Un perro del Urco (en gallego: can do Urco) o Huerco es un animal propio de las mitologías gallega y asturiana que adopta la forma de un perro enorme, de color negro, con grandes cuernos y orejas, y que sale del mar arrastrando cadenas.[1]​ Su presencia se considera de mal augurio, muchas veces anuncio de una muerte próxima.[1]​ Tiene gran similitud con los espíritus o demonios acuáticos británicos como el kelpie que según los cuentos atraían a los incautos para luego ahogarlos, o que al ser vistos se tomaban como malos augurios .

En Galicia el animal recibe los nombres de Urco, can do Urco y Can do Mar, mientras que en Asturias se denomina Güercu.

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