Suillus brevipes

especie de hongo

Suillus brevipes es una especie de hongo de la familia Suillaceae.[1]​ Los cuerpos fructíferos (basidiocarpos o setas) producidos por el hongo se caracterizan por un sombrero de color marrón rojizo o chocolate cubierto con una capa pegajosa de cieno, así como un estipe corto y blanquecino que no tiene velo parcial o puntos glandulares prominentes oscuros o de color. El sombrero puede alcanzar un diámetro de aproximadamente 10 cm, mientras que el estipe tiene hasta 6 cm de largo y 2 cm de grosor. Al igual que otros boletos,[n. 1]S. brevipes produce esporas en una capa de tubos esponjosos dispuestos verticalmente con aberturas que forman una película de pequeños poros de color amarillento en la parte inferior del sombrero.

 
Suillus brevipes
Taxonomía
Reino: Fungi
División: Basidiomycota
Clase: Agaricomycetes
Orden: Boletales
Familia: Suillaceae
Género: Suillus
Especie: S. brevipes
(Peck) Kuntze (1898)
Sinonimia
  • Boletus brevipes Peck (1885)
  • Boletus viscosus Frost (1885)
  • Rostkovites brevipes (Peck) Murrill (1948)

Crece en asociaciones micorrícicas con varias especies de pinos de dos y tres plantas con acículas, especialmente P. contorta y P. ponderosa. El hongo se encuentra en toda América del Norte, y se ha introducido a otras regiones a través de los pinos trasplantados. Tiene varias etapas de desarrollo y se encuentra en todos los estadios de la sucesión de hongos micorrícicos presente en los rebrotes de P. banksiana después de la tala o los incendios. Las setas son comestibles y ricas en ácido linoleico, un ácido graso esencial.

Descripción editar

La carne del sombrero varía desde blanca a amarilla pálida, y no cambia de color cuando se corta.
Los poros, en la parte inferior del sombrero, son minúsculos, típicamente algo más de dos por milímetro cuadrado.
Características micológicas
Suillus brevipes
  

Himenio con poros
  
  

Sombrero convexo o aplanado
  
  

Láminas adnatas o decurrentes
  

Pie desnudo
  

Esporas de color marrón
  

Ecología micorrízica
  

Comestibilidad: comestible

El sombrero es de color marrón oscuro a castaño,[3]​ aunque después se curte con la edad, y no magulla al manipularlo. La superficie es lisa, y, dependiendo de la humedad en el medio ambiente, puede variar desde pegajosa a viscosa al tacto. En función de su madurez, la forma del sombrero puede variar desde esférica a ampliamente convexa. El tamaño es mediano, de 5-10 cm de ancho,[4]​ y la cutícula del sombrero puede desprenderse de la superficie. Los tubos son amarillos, haciéndose verdes oliva con la edad, y tienen un anexo al estipe que se presenta como adnato[n. 2]​ (con la mayor parte del tubo fusionado en el estipe) o decurrente[n. 3]​ (con los tubos muy unidos, pero recorriendo un poco hacia abajo a lo largo del estipe). Por lo general, tienen hasta 1 cm de profundidad, y aproximadamente 2.1 bocas (poros) por mm².[7]​ Los poros son redondos, de 1-2 mm de diámetro, y el tejido que los rodea es amarillo claro y no cambia de color cuando se lastiman.[8]

El estipe es blanco a amarillo pálido, seco, sólido, sin moretones por golpes, y pruinoso (que presenta un polvo blanquecino muy fino en la superficie).[n. 4]​ Un rasgo característico de muchas especies de Suillus son los puntos glandulares que se encuentran en el estipe —grupos de células hifales terminales en las cuales el hongo segrega diversos desechos metabólicos, dejando un «punto» pegajoso o resinoso—. En S. brevipes, la forma de los puntos glandulares es variable: pueden estar ausentes, ligeramente subdesarrollados u oscurecidos con la edad. El estipe suele ser corto en comparación con el diámetro del sombrero, por lo general de 2-6 cm de largo y 1-2 cm de grosor; puede tener igual ancho en toda su longitud, o forma cónica hacia abajo. La superficie tiene orificios diminutos de punción en la madurez, y es ligeramente fibrosa en la base.[10]​ Las setas recolectadas en Nueva Zelanda tienden a tener una coloración rojiza en la base del estipe.[11]​ Inicialmente, la carne es blanca, pero se torna amarilla pálida con la edad. El olor y el sabor son suaves. La esporada es marrón o canela.[12]

