Argimundo fue un noble hispano visigodo, líder de una conjura frustrada contra el rey Recaredo en el año 590.

La única fuente original que lo menciona es la crónica de Juan de Biclaro, que finaliza con este episodio.[1]​ Según esta, Argimundo era duque de una provincia en Hispania y cubiculario (camarista) del rey; en el año 590 encabezó una rebelión encaminada a derrocar y asesinar a Recaredo, pero la conspiración fue descubierta antes de llevarse a cabo; sus cómplices fueron ejecutados, y Argimundo fue flagelado, decalvado,[2]​ y tras amputarle la mano derecha,[3]​ paseado a lomos de burro por las calles de Toledo como escarnio público.

A partir del escueto relato del Biclarense, autores modernos hicieron conjeturas sobre los detalles omitidos por la crónica: algunos sugirieron que Argimundo pudiera ser gobernador de la provincia Cartaginense,[4]​ de la Carpetania[5]​ o de Provenza;[6]​ otros dicen que posteriormente fue decapitado[7]​ o degollado.[8]​ Tampoco está claro si su objetivo era implantar nuevamente el arrianismo,[9]​ que había sido prohibido en el reino por el concilio de Toledo del año anterior, o si la conspiración era fruto de la propia ambición de Argimundo.[10]

Referencias editar

  1. Juan de Biclaro: Chronicon.
  2. Según Florián de Ocampo: Coronica general de España, libro XII, pp. 28-29, ésta fue la primera vez que los godos practicaron la decalvación como castigo, haciendo al reo "una calva fea y vergonzosa".
  3. La amputación de la mano derecha era el castigo habitual en Bizancio para los delitos de lesa majestad (Luis Agustín García Moreno: Prosopografía del reino visigodo de Toledo, pp. 34-35).
  4. Roger Collins: La España visigoda, pp. 66-67.
  5. Antonio Alcalá Galiano: Historia de España, vol. I, p. 101.
  6. Juan Sempere y Guarinos: Historia del derecho español, vol. I, p. 72.
  7. Juan de Mariana: Historia general de España, pp. 369-370.
  8. Pascual Ramón Gutiérrez de la Hacera: Chronologia exacta de los Papas, emperadores, soberanos, y gefes en las republicas de Europa, tomo II, p. 73.
  9. Bernardo de Brito: Monarchia lusytana, libro VI, p. 214.
  10. José Orlandis: Historia del reino visigodo español, p. 86.