El lugar de memoria es un concepto histórico propuesto por el libro Les Lieux de Mémoire, publicado bajo la dirección del historiador francés Pierre Nora entre 1984 y 1992.[1][2]​ El término lieu de mémoire entró en el diccionario Le Grand Robert de la lengua francesa en 1993 y pasó a ser de uso común.

Ya en 1978, en su contribución sobre la «memoria colectiva» en la enciclopedia La Nouvelle Histoire, Pierre Nora señalaba que «la historia se escribe ahora bajo la presión de las memorias colectivas», que buscan «compensar el desarraigo histórico de lo social y la angustia del futuro a través de la valorización de un pasado hasta ahora no vivido como tal».

Según Pierre Nora, «un lugar de memoria en todos los sentidos de la palabra va desde el objeto más material y concreto, posiblemente ubicado geográficamente, hasta el objeto más abstracto e intelectualmente construido». Por lo tanto, puede ser un monumento, un personaje importante, un museo, archivos, así como un símbolo, un lema, un acontecimiento o una institución. También las redes sociales virtuales son empleadas como lugares de memoria[3]​.

«Un objeto», explica Pierre Nora, «se convierte en un lugar de memoria cuando escapa al olvido, por ejemplo con la colocación de placas conmemorativas, y cuando una comunidad lo reviste con su afecto y sus emociones». A diferencia de la genealogía, que se refiere esencialmente a la historia y a la filiación de las familias, limitándose a la historia personal o de las personas entre las que existe un vínculo, los lugares de memoria remiten a la historia colectiva. A través de ellos, podemos acercarnos a las instituciones, las comunidades y sus organizaciones, los principales organismos estatales, las comunidades religiosas.

Referencias editar

  1. Nora, Pierre (2008). «Les lieux de mémoire, ou comment ils m'ont échappé». L'Histoire (en francés) (331): 32-35. 
  2. Leoné Puncel, Santiago (1999). «Entre la crítica y nostalgia: la problemática de Pierre Nora (A propósito de Les lieux de mémoire. Memoria y Civilización (2): 339-348. «La noción de "lugar de la memoria" puede aplicarse (y, de hecho, se ha aplicado) a objetos materiales, como una bandera o un edificio (el Sagrado Corazón de Montmartre o la Torre Eiffel), pero también a objetos inmateriales, como una fórmula ("Liberté, Égalité, Fraternité"), una oposición (católicos y laicos, gaullistas y comunistas), una noción (el patrimonio), un periodo histórico (Vichy). […] Esta tipología que realiza Nora parte del presente. Lo que define a un lugar de la memoria como tal no es la importancia que pudo tener en el pasado, sino más bien la que se le ha dado desde el presente. […] En eso consisten Les lieux de mémoire: una reescritura de la historia de Francia que define su objeto como una representación en la que una colectividad ha vivido inmersa y por la que ahora siente un apego más o menos sentimental. El proyecto de Nora es, en fin, la adecuación de la historia a este nuevo momento en el que la relación entre memoria y nación ya no es tan simple, ya no es vivida con la "sinrazón del corazón" sino sólo con las "razones de la cabeza"». 
  3. Baltar-Moreno, Adolfo (20 de diciembre de 2022). «Redes sociales digitales como lugares de memoria». Revista ICONO 14. Revista científica de Comunicación y Tecnologías emergentes 20 (2). ISSN 1697-8293. doi:10.7195/ri14.v20i2.1880. Consultado el 31 de diciembre de 2022. 

Véase también editar