Características microscópicas editar

Las esporas son elípticas a oblongas, lisas, y miden 7-10 x 3-4 µm. Los basidios (células productoras de esporas) tienen paredes delgadas, en forma de bastón o casi cilíndricos, y meden 2-25 x 5-7 µm.[8]​ Poseen dos o cuatro esporas. Los pleurocistidios (cistidios en los lados de las láminas) tiene una forma aproximadamente cilíndrica con extremos redondeados, paredes delgadas, y 40-55 x 5-8 µm. El contenido de las células tiende a ser marrón, y en presencia de hidróxido de potasio (KOH) al 2 % se observará hialino (translúcido) o vinoso (vino rojizo); en reactivo de Melzer se tornan de color amarillo pálido o marrón. Los cheilocistidios (cistidios que se encuentran en los bordes de las láminas) tienen 30-60 x 7-10 µm, con forma de bastón o casi cilíndrica, paredes delgadas con material marrón incrustado en la base, y dispuestos en un haz de fibras. En KOH se observan hialinos, y son de color amarillo pálido en reactivo de Melzer. Los caulocistidios (que se encuentran sobre el estipe) son cilíndricos, miden 60-90 x 7-9 µm, tienen extremos redondeados y están dispuestos en fardos con partículas de pigmento marrón en la base; se tornan vinosos en KOH. La cutícula del sombrero está hecha de una capa gelatinosa de hifas entretejidas que, individualmente, tienen 2-5 µm de grosor; las hifas gelatinosas son responsables de la viscosidad de la cutícula.[10]​ No hay uniones en abrazadera en las hifas.[8]

Comestibilidad editar

 
En la literatura se recomienda pelar la viscosa cutícula del sombrero antes de consumirla.

Al igual que muchas especies del género Suillus, S. brevipes es comestible y el hongo se considera recomendado por algunos autores.[12]​ El olor es suave, y el sabor es poco picante o ácido suave.[13]​ Algunos autores recomiendan quitar la cutícula viscosa y, en especímenes de mayor edad, la capa de tubos antes de consumir el sombrero.[13][14]​ Los hongos son comunes en la dieta de los osos pardos en el parque nacional de Yellowstone.[15]

En 1973 se analizó la composición de ácidos grasos en los basidiocarpos de S. brevipes. El sombrero posee un contenido superior de lípidos al del estipe —18.4 % de peso en seco, en comparación con 12.4 %—. En el sombrero, el ácido linoleico constituye el 50.7 % de los lípidos totales (65.7 % en el estipe), el ácido oleico era de 29.9 % (12.4 % en el estipe), seguido de ácido palmítico en 10.5 % (12.6 % en el estipe).[16]​ El ácido linoleico, un miembro del grupo de los ácidos grasos esenciales —conocidos como ácidos grasos ω-6—, constituye un requisito esencial para la dieta de los seres humanos, que debe ser tomado en la proporción adecuada respecto a los ácidos grasos ω-3.[17]

 
Ilustración de las diferentes etapas de crecimiento de los basidiocarpos.

Taxonomía editar

 
Ejemplares fotografiados en el bosque experimental Fraser, Colorado.

La especie fue descrita científicamente como Boletus viscosus por el micólogo estadounidense Charles Christopher Frost en 1874. En 1885, Charles Horton Peck, quien había encontrado ejemplares en los bosques de pinos del condado de Albany, explicó que el nombre de la especie era un homónimo taxonómico[n. 5]​ (Boletus viscosus ya estaba en uso por otra especie nombrada por Ventenat en 1863[19]​), y le cambió el nombre a Boletus brevipes.[20][21]​ Su nombre actual fue asignado por Carl Ernst Otto Kuntze en 1898.[22]William Alphonso Murrill la rebautizó como Rostkovites brevipes en 1948;[23]​ el género Rostkovites ahora es considerado sinónimo de Suillus.[24]

