Usuario:Odime/Hembrismo

Hembrismo alude a una actitud de prepotencia de las mujeres respecto de los hombres, o bien un parcialismo discriminatorio claramente favorable a la mujer en acciones u opiniones.[1]​ Su significación es en muchos aspectos contraria a la del machismo, pero también puede incluirse dentro del fenómeno del sexismo y la discriminación sexual, sólo que con este término se expresarían aquellas discriminaciones y perjuicios que favorecen a las mujeres y dañan a los hombres. En las Actas de Léxico Español Actual, Venecia- Treviso 14-15 de marzo de 2005, edicion de Luis Luque Toro, ISBN 13: 978-88-7543-180-8, en el capítulo titulado “El Neologismo Español Actual”, el prestigioso profesor universitario Manuel Alvar Ezquerra, aporta la siguiente definición del término, junto a una cita del diario El País en el que se hace uso directo de éste:

hembrismo, ‘discriminación sexual, de carácter dominante, adoptada por las mujeres’: Creo que el uso de términos como concejala, clienta o jefa sólo se puede calificar como hembrismo en el lenguaje.
El País Semanal, 3-XI-02, 7ª

Las referencias a este término están en correlación directa con las demandas de diferentes colectivos defensores de los derechos de los hombres, como puedan ser las Asociaciones de Padres de Familia Separados o APFS y los grupos como Mandefender. Se trata por lo general de movimientos de hombres englobables dentro del masculinismo, ideología que se encuentra actualmente en una etapa de desarrollo incipiente, aunque cada vez más organizada y presente en la sociedad. Haciendo uso de este término se han criticado aquellas acciones llevadas a cabo por un sector considerable del feminismo las cuales han desarrollado un claro ventajismo político, social, cultural y legal a favor de la mujer perjudicando comparativa o directamente a los hombres.

Es por lo tanto un término que señala los abusos del feminismo en sus tendencias más radicales, femicéntricas (Ver femicentrismo) o misándricas (Ver misandria), separándolas de las tendencias igualitarias y de demanda justa de la solución de las discriminaciones femeninas del llamado Demofeminismo o Feminismo Igualitario o Feminismo de Equidad, diferentes traducciones al castellano del concepto inglés Equity Feminism.

El feminismo de corte hembrista parte de un proceso de análisis parcial y selectivo de la discriminación sexual considerando únicamente dentro de la misma aquellos aspectos sociales e históricos que han perjudicado a la mujer, a la vez que soslaya y condena a la invisibilidad los que han perjudicado a los hombres. A partir de ahí utiliza un lenguaje victimista, argumento central de la célebre obra de crítica del pensamiento feminista de Elisabeth Badinter “por mal camino”, claramente incompleto por considerar sólo la discriminación de la mujer, pero que articulado hábilmente por parte de diferentes grupos de presión, y contando con el apoyo de los medios de comunicación para la difusión de este mensaje, da una considerable capacidad de influencia política a quienes lo emplean.

También contribuye al desarrollo del hembrismo la transmisión de una imagen maniquea y desdibujada de lo masculino y lo femenino, claramente negativa hacía los hombres y marcadamente positiva hacía las mujeres. Esta interpretación deriva en una visión diferenciada de los dos sexos que perjudica a los varones. En este último sentido es clave el llamado proceso de “Empoderamiento Femenino”, elemento cultural nacido del feminismo y en el que esta ideología tiene un gran interés, mediante el cual se pretende potenciar la imagen, autoestima, sensación de capacidad, y la tendencia y asunción del liderazgo en las mujeres de un modo preferente y prioritario.

La valoración parcial del significado y mérito de la mujer favorece el desarrollo del hembrismo, ya que ensalzar a un grupo culturalmente de un modo duradero y exclusivo conduce invariablemente a la apreciación superior y exagerada de éste y a la minusvalorización o el desprecio de los grupos cuya imagen ha sido menos o nulamente afirmada. En el caso que nos ocupa y al referirnos a los dos sexos, el grupo dañado por esta apreciación y potenciación cultural sesgada de uno de los dos sexos sería el de los hombres.

Bibliografia editar

Notas editar

  1. El término hembrismo no está registrado en el Diccionario de la Real Academia pero sí aparece en importantes obras lexicográficas, como en SECO, M.; ANDRÉS, O.; RAMOS, G.: Diccionario del español actual. Madrid: Aguilar, 1999; pág. 2449. En esta misma obra se recoge también el adjetivo hembrista.