En la antigüedad clásica, el lorario era el esclavo encargado de atar y flagelar con correas a sus compañeros de servidumbre que cometían alguna falta en las casas donde había mucho servicio doméstico. Su condición no era ni más elevada ni más envidiable que la de aquellos a quienes castigaba.

Figura el lorario como personaje de algunas comedias y Plauto le asigna varios remoquetes griegos con que las gentes aludían a su condición, como Colaphos (bofetón), Cordalión (cuerda) o Córax (potencia). Un bajorrelieve de mármol, procedente de Roma y que se guarda en el Museo de Nápoles, representa una escena de una comedia en la que aparecen dos personajes: uno que tiene en una mano o cuerda o correa doblada, que parece guarnecida de bolas de plomo y en actitud de descargar el golpe contra el otro personaje que se acoge a sí mismo como pidiéndole clemencia.

Otros usos editar

Fabricante de correas editar

Se daba el mismo nombre de lorario al fabricante de correas, especialmente para bridas, atelajes, etc.

Galón editar

Desde el siglo II de nuestra era se daba el nombre de lorum a un galón, sencillo o doble, que se cosía sobre un vestido de color diferente y se cree[cita requerida] que el que fabricaba tales galones se llamaba también lorario. En Roma había un vicus lorarius, que había tomado este nombre de los fabricantes de estos galones o de los que hacían correas, pero no se sabe en qué parte de la ciudad estaba situado.

Bibliografía editar

  • Wieseler, Denkmäler des Bühnenvesens (Gotinga, 1891)
  • Jordan, Topogr. de Stadt Rom.

Referencias editar