El especialista en hongos agaricales Rolf Singer incluyó a Suillus brevipes en la subsección Suillus del género Suillus, una agrupación infragenérica (un nivel taxonómico inferior al de género) de especies que se caracterizan por una esporada marrón o canela, y poros de menos de 1 mm de ancho.[25]Análisis filogenéticos moleculares de secuencias de ADN ribosómico revelaron que las especies más estrechamente relacionadas incluyen S. luteus, S. pseudobrevipes, y S. weaverae (anteriormente Fuscoboletinus weaverae).[26]​ El epíteto específico proviene del vocablo latino brevipes, que significa ‘pierna corta’.[13]

Especies similares editar

Varias especies de Suillus que crecen bajo los pinos podrían confundirse con S. brevipes. S. granulatus tiene un estipe más largo y granos diferentes sobre el estipe. S. brevipes se diferencia de S. albidipes al no tener una tira de tejido velar algodonoso (derivado del velo parcial) en el borde cuando está joven. S. pallidiceps se distingue por su sombrero amarillo pálido; y S. albivelatus tiene un velo.[8]S. pungens tiene un olor acre característico, en comparación al olor suave de S. brevipes, y, al igual que S. granulatus, tiene puntos glandulares en el estipe.[12]

Hábitat y distribución editar

Crece en solitario, disperso o en grupos sobre la tierra a finales de verano y otoño. Es una seta común —en ocasiones, abundante—, habita la mayor parte de América del Norte (incluyendo Hawái[27]​),[4]​ el sur de México[28]​ y el norte de Canadá.[29]​ Se ha encontrado en Puerto Rico creciendo en la base de pinos macho, donde se cree que fue introducida inadvertidamente desde Carolina del Norte por el Servicio Forestal del USDA en 1955.[30][31]​ También se produjeron otras introducciones en las plantaciones de pinos exóticos en Argentina, la India, Nueva Zelanda,[32][33]Japón y Taiwán.[34]

Ecología editar

 
El hongo aparece al principio de la sucesión de los hongos micorrícicos durante el rebrote de pinos después de un incendio.

Es un hongo micorrícico y desarrolla una estrecha asociación simbiótica con las raíces de varias especies de árboles, especialmente pinos. Los micelios subterráneos forman una envoltura alrededor de las raicillas del árbol, y las hifas del hongo penetran entre las células corticales de la raíz, formando ectomicorrizas. De esta manera, el hongo puede suministrar minerales al árbol, mientras que el árbol en reciprocidad le suministra carbohidratos creados por la fotosíntesis. En la naturaleza, se asocia con pinos de dos y tres acículas, especialmente Pinus contorta y P. ponderosa. En condiciones controladas en el laboratorio, el hongo ha demostrado que puede formar ectomicorrizas con los dos anteriores,[35]P. taeda, P. strobus,[36][37]P. patula,[38]P. serotina,[39]P. radiata[40]​ y P. resinosa.[37]​ Las asociaciones de micorrizas in vitro formadas con especies que no pertenecen a Pinus incluyen Arbutus menziesii, Arctostaphylos uva-ursi,[41]Larix occidentalis, Picea sitchensis y Pseudotsuga menziesii var. menziesii.[42]​ El crecimiento fúngico se inhibe ante la presencia de altos niveles de metales pesados, como el cadmio (350 ppm), plomo (200 ppm) y níquel (20 ppm).[43]

En la regeneración de pinos tras una perturbación, como la tala o incendio forestal, la especie aparece en una serie ordenada de hongos micorrícicos en la que una especie es reemplazada por otra. Un estudio sobre la sucesión ecológica de los hongos ectomicorrízicos en bosques de pinos de Banks tras un incendio concluyó que S. brevipes es un hongo multietapa. En dicho estudio, se observó al hongo creciendo relativamente al principio del ciclo de vida del árbol; los basidiocarpos eran comunes en grupos de árboles de seis años y colonizaron la mayor parte de las puntas de las raíces. El hongo estuvo durante toda la vida del árbol, pues se encontró en grupos de árboles de 41, 65 y 122 años de edad. No obstante, hubo una reducción relativa en la prevalencia del hongo con el aumento de la edad del grupo, lo que el investigador del estudio atribuye a la creciente competencia de otros hongos y un cambio de hábitat provocado por la limitación del dosel arbóreo.[44]

