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La ''socialdemocracia'' surgió a finales del siglo XIX a partir del movimiento [[Socialismo|socialista]], como una propuesta alternativa, pacífica y más moderada, a la forma [[revolución|revolucionaria]] de toma del poder y de imposición de una [[dictadura del proletariado]], que sostenía una parte del movimiento [[socialismo|socialista]], dando origen a un debate alrededor de los términos de "reforma" y "revolución".<ref name="FUSDA" />
 
En general se ha presentado como ejemplo real de socialdemocracia al sistema de gobierno que predomina en los países [[Escandinavia|escandinavos]], sobre todo en [[SuerticuloSuecia]].<ref>{{cita web |url= http://www.liberalismo.org/articulo/387/74/modelos/suecos/ |urltrad= |título= Modelos suecos |fechaacceso=20 de abril de 2009 |añoacceso= |autor= |apellido= Norberg|nombre= Johan |enlaceautor= |coautores= |fecha= 6 de junio de 2006|año= |mes= |formato= |obra= Socialdemocracia |editor= |editorial= Sitio oficial de Liberalismo.org|ubicación= |página= |páginas= |idioma= |doi= |urlarchivo= |fechaarchivo= |cita= }}</ref>
 
=== La democracia como sistema de relaciones horizontales ===
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# Un mayor nivel de desarrollo favorece un mayor grado de especialización ocupacional, esto produce primero el favorecimiento del [[sector secundario]] frente al [[sector primario|primario]] y del [[sector terciario|terciario]] respecto al secundario.
 
Un importante economista, [[Amartya Sen]], ha señalado que ninguna democracia ha sufrido nunca una gran hambruna, incluidas democracias que no han sido muy prósperas históricamente, como [[India]], que tuvo su última gran hambruna en 1943 (y que algunos relacionan con los efectos de la [[Primera Guerra Mundial]]), y que sin embargo tuvo muchas otras en el siglo XIX, todas bajo la dominación británica.{{cita requerida}}
 
=== Democracia económica ===
El término democracia económica se utiliza en economía y sociología para designar a aquellas organizaciones o estructuras productivas cuya estructura decisional se basa en el voto unitario (una persona = un voto, o regla democrática), contrariamente a lo que se produce empresas privadas típicas de carácter capitalista, donde impera el voto plural ponderado por la participación en el capital (una acción = un voto).
El ejemplo típico de empresa democrática es la [[cooperativa]], uno de cuyos [[:s:Principios cooperativos|Principios cooperativos]] es precisamente el principio democrático de decisión.
 
== Argumentos a favor y en contra de la democracia ==
=== Funciones fundamentales de un Estado ===
[[Archivo:Polity data series map 2003.png|thumb|350px|Este es un intento de medición de la democracia llamada "''Polity IV data series''". Este mapa muestra los datos presentados en el informe de ''Polity IV data series'' en 2003. Los países más claros tienen una puntuación perfecta de 10, mientras que los países más oscuros (Arabia Saudita y Qatar) son considerados los países menos democráticos, de puntuación -10.]]
Para BID, la democracia es un requisito esencial para que el Estado pueda:
* Establizar la economía con altos niveles de crecimiento económico y empleo , y haber una inflación moderada.
* Mitigar los equilibrios verticales y horizontes.
* Ser eficientes en la asignación de recursos y suministro de servicios.
* Controlar las acciones depredadoras de los sectores públicos y privados mediante la preservación del orden público, el control abusos y arbitrariedades, y la prevención de la corrupción. Estas funciones son vitales para fomentar un crecimiento sostenible y reducir la pobreza.
 
