Una hebilla (del latín vulgar «fibella», diminutivo de «fibŭla») es una pieza de metal, plástico, papel y otros materiales que funciona como cierre o sujeción, gracias a diversos tipos de broche o enganche, el más común un clavo articulado en una varilla.[1]​ Es complemento habitual en cinturones, correas, herrajes, cinchas, etc. Antes de la invención de la cremallera, se usaba para abrochar calzado y ropajes.[2]​ También es frecuente su uso en bolsos, mochilas, relojes y joyería de pulsera, o como motivo ornamental.[3]

Hebillas arqueológicas de bronce del sur de Suecia.

Como alternativa de broches, corchetes, fíbulas, imperdibles, pasadores, o prendedores, fueron utilizadas en la Grecia antigua y en la antigua Roma, particularmente en vestimenta militar para cinturones de espadas, corazas y el resto de equipamiento, así como para fijar la silla de montar para los caballos y sus estribos; se fabricaban en metal, hueso y marfil. Las hebillas con múltiples pitones (pitón-pestillo-perno-clavillo) aparecieron en el siglo xviii como complemento de la moda vestimentaria.[4][5]​ Las hebillas con rodillo o de rodillo se consideran un invento de mediados del siglo xix.

Modelos arqueológicos editar

Modelos contemporáneos editar

 
Hebilla de liberación lateral

Véase también editar

Referencias editar

  1. Real Academia Española. «hebilla». Diccionario de la lengua española (23.ª edición). 
  2. Casares, Julio: Diccionario ideológico de la lengua española (2ªed. 1975): Editorial Gustavo Gili, Barcelona; p. 444; ISBN 84-252-0126-8.
  3. «Catálogo de fabricantes de hebillas: tipos y modelos». Consultado el 28 de noviembre de 2016. 
  4. «Guía del Museo del Traje». mcu.es. Consultado el 28 de noviembre de 2016. 
  5. Boucher, 2008, pp. 276 a 288.

Bibliografía editar

Enlaces externos editar