Valle de Tempe

valle en Thessalia, Grecia

Tempe (griego moderno:Τεμπη = Tempí) es un valle de Grecia situado en la región de Tesalia, unos 35 kilómetros al noreste de Larisa. Se encuentra entre los montes Olimpo —al norte— y Osa —al sur— enmarcado en un desfiladero por donde discurre la cuenca inferior del río Peneo.[1]​ La denominación de Tempe tradicionalmente designa la sección inferior del valle, de unos 10 km[2]​ en donde el Peneo antiguamente formaba una laguna y en la actualidad forma un pequeño delta antes de desembocar en el golfo Termaico del mar Egeo.

Entre las principales localidades del valle destacan Gonni y Omolio.

El pequeño valle aún mantiene su notable atractivo paisajístico, al que se añade un importante centro religioso: la iglesia de Agia Paraskevi, situada al lado de una pequeña cueva y próxima a dos manantiales, a la cual acuden muchos peregrinos principalmente en la fecha del 26 de julio.[3]

En la actualidad el Tempe es cruzado por la ruta nacional griega N.º 1 (=Eurorruta 75)[4]​ y -mediante un importante túnel construido en el año 2004- por la línea de ferrocarril que comunica a Salónica con Atenas.

Modernamente se le llama Licóstomo.[5]

Historia y mitología editar

Durante la segunda guerra médica (480 a. C.), los griegos defendieron el paso de Tempe, pero al enterarse de la existencia de otro paso montañoso hacia Tesalia, se retiraron a las Termópilas.[6]

El valle del Tempe era el principal paso entre Macedonia y la Grecia meridional razón por la cual el rey Perseo lo hizo guarnecer con fortificaciones en el 171 a. C.[7]​ Así, estaba defendido en cuatro lugares: en Gonos, en Cóndilo, en Carax y en la zona más estrecha del valle.[8]

Míticamente, la génesis u orografía del valle del Tempe era atribuida por los antiguos griegos a un movimiento sísmico provocado por Poseidón.[9]

Sin embargo dada su especial fertilidad el valle estaba consagrado al dios Apolo y a las musas, motivo por el cual los habitantes de Delfos recogían en éste los laureles —considerados sagrados— para realizar las «laureas» o coronas que se daban a los triunfadores en los Juegos Píticos.[10]​ Por otra parte, la mitología griega, además de considerar que Apolo fue a Tempe para perseguir a Pitón o para purificarse por la muerte de la serpiente,[11]​ ubicaba en Tempe el mito de Aristeo y Eurídice.[12]

El lugar aparece descrito en las obras de Teopompo, Eliano y en la Historia natural de Plinio el Viejo, y su belleza fue celebrada por Virgilio en sus Églogas, y, sobre todo, en sus Geórgicas.[13]

Evocando a Virgilio, los escritores románticos y neoclásicos de los siglos siglo XVIII y XIX utilizaron la palabra «tempe», de forma retórica, como sinónimo de lugar bucólico, feraz y ameno.

Otros lugares con el mismo nombre editar

Referencias editar

  1. Estrabón IX,5,2.
  2. Estrabón, Geografía: libros VIII-X, p.345, nota 569 de Juan José Torres Esbarranch, Madrid: Gredos (2001), ISBN 84-249-2298-0.
  3. «Agia Paraskevi – Tempe: La consagración milagrosa y la gran celebración de la Ortodoxia», artículo en diaforetiko.gr (en griego)
  4. «Los túneles en el valle del Tempe», artículo en es.euronews.com
  5. «Tesauro. Historia antigua y mitología». Consultado el 13 de febrero de 2023. 
  6. Heródoto VII,172-175.
  7. Tito Livio XLII,54; XLII,67.
  8. Tito Livio XLIV,6.
  9. Heródoto VII,129.
  10. Claudio Eliano, Historias curiosas III,1.
  11. Plutarco, Cuestiones griegas 293 C.
  12. Virgilio, Geórgicas IV,317.
  13. Curtius, Ernst Robert (1955). Literatura europea y Edad Media latina. Vol. I. Fondo de Cultura Económica. p. 284-5. 
  14. Ovidio, Fastos IV,477.
  15. Cicerón, Cartas a Ático IV,15.
  16. Marcos Sastre, El Tempe argentino