Diferencia entre revisiones de «Nahuatlismo»
Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición |
Deshecha la edición 37845093 de 189.188.130.61 (disc.) |
||
Línea 1:
'''
El uso de los nahuatlismos en el idioma español es uno de los rasgos distintivos del español mexicano. Siendo un tema de gran importancia, existe un gran número de estudios sobre la frecuencia de su uso y su prevalencia entre distintas capas de la población en México. Estas cuestiones suelen ser motivo de desacuerdo entre los investigadores.
== Origen y uso actual de los
[[Archivo:Malinche Tlaxcala.jpg|right|thumb|300px|La Malinche, en el centro de esta imagen, fue una de las primeras lenguas que sirvieron a los españoles. Su nombre es castellanización de ''Malintzin'', y también es un nahuatlismo que designa a una persona que prefiere lo extranjero y desprecia lo propio de su país.]]
Los
La historia de la relación entre el náhuatl y el español no fue sencilla. Para poder entenderse con los nativos, los españoles recurrieron en un primer momento a intérpretes que llamaron ''[[lenguas]]''. Las primeras lenguas fueron [[Jerónimo de Aguilar]] y [[La Malinche]]. Muy poco tiempo después de la [[Conquista de México|Conquista]], los misioneros se preocuparon por aprender las lenguas de los pueblos que se propusieron cristianizar. El el caso del náhuatl, destaca la labor de [[Bernardino de Sahagún]], [[Toribio de Benavente]] y otros, que legaron gramáticas y vocabularios de este idioma. La diversidad lingüística mesoamericana motivo la adopción del náhuatl como [[lengua general]], de modo que muchos pueblos aprendieron este idioma para simplificar la comunicación. El reconocimiento por parte de la [[Corona española]] del náhuatl como lengua general favoreció su difusión por un territorio considerable, que abarcaba [[Nueva España]] desde [[Sinaloa]] hasta [[Costa Rica]].<ref>Moreno de Alba, 1988: 45.</ref> Posteriormente, durante el reinado de [[Carlos III]] en [[España]], las autoridades coloniales favorecieron la eliminación de las lenguas indígenas, incluyendo el náhuatl, y la castellanización de todos los pueblos indígenas. La medida fue rechazada por los franciscanos en su momento.<ref>Zavala, 1995: 43.</ref>
|