Generalmente, S. brevipes responde favorablemente a prácticas silvícolas como la tala y poda. Un estudio publicado en 1996 demostró que la abundancia de los basidiocarpos aumentó cuando incrementó la intensidad de la perturbación.[45]​ Se ha sugerido que los rizomorfos de paredes gruesas y nervudas producidas por el hongo le sirven como una adaptación que le ayuda a sobrevivir y seguir siendo viable por cierto período de tiempo después de la perturbación.[46]

Fuentes editar

Notas editar

  1. Un boleto (nombre vernáculo) es un tipo de esporocarpo que se caracteriza por la presencia de un sombrero claramente diferenciado del estipe, con una superficie esponjosa llena de poros (en lugar de láminas) en la parte inferior del sombrero.[2]
  2. «Que nace y crece juntamente con otra cosa a la que está adherido.»[5]
  3. En micología, decurrente se refiere a las partes del hongo que se extienden hacia abajo. Se aplica con mayor frecuentemente al himenóforo (parte del basidiocarpo que lleva el himenio, como las láminas o «branquias» de un hongo o los «poros» de un hongo de repisa) cuando están muy unidos y se extienden por el estipe.[6]
  4. O una secreción semiopaca, que aparenta gotas de rocío congeladas en la superficie.[9]
  5. En biología, un homónimo es un nombre aplicado a una especie que tiene un nombre científico idéntico al de otro, pero pertenece a un taxón diferente.
    Según el Código Internacional de Nomenclatura Zoológica, el primero de dichos nombres publicados será el homónimo sénior y utilizado como válido; cualquier otro será homónimo junior y será remplazado con un nuevo nombre. Sin embargo, es posible que si un homónimo de alto nivel es arcaico, y no es de «uso predominante», puede ser declarado nomen oblitum y vuelve a estar disponible, mientras que el homónimo junior se conserva como un nomen protectum.[18]

