La ironía a menudo requiere una cargabagaje [[cultura]]l que debe tenerse en cuenta, y como una forma de hablar de una lengua determinada, la ironía a veces no puede ser perfectamente traducida. Una excepción con un segundo significado fácil de entender para un estadounidense proveniente del este, puede ser extraña para un canadiense, australiano, o incluso estadounidense del oeste. Intentar una traducción literal de la expresión irónica a otro idioma a menudo lleva el concepto hacia lo incoherente. Más allá, el uso de la ironía verbal puede también relacionarse con pautas no literales como el tono de voz o la postura. Toda cultura incorpora su propia manera de metáfora lingüística y expresiones verbales. En tales casos, la traducción requerirá un cuidado extra, y quizás una explicación.