=== Desvirtuaciones ===
La [[democracia]] es una [[forma de gobierno]] en el que la [[toma de decisiones]] queda [[legitimidad|legitimada]] por una base [[racional]].<ref name="Ig">Ignacio Molina, profesor de [[Ciencia Política]] de la [[Universidad Autónoma de Madrid]], "''Conceptos Fundamentales de Ciencia Política''", Alianza Editorial ISBN 84-206-8653-0.</ref> Una crítica común es la debilidad que muestra ante [[poder|influencias desequilibradas en la toma de decisiones]] (conocidas como ''"democracias autoritarias"'', ya que autoridad es el poder legitimado) enmascaradas bajo esta legitimación, generando otras estructuras tales como:<ref> Jeffrey Pfeffer, ''El papel del poder en la toma de decisiones''.</ref>
* [[Plutocracia]]: en esta existe [[poder|influencias desiquilibradas en la toma de decisiones]] a favor de los que ostentan las fuentes de riqueza. Por ejemplo mediante una inadecuada financiación de campañas y partidos políticos.
* [[Partitocracia]]: por ejemplo a causa de un mal conducido [[sistema parlamentario]], en vez de uno [[sistema presidencial|presidencial]] o [[sistema semipresidencial|semipresidencial]] o mediante la influencia de los [[partidos políticos]] en un representante elegido por la ciudadanía.
* [[Oclocracia]]: por ejemplo por la existencia de una ignorancia popular o de una poderosa [[demagogia|acción demagógica]]. Para evitar esto algunos autores consideran que debe de tratarse dentro del concepto de [[separación de poderes]] un [[cuarto poder]], los [[medios de comunicación]].
 
=== Ignorancia de la ciudadanía ===
Una de las críticas más comunes a la democracia es la que alega una supuesta ignorancia de la [[ciudadano|ciudadanía]] acerca de los aspectos políticos, económicos y sociales fundamentales en una sociedad, que la inhabilita para elegir entre las diversas propuestas. Este sistema fue denominado por [[Polibio]] como [[oclocracia]].<ref>Polibio,''Historias'', I, 11</ref> Esta ignorancia haría que las decisiones tomadas por la gente fueran erróneas en la mayoría de los casos, al no estar basadas en conocimientos técnicos. Sin embargo, los defensores de la democracia argumentan que la ciudadanía no es ignorante, y achacan ese tipo de críticas al interés que tienen las clases poderosas de anteponer el [[autoritarismo]] y la [[tecnocracia]] a los intereses de la gente.
 
Este argumento suele ser esgrimido también por la clase política para descalificar los resultados de [[Referéndum|referendos]] y elecciones legítimas y también en contextos en los que se plantean reformas en busca de una profundización hacia formas de democracia más [[democracia participativa|participativas]] o [[democracia directa|directas]] que la [[democracia representativa]]. Por otro lado la clase política puede ser quien promueva la ignorancia de la ciudadanía para lograr objetivos personales. Para evitar esa circunstancia existen leyes que obligan a dedicar parte del patrimonio gubernamental a proporcionar información a la población mediante los [[Boletín Oficial del Estado|boletines oficiales]] sobre las nuevas leyes o mediante la publicación de las [[sentencia]]s sobre decisiones judiciales, o mediante campañas a la población antes de celebrarse un referéndum, etc.
 
En cualquier caso, en todas las sociedades en las que es posible el debate público, se asume que la democracia es el menos malo de los sistemas políticos, pues conlleva siempre una cierta aceptación del gobierno por parte del pueblo al haber sido elegido por éste. Desde los principios democráticos se considera que ''todo pueblo tiene derecho a equivocarse'' y que siempre es mejor cuando el error es asumido como propio por la sociedad que no cuando éste es culpa de unas pocas personas expertas, que podrían a pesar de todo equivocarse, o incluso actuar según intereses políticos ajenos a la mayoría de ciudadanos.
 
Puede argumentarse también que la ignorancia se traduce en las elecciones en [[abstención]], por lo que es poco probable que tenga un peso real en la toma de decisiones (esto no es cierto en los países en que todos sus ciudadanos están obligados a votar, aquí la ignorancia sí desempeña un papel más importante). Pero varias tendencias de izquierda suelen pregonar por el abstencionismo electoral, ya que ven al sufragio como una "mentira" para el pueblo.
 
Aunque a efectos de cuantificar el grado de ignorancia popular a través de la abstención, se considera que la abstención recoge tanto los votos de quienes se dicen desconocedores de temas políticos (apolíticos) como de aquellos a quienes no les satisface el sistema en sí o ninguno de los candidatos o partidos que se presentan, por lo que muchas veces es difícil discernir la ''abstención por ignorancia'' y la ''abstención de protesta''.
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Los defensores de la democracia exponen una serie de argumentos como defensa a todo esto. Uno de ellos es que la presencia de una [[constitución]] actúa de salvaguarda ante una posible tiranía de la mayoría. Generalmente, los cambios en estas constituciones requieren el acuerdo de una [[mayoría cualificada]] de representantes, o que el poder judicial avale dichos cambios, o incluso algunas veces un [[referéndum]], o una combinación de estas medidas. También la [[separación de poderes]] en [[poder legislativo]], [[poder ejecutivo]] y [[poder judicial]] hace más difícil que una mayoría poco unánime imponga su voluntad. Con todo esto, una mayoría todavía podría discriminar a una minoría, pero dicha minoría ya sería muy pequeña (aunque no por ello dicha discriminación deja de ser éticamente cuestionable).
 
