaban actividades mineras. En la Biblia es también el nombre de una piedra preciosa asociada con la tribu de Aser que ha estado identificada con el crisoberilo o aguamarina.[6]​.

  • La Septuaginta y la Vulgata lo traducen en varios pasajes como Cartago, aparentemente siguiendo una tradición judía encontrada en el Targum de Jonathan ("Afriki", es decir, Cartago).
  • Bochart (en su Phaleg) y autores posteriores, como Hertz (1936) identifican a Tarsis como la capital del reino de Tartessos que comprendía las actuales provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz en España. En el Oráculo en contra de Tiro, el profeta Ezequiel menciona que la plata, el hierro, el plomo y el estaño venían de Tarsis a Tiro, los cuales eran almacenados en Tiro y revendidos, probablemente en Mesopotamia.[7]
  • Le Page Renouf[8]​ interpreta que Tarsis significa o se refiere a una costa y como la palabra aparece frecuentemente en conjunto con Tiro, se entiende que se refiere a la costa fenicia.
  • Cheyne[9]​ piensa que "Tarsis" (segundo hijo de Javan, quien era el cuarto hijo de Japhet, quien era el tercer hijo de Noé)[10]​ y "Tiras" (séptimo hijo de Japhet),[11]​ descendientes de Noé son en realidad dos nombres de una misma nación, derivados de dos fuentes diferentes, y pueden referirse a los Tirrenios o Etruscos. Así, el nombre se puede referir a Italia o a las costas occidentales de Grecia.
  • Uno de los siete consejeros del Rey Asuero, quien fue príncipe de Media y Persia [1][12]

Historia posterior editar

Tarsis es el nombre de un pueblo en el Líbano, localizado en el Baabda Kadaa a una altitud de 1400m y a 50 km de Beirut.

En la traducción al español del Libro de viajes de Benjamín de Tudela, por José Ramón Magdalena Nom de Déu,[13]​ cita Tarsis en la costa mediterránea de la actual Turquía, en la antigua comarca de Cilicia, en la Armenia del siglo XII. Cita textualmente: "Desde allí (Coricos, Korykus o Corycus, actual Kizkalesi turca) hay dos jornadas (80 km aproximadamente) hasta Malmistros, que es Tarsis, la cual se asienta sobre el mar. Y hasta aquí es el reino de los helenos llamados GREGOS. Desde allí hay dos jornadas hasta Antioquía la Grande..." No está clara la localización de Tarsis sobre el territorio actual si nos ceñimos a su descripción: a dos jornadas y a orillas del mar. Malmistros se relaciona con la ciudad romana de Mopsuestia, Al-Massisa, Mamista y Mamistra en la Edad Media, localizada a 170 km de Kizkalesi en el interior, a orillas del río Ceyhan Nehri. Más tarde su nombre evoluciona a Messis y Mensis. Y respecto al topónimo de Tarsis que cita Benjamín de Tudela, encontramos Tarso, a 105 km al este de Kizkalesi, pero no "se asienta sobre el mar". Mersin, en cambio, sí que está a 80 km y en la costa. ¿Podría tratarse de esta ciudad?

Tharsis, con h intercalada por su escritura en inglés (las compañías mineras inglesas rebautizaron la zona con el nombre en anglosajón), es un pequeño pueblo minero de la provincia de Huelva, a 50 km al norte de la capital de provincia. Hace referencia a la Tarsis del reino de Tartessos, su nombre se mantuvo a lo largo de los siglos por sus habitantes, así le llamaban al cerro céntrico y más elevado de su sierra. A sus pies, quedaban los vestigios de un extenso pueblo antiguo y colosales restos de la explotación pasada.

Alrededor de 1665, los seguidores de Shabbatai Zvi (Shabtai Tzvi) en Esmirna interpretaron los barcos de Tarsis como barcos holandeses que podrían llevarlos a Tierra Santa.

Algunos eruditos del Antiguo Testamento creen que el poder de Tarsis está en Gran Bretaña, y posiblemente esté relacionado con una Tarsis Oriental, llamada India. Algunos, guiados por la segunda venida de Jesús y el Reino de Dios alrededor de la tierra de Israel, creen que las profecías consideran que el Poder de Tarsis tiene su último día de cumplimiento en la época moderna.

Tarsis fue igualmente el nombre de un partido político de corta vida fundado por Moshe Dwek, el que intentó asesinar al primer ministro israelí David Ben Gurion.

La forma griega para el nombre, Tarsis, fue dado por Giovanni Schiaparelli a una región de Marte.

Otra teoría es la del fraile jesuita Francisco Collin, que sostenía que la gente filipina era descendiente de los habitantes de Tarsis.

En la novela Moby Dick de Herman Melville, el padre Mapple da un sermón acerca de la historia de Jonás. El padre Mapple identifica a Tarsis, a la cual huyó Jonás, como el puerto de Cádiz en Andalucía, Españaː "Y, ¿dónde está Cádiz, compañeros? Cádiz está en España; tan lejos por vía marítima de Jope como Jonás podía haber navegado en aquellos remotos días en que el Atlántico casi era un mar desconocido."[14]

Tarsis (La Bella) también es una ciudad del imaginario mundo de la Dragonlance. Hace su aparición en el segundo libro de las crónicas de la Dragonlance, a saber: La Tumba de Huma. Ciudad a la que viajan los héroes de la Dragonlance para conocer el estado de la guerra en el mundo de Krynn y alguna información del destino de las huestes de Takhisis, reina de la oscuridad.