Referencias editar

  1. Arora, 1986, pp. 501-502.
  2. Orr, DB; Orr, RT (1968). «Club Fungi (Basidiomycetes)». Mushrooms and other common fungi of southern California. California natural history guides (en inglés) 22. Berkeley: University of California Press. p. 29. OCLC 261179. Consultado el 5 de septiembre de 2015. 
  3. McKnight y McKnight, 1987. lámina 11
  4. a b Miller y Miller, 2006, p. 357.
  5. Real Academia Española. «adnato». Diccionario de la lengua española (23.ª edición). Consultado el 2 de septiembre de 2015. 
  6. Ammirati, J; Trudell, S (2009). Mushrooms of the Pacific Northwest: Timber Press Field Guide. Timber Press Field Guides (en inglés). Portland: Timber Press. p. 316. ISBN 0-88192-935-2. OCLC 311779940. 
  7. Healy et al., 2008, p. 171.
  8. a b c d Tylukti, 1987, pp. 9-12.
  9. Kauffman, CH (1971) [1918]. The Gilled Mushrooms (Agaricaceae) of Michigan and the Great Lakes Region (en inglés). Nueva York: Dover Publications. p. 806. ISBN 978-0-486-22396-4. OCLC 134382. 
  10. a b Grund y Harrison, 1976, pp. 176-178.
  11. McNabb, RFR (1968). «The Boletaceae of New Zealand». New Zealand Journal of Botany (en inglés) (Wellington: The Royal Society of New Zealand/Dept. of Scientific and Industrial Research) 6 (2): 137-176. ISSN 0028-825X. OCLC 4841323103. doi:10.1080/0028825X.1968.10429056. 
  12. a b c Orr y Orr, 1980, pp. 88-90.
  13. a b c Evenson, 1997, p. 158.
  14. Smith y Weber, 1980, p. 98.
  15. Mattson, DJ; Podruzny, SR; Haroldson, MA (enero de 2002). «Consumption of fungal sporocarps by Yellowstone Grizzly Bears». Ursus (en inglés) (Nueva York: International Association for Bear Research and Management) 13: 95-103. ISSN 1537-6176. JSTOR 3873191. OCLC 5550552019. 
  16. Sumner, JL (1973). «The fatty acid composition of Basidiomycetes» (PDF). New Zealand Journal of Botany (en inglés) (Wellington: Dept. of Scientific and Industrial Research) 11 (3): 435-442. ISSN 1175-8643. doi:10.1080/0028825x.1973.10430293. Consultado el 7 de noviembre de 2015. 
  17. Russo, GL (2009). «Dietary n-6 and n-3 polyunsaturated fatty acids: from biochemistry to clinical implications in cardiovascular prevention». Biochemical Pharmacology (en inglés) (Ámsterdam: Elsevier Science) 77 (6): 937-946. ISSN 0006-2952. OCLC 317047938. PMID 19022225. doi:10.1016/j.bcp.2008.10.020. 
  18. «Articles 53, 15, and 13». International Code of Nomenclature for algae, fungi, and plants (en inglés). Melbourne: International Botanical Congress. Consultado el 14 de junio de 2013. 
  19. «Boletus viscosus Vent. 1863». MycoBank (en inglés). Utrecht: International Mycological Association. Consultado el 1 de septiembre de 2010. 
  20. Peck, CH (1885). «Report of the Botanist (1884)». Annual Report on the New York State Museum of Natural History (en inglés) 38: 110. Consultado el 7 de noviembre de 2015. 
  21. Halling, RE (enero de 1983). «Boletes described by Charles C. Frost». Mycologia (en inglés) (Lawrence: New York Botanical Garden/Mycological Society of America) 75 (1): 70-92. ISSN 0027-5514. JSTOR 3792925. OCLC 5550570512. doi:10.2307/3792925. 
  22. Kuntze, O (1898). Revisio Generum Plantarum (en alemán) 3. Leipzig: A. Felix. p. 535. OCLC 3427945. Consultado el 5 de septiembre de 2015. 
  23. Murrill, WA (1948). «Florida boletes». Lloydia (en inglés) (Cincinnati: Lloyd Library and Museum) 11: 29. ISSN 0024-5461. 
  24. Kirk et al., 2008, p. 607.
  25. Singer, 1986, p. 756.
  26. Kretzer, A; Li, Y; Szaro, T; Brun, TD (1996). «Internal transcribed spacer sequences from 38 recognized species of Suillus sensu lato: Phylogenetic and taxonomic implications» (PDF). Mycologia (en inglés) (Lawrence: New York Botanical Garden/Mycological Society of America) 88 (5): 776-785. ISSN 0027-5514. JSTOR 3760972. OCLC 5554232888. doi:10.2307/3760972. Archivado desde el original el 5 de marzo de 2016. Consultado el 7 de noviembre de 2015. 
  27. Hemmes y Desjardin, 2002, p. 31.
  28. Cappello, S; Cifuentes, J (1982). «New records of the genus Suillus (Boletaceae) from Mexico». Boletín de la Sociedad Mexicana de Micología (en inglés) (México, D. F.: Sociedad Mexicana de Micología) (17): 196-206. ISSN 0085-6223. 
  29. Bossenmaier, 1997, p. 60.
  30. Miller, OK, Jr.; Lodge, DJ; Baroni, TJ (2000). «New and interesting ectomycorrhizal fungi from Puerto Rico, Mona, and Guana Islands». Mycologia (en inglés) (Lawrence: New York Botanical Garden/Mycological Society of America) 92 (3): 558-570. ISSN 0027-5514. JSTOR 3761516. OCLC 5556818281. doi:10.2307/3761516. 
