La puente de Mantible

comedia caballeresca

La puente de Mantible es una comedia caballeresca escrita por el dramaturgo español Pedro Calderón de la Barca. Fue estrenada en 1630 y posteriormente publicada en 1636. Se la atribuyó erróneamente a Lope de Vega, y es quizá la más descuidada por los lectores y la crítica. Para Márquez Villanueva es “tal vez la peor de sus comedias”.[1]​ Se considera una obra menor, aunque sin carecer de interés, pues se aborda la literatura caballeresca desde una perspectiva diferente, distanciándose el autor de este género ya agotado en su época.

Calderón utiliza como elementos de la obra varios cantares de gesta del ciclo carolingio y otros relatos de caballería que tratan sobre la lucha entre francos y sarracenos, pero se centra principalmente en un enredo amoroso. Específicamente, narra las hazañas del rey y los doce pares de Francia contra Fierabrás y Balaán y se centra en lugares específicos como la puente de Mantible, la torre de Fierabras y los campamentos de los contrincantes moros y cristianos.

Como en toda comedia, Calderón crea a un gracioso, ahora llamado Guarin. Se relatan las hazañas de Guido de Borgoña, caballero ideal, pero galán de Floripes. La acción amorosa comienza cuando Guido y Oliveros se internan en el campamento moro durante la celebración del cumpleaños de Floripes. Poco después Fierabrás, hermano de Floripes, aparece en el campamento de Carlomagno para retar a Guido para recuperar una banda de Floripes que se había llevado Guido. Pero éste no puede responder ya que ha sido encarcelado por su aventura. Al final del primer acto, la armada francesa es derrotada y Fierabrás hace prisionero a Guido. Guido es muy mal visto por Fierabrás ya que, Fierabrás tiene desesos incestuosos, diciéndole a su hermana: “tu hermano y tu amante soy”. Así, el feroz antagonista acentúa “su carácter monstruoso mediante la adición de un grave pecado a su ya larga nómina de vicios”.[2]​ Tras múltiples acciones, Floripes se comporta con valor y astucia, salvando a Guido. Sus deseos para atener amor y paz se representan a través de dos de sus damas Irene y Astrea, o sea paz y armonía: “Irene... es la hermana de Astrea y representa la paz. El amor de un cristiano, en fin, ha sido lo que ha disipado la union que pudiera existir todavía entre Floripes y su hermano”.[3]​ La magia negra de Fierabrás, simbolizada por la torre, se contrapone a las artes curativas de Floripes. En la tercera jornada, las fuerzas cristianas derrotan a las paganas, a pesar de que tienen de enemigos a dos gigantes y la obra finaliza con el matrimonio entre Guido y Floripes.

Referencias editar

  1. Francisco Marquez Villanueva, «El sondable misterio de Nicolás de Piamonte (Problemas del Fierabrás español)», en Relaciones de literatura medieval, Sevilla, Universidad de Sevilla, 1977, p.105
  2. Adrian J. Sáez, "Un Calderón de leyenda Otra vuelta a La puente de Mantible y la Historia de Carlomagno," Anuario Calderoniano 8 (2015) p. 368
  3. Frederick A. de Armas, El retorno de Astrea: Astrología, Mito e Imperio en Calderón. Biblioteca Áurea Hispánica 108. Navarra/Madrid/Frankfurt: Iberoamericana, 2016, p.149

La puente de Mantible de Calderón y la historia del emperador Carlo Magno: comedia caballeresca y libros de caballerías. Renata Londero, Università di Génova.