Una inscripción del emperador asirio Esar-hadón (del siglo VII a. C.) hace alarde de sus victorias sobre Tiro y Egipto, y afirma que le pagaron tributo todos los reyes de las islas desde Chipre “hasta Tarsisi”. (Ancient Near Eastern Texts, edición de J. B. Pritchard, 1974, pág. 290.) Como Chipre está en la parte oriental del Mediterráneo, puede deducirse de esta referencia que Tarsis se encontraba en la parte occidental de dicho mar, por lo que algunos eruditos la identifican con la isla de Cerdeña.

Posible identificación con España. La mayor parte de los eruditos relacionan Tarsis con España, basándose en referencias antiguas a un lugar o región de España que los escritores griegos y romanos llamaban Tartesos. Aunque el geógrafo griego Estrabón (del siglo I a. C.) emplazaba una ciudad llamada Tartesos en la región del río Guadalquivir, en Andalucía (Geografía, 3, II, 11), parece ser que Tartesos se aplica de manera general a toda la parte meridional de la península ibérica. Numerosas obras de consulta dan por sentado que los fenicios colonizaron las costas españolas, y se refieren a Tartesos como una de sus colonias. Sin embargo, no parece haber suficiente prueba que respalde esta teoría. Por ello, la Encyclopædia Britannica (1959, vol. 21, pág. 114) dice: “Ni fenicios ni cartagineses dejaron en esa tierra una huella permanente. Sin embargo, los griegos ejercieron en ella una profunda influencia. Las naves de Tiro y Sidón quizás hayan comerciado más allá del estrecho y en Cádiz por lo menos en época tan temprana como el siglo IX a. de J.C.; sin embargo, la arqueología moderna, que ha hallado y excavado ciudades griegas, íberas y romanas, no ha sacado a la luz un solo asentamiento fenicio, ni se han hallado restos fenicios más importantes que algunas baratijas, joyas y otros artículos de trueque. Se desprende, por lo tanto, que, con la posible excepción de Cádiz, los fenicios no construyeron ciudades, sino simples puestos en los que comerciar y donde sus naves pudieran hacer escala”. La historia también muestra que cuando los fenicios y los griegos empezaron a comerciar en España, el lugar ya estaba poblado y los nativos llevaban la plata, el hierro, el estaño y el plomo que iban buscando los comerciantes. Por consiguiente, parece haber buena razón para creer que los descendientes de Javán (los jonios) por la línea de Tarsis llegaron hasta la península ibérica, donde constituyeron el grupo étnico más destacado. Esta posible ubicación de Tarsis también armoniza satisfactoriamente con las demás referencias bíblicas a este lugar. (Enciclopedia "Perspicacia para comprender las Escrituras" Volumen II, págs. 1087 y 1088)

Tarsis: Ángel de 3 a 3,5 metros de altura de apariencia noble y reluciente, ojos azules y luminosos, su avanzada edad modela su aspecto donde su sabiduría es propia de su aspecto, pero sigue los quehaceres de Irenko. Irenko es un ángel que acomete y encarga obras a hombres elegidos. Estas obras y razones, cuyo conocimiento está estrictamente prohibido a la conciencia humana, son cargadas en el inconsciente de hombres, quienes obrarán por instinto y fuerza interna para el bien de la humanidad y el planeta Tierra. El origen de Tarsis y otros ángeles sería el espíritu de seres gigantes de carne y hueso que existieron hace muchos miles de años atrás y que se mencionan en el sexto capítulo del libro del Génesis.[15]

Existe un grupo de música psytrance llamado Tarsis.[16]

Bibliografía adicional editar

  • J. D. Muhly, copper, tin, silver and iron: the search for metallic ores as an incentive for foreign expansion. In: Gitin et al. (eds.), Mediterranean Peoples in Transition: 13th to early 10th centuries BC. In Honor of Professor Trude Dothan. Jerusalem: Israel Exploration Society, 314-329.
  • Hertz J.H. (1936) The Pentateuch and Haftoras. Deuteronomy. Oxford University Press, London.

Referencias editar

  1. 1 Reyes
  2. "Tarshish" in the Jewish Encyclopedia, por Isidore Singer y M. Seligsohn.
  3. Jonás
  4. Cecil Torr (1895). Cambridge University Press, ed. Ancient Ships. pp. 1-3. Consultado el 18 de febrero de 2010. 
  5. http://scriptures.lds.org/en/bd/p/14
  6. Crónicas 7-10
  7. Ezequiel
  8. Procedures of the Society for Biblical Archaeology, xvi. 104 et seq., Le Page Renouf
  9. Orientalische Litteraturzeitung, iii. 151, Cheyne
  10. Genesis
  11. Genesis
  12. Ester
  13. Magdalena Nom de Déu, José Ramón (2009). Libro de viajes de Benjamín de Tudela. Zaragoza: Riopiedras. p. 70. ISBN 978-84-7213-180-4. 
  14. MELVILLE, Herman (2004). «Capítulo 9, "El Sermón"». Moby Dick o La Ballena Blanca. México: Editorial Porrúa. p. 426. ISBN 970-07-4971-1. 
  15. J. CLAUDIO PASTEN TORO. «Irenko y la ciudad de cristal». 
  16. «Tarsis Discography at Discogs».