Autorreforma sindical

Se denomina autoreforma sindical al conjunto de procesos de renovación y cambio en el movimiento sindical, con el objetivo de adecuar las estructuras organizativas, funciones y discursos a los nuevos escenarios económicos y sociales.

Definiciones editar

La Confederación Sindical de Trabajadores y Trabajadoras de las Américas (CSA) define la autoreforma sindical como:

"El proceso de Autoreforma pretende generar una mayor fortaleza organizacional, representación y representatividad, legitimidad e influencia a todos los niveles donde se definen y deciden aspectos que involucran derechos y condiciones de trabajo, empleo y vida, particularmente en los ámbitos de la contratación colectiva de los trabajadores y trabajadoras de cualquier condición y relación laboral. El proceso de Autoreforma considera el contexto de cada realidad y las decisiones autónomas de cada organización sindical."[1]

En sentido estricto, la autoreforma sindical es un proceso de cambio institucional que comprende tres ámbitos específicos de la estructura sindical:

  1. Los mecanismos de afiliación.
  2. Los mecanismos de gestión interna.
  3. Los procedimientos de representación y defensa de intereses.

Causas de la autoreforma sindical editar

Los cambios en la organización del trabajo a partir del colapso del modelo fordista, originados en el impacto de las nuevas tecnologías han significado la definición de un nuevo mapa social de los trabajadores. El perfil del trabajador fordista esta en retroceso. En la actualidad no existe un único ejército industrial sino una clase obrera subdividida en múltiples capas y estamentos según especializaciones, ingresos, patrones de consumo y marcos legales. Muchas veces los intereses de un sector se confrontan con los de otro grupo de trabajadores, en un mismo país o fuera de sus fronteras.

En este escenario, las relaciones laborales, diseñadas en el marco de la guerra fría y el Estado Benefactor se ha visto claramente alterado. La desregulación laboral y el consecuente debilitamiento del Estado como árbitro del conflicto social ha significado que un porcentaje cada vez mayor de trabajadores se encuentre en una situación de precariedad y desprotección jurídica. Las nuevas modalidades de contratación utilizando intermediarios debilitan el vínculo contractual y ocultan la responsabilidad del empleador en las condiciones de trabajo.

El cambio en la estructura del aparato productivo y el modelo de relaciones laborales ha permitido y alentado el crecimiento del número de trabajadores fuera del ámbito de protección sindical. Se ha configurado así un nuevo escenario que descoloca el tradicional rol de los sindicatos en la vida social.

De esta manera, la estructura sindical tradicional deviene en obsoleta. Las tasas de sindicalización descienden continuamente y son especialmente bajas entre grupos sociales importantes como mujeres y jóvenes. Esto implica un cambio en la representación y representatividad del sindicalismo en la sociedad.

El movimiento sindical reconoce a partir de los años 90 el impacto de estos cambios y se inicia una discusión alrededor de las alternativas necesarias para recolocar al sindicato en la sociedad.

Es a partir del año 2000 que la idea de una autoreforma sindical va tomando cuerpo en las organizaciones de trabajadores.

Una de las regiones donde estos procesos van a iniciarse es América latina. En el año 2003, la Confederación General de Trabajadores del Perú forma una "Comisión Sindical Nacional de Reestructuración Organizativa" cuyo objetivo era diseñar una nueva estructura sindical que responda a los cambios económicos y sociales que había enfrentado el Perú en los años 1990.[2]​ Procesos similares se van a registrar en la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia, la Central de Trabajadores de Argentina, Central Única de Trabajadores de Brasil entre otras confederaciones sindicales.

Contenidos de la autoreforma sindical editar

Si bien, no existe aún una sistematización consensuada de los contenidos del proceso de autorefoma sindical, se reconoce que los principales ejes de trabajo son los siguientes:

  • Unidad y coordinación sindical
  • Estructuras
  • Representación
  • Negociación

Unidad y coordinación sindical editar

para superar los problemas de dispersión del movimiento sindical se propone articular y centralizar la acción gremial. Se trata de enlazar los espacios locales, nacionales, subregionales y continentales alrededor tanto de acciones concretas como temas programáticos. También implica la articulación de las diversas iniciativas gremiales en diferentes ámbitos como lo estrictamente laboral, lo político, lo social, lo comunicativo.

Se expresa mediante la formación de "alianzas" y "coordinadoras"

Estructuras editar

Comprende la relación entre las estructuras sectoriales o de rama de actividad económica (minería, comercio, manufacturas, textiles, etc) con las estructuras territoriales (provinciales, regionales o nacionales). Lo nuevo aquí son las articulaciones de sectores nuevos en el sindicalismo como son las mujeres trabajadoras, los jóvenes trabajadores, los migrantes trabajadores.

Comprende también a las estructuras transnacionales como los "comité de empresa trasnacional" que reúnen a los sindicatos de diferentes países pertenecientes a una misma empresa transnacional.

Representación editar

En este ámbito se busca incrementar la representación del sindicato con los sujetos no tradicionales como son los que laboran por cuenta propia o autónomos; los que desarrollan sus labores en formas desvirtuadas de tercerización y los que no son reconocidos como trabajadores por las normas legales o los empresarios.

Negociación editar

Es un eje fundamental en la media que alude al objetivo principal de la acción sindical. En este ámbito se trata de recuperar y ampliar el rol de la negociación colectiva en las relaciones laborales. La autoreforma sindical busca incrementar la participación de los trabajadores en la elaboración de sus intereses y demandas. Hacer visibles las demandas particulares de jóvenes y mujeres. Brindar un mayor sustento técnico a dichas demandas, así como establecer mecanismos de negociación por rama o sectoriales, alcanzando acuerdos marco a nivel de grandes sectores económicos o nacionales.

Asimismo, se trata de representar al conjunto de trabajadores, familia y comunidad más allá de su membresía sindical, al proceso de negociación colectiva en la medida que el impacto de dicha negociación o de su ausencia compromete a la sociedad en su conjunto.[3]


Referencias editar

  1. Tomado de "Prioridades y estrategias 2010". Documento elaborado por el Grupo de Trabajo en Autoreforma Sindical de la CSA.
  2. Una recopilación del proceso de autorefoma sindical en el Perú se encuentra en la sección de Autoreforma Sindical del blog «Bajada a Bases». 
  3. Los ejes de trabajo del proceso de autoreforma sindical se han propuesto, discutido y consensuado partir de la labor del «Grupo de Trabajo en Autoreforma Sindical». Archivado desde el original el 27 de marzo de 2010.  formado en la CSA con apoyo de la OIT.

Bibliografía editar