  31. Vozzo, JA (1971). «Field inoculations with mycorrhizal fungi». En Hacskaylo, E, ed. Mycorrhizae: proceedings of the first North American conference on mycorrhizae. April 1969. Miscellaneous publication (en inglés) (1189). Washington D. C.: U.S. Forest Service, Department of Agriculture. pp. 187-196. OCLC 281829. Consultado el 5 de septiembre de 2015. 
  32. Read, 2000, p. 333.
  33. Natarajan, K; Raman, N (1983). «South Indian Agaricales 20. Some mycorrhizal species». Kavaka (en inglés) (Chennai: Mycological Society of India) 11: 59-66. ISSN 0379-5179. 
  34. Yeh, K-W; Chen, Z-C (1983). «Boletes of Taiwan 4». Taiwania (en inglés) (Taipéi: Dept. of Botany, College of Science, National Taiwan University [臺灣泥雅畫廊]) 28: 122-27. ISSN 0372-333X. Archivado desde el original el 6 de marzo de 2012. Consultado el 5 de septiembre de 2015. 
  35. Grand, LF (1968). «Conifer associated and mycorrhizal syntheses of some Pacific Northwest Suillus species». Forest Science (en inglés) (Bethesda: Society of American Foresters) 14 (3): 304-312. ISSN 0015-749X. OCLC 917968718. Resumen divulgativo. 
  36. Doak, KB (1934). «Fungi that produce ectotrophic mycorrhizae». Phytopathology (en inglés) (St. Paul: American Phytopathological Society) 24: 7. 
  37. a b Palm, ME; Stewart, EL (1984). «In vitro synthesis of mycorrhizae between presumed specific and nonspecific Pinus + Suillus combinations». Mycologia (en inglés) (Lawrence: New York Botanical Garden/Mycological Society of America) 76 (4): 579-600. ISSN 0027-5514. JSTOR 3793215. OCLC 5550356759. doi:10.2307/3793215. 
  38. Mohan, V; Natarajan, K; Ingleby, K (1993). «Anatomical studies on ectomycorrhizas II. The ectomycorrhizas produced by Amanita muscaria, Laccaria laccata and Suillus brevipes on Pinus patula.». Mycorrhiza (en inglés) (Heidelberg: International Mycorrhiza Society/Springer-Verlag Heidelberg) 3 (1): 43-49. ISSN 0940-6360. OCLC 704077815. doi:10.1007/bf00213467. 
  39. Suggs, EG; Grand, LF (mayo de 1971). «Formation of mycorrhizae in monoxenic culture by pond pine (Pinus serotina)». Canadian Journal of Botany (en inglés) (Ottawa: NRC Research Press/National Research Council Canada) 50 (5): 1003-1007. ISSN 0008-4026. OCLC 4636049970. doi:10.1139/b72-122. 
  40. Morrison, TM; Burr, R (1973). «Physiology of the mycorrhizas of Radiata Pine». Report of Forest Research Institute for 1972, New Zealand Forest Service (en inglés) 1: 19-20. 
  41. Molina, R; Trappe, JM (marzo de 1982). «Lack of mycorrhizal specificity by the ericaceous hosts Arbutus menzeniesii and Arctostaphylos uva-ursi.». New Phytologist (en inglés) (Londres: Wm. Dawson and Sons) 90 (3): 495-509. ISSN 1469-8137. doi:10.1111/j.1469-8137.1982.tb04482.x. 
  42. Molina, R; Trappe, JM (septiembre de 1982). «Patterns of ectomycorrhizal host specificity and potential among Pacific Northwest conifers and fungi». Forest Science (en inglés) (Bethesda: Society of American Foresters) 28 (3): 423-458. ISSN 0015-749X. OCLC 5858087969. 
  43. McCreight, JD; Schroeder, DB (febrero de 1982). «Inhibition of growth of nine ectomycorrhizal fungi by cadmium, lead, and nickel in vitro.». Environmental and Experimental Botany (en inglés) (Ámsterdam: Elsevier Science) 60 (9): 1-7. ISSN 0098-8472. OCLC 4928635943. doi:10.1016/0098-8472(82)90002-8. 
  44. Visser, S (julio de 1995). «Ectomycorrhizal fungal succession in Jack Pine stands following wildfire». New Phytologist (en inglés) (Londres: Wm. Dawson and Sons) 129 (3): 389-401. ISSN 1469-8137. JSTOR 2558393. OCLC 5550858465. doi:10.1111/j.1469-8137.1995.tb04309.x. 
  45. Kropp, BR; Albee, S (diciembre de 1996). «The effects of silvicultural treatments on occurrence of mycorrhizal sporocarps in a Pinus contorta forest: A preliminary study». Biological conservation (en inglés) (Barking: Elsevier Science) 78 (3): 313-318. ISSN 0006-3207. OCLC 4657465726. doi:10.1016/S0006-3207(96)00140-1. 
  46. Bradbury, SM; Danielson, RM; Visser, S (febrero de 1998). «Ectomycorrhizas of regenerating stands of lodgepole pine (Pinus contorta)». Canadian Journal of Botany (en inglés) (Ottawa: NRC Research Press/National Research Council Canada) 76 (2): 218-227. ISSN 0008-4026. OCLC 4796576278. doi:10.1139/cjb-76-2-218. 

Bibliografía consultada editar