La terapia neural es una forma de medicina alternativa en la cual un anestésico local se inyecta en zonas del cuerpo específicas. No hay evidencia científica de que funcione y su uso puede conllevar algunos riesgos. En estudios clínicos no se ha encontrado evidencia de que reporte beneficios.[1][2]

Descripción e historia editar

Hay muy escasa evidencia científica que avale su efectividad, y la que existe se ha publicado principalmente en revistas de medicina alternativa de poco impacto.[3][4]

Según Quackwatch, la terapia neural es "una enfoque estrafalario que pretende tratar el dolor y la enfermedad inyectando anestésicos locales en nervios, cicatrices, glándulas y otros tejidos".[5]

La idea que subyace la terapia es que "campos de interferencia" (Störfelder) en ciertos lugares del cuerpo son responsables por un tipo de energía eléctrica que causa enfermedades.[2]​ Estos campos pueden ser alterados por la inyección, permitiendo curarse al cuerpo.[6]

La práctica se originó en 1925, cuando Ferdinand Huneke, un cirujano alemán, usó una nueva droga (procaína, un anestésico local) para tratar una migraña severa en su hermana. En lugar de usarla intramusculármente, como se recomendaba, la inyectó intravenosamente y el ataque de migraña paró inmediatamente. Huneke y su hermano ampliaron posteriormente la práctica usando novocaína.[7]

Acogida, efectividad y seguridad editar

La terapia neural se practica sobre todo en Sudamérica y Europa.[8]

Según la Sociedad Americana contra el Cáncer, "la evidencia científica no apoya las afirmaciones de que la terapia neural sea efectiva en el tratamiento del cáncer o cualquier otra enfermedad".[9]​ En general, los riesgos del tratamiento, tales como daños a los órganos causados por la aguja, sobrepasan cualquier beneficio que pudiera tener.[2]


Referencias editar

  1. Cassileth, Barrie R. (2011). The complete guide to complementary therapies in cancer care : essential information for patients, survivors, and health professionals. New Jersey: World Scientific. pp. 259-261. ISBN 978-9814335164. 
  2. a b c Ernst, E, ed. (2007). «Neural Therapy». Complementary Therapies for Pain Management: An Evidence-based Approach (Elsevier). p. 149. ISBN 978-0-7234-3400-9. 
  3. Gibson, R. G.; Gibson, S. L. (December 1999). «Neural therapy in the treatment of multiple sclerosis». Journal of Alternative and Complementary Medicine (New York, N.Y.) 5 (6): 543-552. ISSN 1075-5535. PMID 10630348. doi:10.1089/acm.1999.5.543. Consultado el 8 de agosto de 2017. 
  4. [1]
  5. Barrett, S (28 de diciembre de 2012). «Stay Away from "Holistic" and "Biological" Dentists». Quackwatch. Consultado el 4 de enero de 2014. 
  6. Mantle, F; Tiran, D (2009). «Neural Therapy». A-Z of Complementary and Alternative Medicine: A guide for health professionals (Churchill Livingstone). p. 167. ISBN 978-0-7020-4999-6. 
  7. Diamond, WJ (2000). The Clinical Practice of Complementary, Alternative, and Western Medicine. CRC Press. p. 229. ISBN 978-1-4200-4021-0. 
  8. [2]
  9. «Neural therapy». American Cancer Society. 1 de noviembre de 2008. Archivado desde el original el 6 de febrero de 2012.