Otro argumento es que una persona suele estar de acuerdo con la mayoría en algunos asuntos y en desacuerdo en otros. Y también las posturas de una persona pueden cambiar. Por tanto, los miembros de una mayoría pueden limitar la opresión hacia una minoría ya que ellos mismos en el futuro pueden ser parte de una minoría oprimida.
 
También hay quienes afirman que la democracia debe tratar asuntos objetivos, ya que esta clase de “opresión” es subjetiva pues está sujeta al sentir o pensar de unos cuantos y que por lo general no pasan de la trivialidad.
 
Un último argumento común es que, a pesar de los riesgos comentados, la regla de la mayoría es preferible a otros sistemas, y en cualquier caso la "tiranía de la mayoría" es una mejora sobre la "tiranía de una minoría". Los defensores de la democracia argumentan que la estadística empírica evidencia claramente que cuanto mayor es la democracia menor es el nivel de violencia interna. Esto ha sido formulado como "ley de Rummel", la cual sostiene que a menor nivel de democracia hay más probabilidades de que los gobernantes asesinen a sus propios ciudadanos.

=== Hitler y la democracia ===

Una crítica generalizada hacia la democracia, derivada a su vez de un equívoco histórico igualmente difundido, es la afirmación de que la democracia impulsó el ascenso de [[Adolf Hitler]] al poder al ser elegido democráticamente como presidente de la [[República de Weimar]] en [[1933]].
 
Los hechos históricos son que en [[1932]] Hitler perdió las elecciones presidenciales frente a [[Paul von Hindenburg]], quien obtuvo un 53% frente al 36% de aquel. En las elecciones parlamentarias de julio del mismo año, el Partido [[Nazi]] de Hitler alcanza 230 escaños que lo volvieron el más numeroso. En ese momento el presidente Hindenburg le ofrece a Hitler la vicecancillería, pero este la rechaza; sin embargo los nazis concretan una alianza con las fuerzas de centro en el gobierno, de resultas de la cual, [[Hermann Goering]], uno de los principales colaboradores de Hitler fue elegido presidente del parlamento (Reichstag). En noviembre de 1932 hubo nuevas elecciones parlamentarias en las que el Partido Nazi perdió dos millones de votos y el bloque se redujo a 196 escaños. La crisis electoral de la alianza de centro y derecha llevó a la renuncia del canciller [[Franz von Papen]]. Hindenburg piensa entonces en ofrecerle la cancillería a Hitler, pero ante la oposición del ejército nombra canciller al general [[Kurt von Schleicher]]. Este logra debilitar más aún a Hitler quien sufre una nueva derrota electoral en las elecciones regionales de [[Turingia]]. En esa situación las bancadas socialistas y comunistas quitan su apoyo a Schleicher, lo que lo obliga a renunciar en enero de [[1933]]. Hindenburg nuevamente oscila entre von Papen y Hitler, decidiéndose por el primero. Pero no llega a asumir porque las SA ([[Sturmabteilung]]), la fuerza paramilitar del nazismo que dirigía [[Ernst Röhm]], toman el control militar de [[Berlín]]. En esas condiciones Hindenburg nombró canciller a Hitler el 30 de enero de [[1933]]. Hitler entonces disolvió el Parlamento y llamó elecciones para el 5 de marzo. En el interín, se produjo el [[incendio del Reichstag]], lo cual aprovechó Hitler para anular las garantías constitucionales, impuso la pena de muerte para aplicar a aquellos que realizaran "alteraciones graves de la paz", y colocó a sus hombres en la conducción del ejército. En esas condiciones ya dictatoriales se realizaron las elecciones en las que obtuvo el 44% del Parlamento, número que tampoco le otorgó la mayoría. Para entonces la dictadura ya se había instalado definitivamente, y el Parlamento no volvió a tener influencia política.