Reactivo de Neßler

El reactivo de Neßler es un reactivo químico usado para detectar pequeñas cantidades de amoníaco (azano, H3N) o catión amonio (H4N+). Debe su nombre a su descubridor, el químico alemán Julius Neßler que lo publicó en su tesis doctoral de 1856.

Consiste en una solución 0,09 M de tetrayodomercuriato (II) de potasio (K2[HgI4]) en una solución 2,5 M de hidróxido de potasio (KOH). En presencia de amoníaco o catión amonio, toma coloración amarilla-naranja y en grandes concentraciones se forma un precipitado color naranja.

Preparación editar

Una forma de preparar el reactivo es disolver 10g de yoduro de potasio (KI) por cada 10ml de agua, agregando una solución saturada (60g/L) de cloruro mercúrico (HgCl2) en pequeñas proporciones y agitando, hasta formación permanente de un leve precipitado. Luego se agregan 80 ml de solución de hidróxido de potasio (KOH) y se diluye a 200 ml. Se deja en reposo durante la noche y se decanta el líquido claro.

Otro método para prepararlo es disolver 23 g de yoduro mercúrico y 16 g de yoduro de potasio en agua y se lleva a 100 ml. Se agrega 100 ml de hidróxido de sodio 6 N. Se deja en reposo durante 24 horas y se decanta la solución para separar cualquier precipitado que se hubiere formado.

La reacción de formación del reactivo de Neßler es la siguiente:

2 KI + HgI2 = K2[HgI4]

Reacción editar

La técnica de reacción a la gota es la siguiente: se mezcla sobre un vidrio de reloj una gota de la solución en análisis con una gota de solución concentrada de hidróxido de sodio. Se lleva una microgota de la solución o suspensión resultante a un papel para reacciones a la gota y se agrega una gota de reactivo de Neßler y se observa una mancha o anillo amarillo o anaranjado rojizo. La sensibilidad de esta reacción es de 0,3 μg de H3N.[1]

La reacción del reactivo con amoníaco es:

2 K2[HgI4] + 3 KOH + H3N = HgI (H2N) . HgO + 7 KI + 2 H2O

Con catión amonio, la ecuación iónica sería:

2 [HgI4]2- + 4 OH- + H4N+ = HgI (H2N) . HgO + 7 I- + 3 H2O

Toxicidad editar

El reactivo es tóxico, tanto si es inhalado, tragado o absorbido por la piel. Esto se debe a que contiene mercurio. Presenta peligro neurológico y puede actuar como carcinógeno y ser un riesgo para la reproducción. Es corrosivo y causa quemaduras.

Referencias editar

  1. Vogel, Arthur (1953). Química analítica cualitativa. Buenos Aires: Kapelusz. 

Véase también editar