Carga de la prueba filosófica

la obligación de una de las partes, en una disputa de proporcionar (garantía) argumentos suficientes para sustentar su posición

En epistemología, la carga de la prueba (en latín: onus probandi) es la obligación de una de las partes de proporcionar justificación suficiente para su postura en un desacuerdo.

Poseedor de la carga editar

Cuando dos partes debaten y uno asevera una enunciación que el otro pone en duda, el que asevera tiene una carga de la prueba consistente en justificar o fundamentar esa enunciación.[1]​ Un argumento ad ignorantiam se produce cuando una proposición se supone verdadera porque aún no se ha demostrado que sea falsa o una proposición se supone falsa porque aún no se ha demostrado que sea verdadera. Esto conlleva que la carga de la prueba le corresponda a la persona que realiza la proposición.

Mientras que ciertos tipos de argumentos, como los silogismos lógicos, requieren pruebas matemáticas o pruebas lógicas estrictas, el estándar de evidencias para cumplir con la carga de la prueba suele estar determinado por las normas y convenciones del contexto y la sociedad.[2][3]

El debate filosófico puede derivar en discutir sobre quién tiene la carga de la prueba sobre una afirmación en particular. Esto se ha descrito como "tenis de carga" o "juego de responsabilidad".[4][5][6]

En debates públicos editar

La carga de la prueba también es un concepto importante en los foros públicos de ideas. Una vez que los participantes del debate establecen supuestos comunes, el mecanismo de la carga de la prueba ayuda a asegurar que todas las partes contribuyan de manera productiva, utilizando argumentos pertinentes.[7][8][9][10]

Demostrar una negación editar

Una enunciación negativa es una expresión coloquial para una enunciación afirmativa que asevera la inexistencia o la exclusión de algo.[11]​ Hay muchas pruebas que sustentan las enunciaciones negativas en las matemáticas, la ciencia y la economía, incluida la Paradoja de Arrow.

Una enunciación negativa puede o no existir como contrapunto a una enunciación anterior. Una prueba de imposibilidad o un argumento de evidencia de ausencia son métodos típicos para cumplir con la carga de la prueba para una enunciación negativa.[12][13]

Ejemplos editar

Matt Dillahunty pone el ejemplo de una gran jarra llena de chicles para ilustrar la carga de la prueba. Es un hecho real que el número de chicles enteros del frasco es par o impar, pero el grado de aceptación o rechazo personal de las enunciaciones sobre esa característica puede variar. Se puede optar por considerar dos enunciaciones acerca de la situación, que serían:

  1. El número de chicles es par.
  2. El número de chicles es impar.

Estas dos enunciaciones pueden considerarse de forma independiente; sin embargo, ambas representan la misma proposición. «Impar», en este caso, significa «no par» y podría ser descrito como una enunciación negativa. Sin tener información sobre el número de chicles, no hay forma de comprobar ninguna de las dos enunciaciones. Cuando no se tiene pruebas para resolver la proposición, se debería suspender el dictamen. Desde un sentido cognitivo, cuando no existe una preferencia personal por una de las enunciaciones opuestas, uno puede ser escéptico de ambas o ambivalente respecto a ambas. Si hay una enunciación propuesta y esa enunciación se debate, la carga de la prueba recae sobre el autor de la enunciación. Si no hay pruebas aceptables para apoyar una enunciación, esta se considera un argumento ad ignorantiam.

Véase también editar

Referencias editar

  1. Cargile, James (January 1997). «On the burden of proof». Philosophy (Cambridge University Press) 72 (279): 59-83. JSTOR 3751305. doi:10.1017/s0031819100056655. 
  2. Leite, Adam (2005). «A localist solution to the regress of justification». Australasian Journal of Philosophy 83 (3): 395–421 [p. 418]. S2CID 170261121. doi:10.1080/00048400500191974. «[t]he point of articulating reasons in defense of one's belief is to establish that one is justified in believing as one does.» 
  3. Leite, Adam (2005). «A localist solution to the regress of justification». Australasian Journal of Philosophy 83 (3): 395–421 [p. 403]. S2CID 170261121. doi:10.1080/00048400500191974. «conversación justificatoria... [se]... caracteriza por el intento sincero de una persona de reivindicar su derecho a una creencia proporcionando razones adecuadas en su defensa y respondiendo a las objeciones.» 
  4. Dennett, Daniel C. (July 1988). «Review of Psychosemantics by Jerry Fodor». The Journal of Philosophy (en inglés) 85 (7): 384-389 (389). JSTOR 2026956. doi:10.2307/2026956. Consultado el 21 de diciembre de 2022. «Fodor es demasiado sabio para pensar que su serie de argumentos puede refutar rotundamente las afirmaciones de la oposición, por lo que una y otra vez recurre a afirmaciones sobre cambiar la carga de la prueba, suscitar la pregunta, engañar al adoptar las conclusiones de reductios y otras explotaciones de las reglas del juego. El libro es un ejercicio incansable del pasatiempo de ese filósofo, el tenis de carga. Carga, carga, ¿quién tiene ahora la carga de la prueba? Fodor juega principalmente al tenis de carga en solitario, contra un oponente imaginario a menudo personificado como Granny o Aunty, lo que le permite expresar el punto de vista de la oposición en términos que se adaptan a su refutación, sin tener que abordar la cuestión de si se trata de una interpretación comprensiva de cualquiera de las pretensiones reales del oponente.» 
  5. Rodych, Victor (1996). «Wittgenstein's inversion of Gödel's theorem». En Shanker, Stuart; Kilfoyle, David, eds. Ludwig Wittgenstein: critical assessments. 2. The later Wittgenstein: from Philosophical investigations to On certainty. London; New York: Routledge. pp. 232–265 (261). ISBN 0415149150. OCLC 47938413. «Por lo tanto, en 1991 Wang parece entender "por qué" Wittgenstein rechaza GIT, pero, al parecer a favor del "juego de la responsabilidad" (o "tenis de la carga"), lamentablemente concluye (pp. 257-58) que "la carga de la prueba cae... directamente del lado de Wittgenstein" debido al "principio de presunción de inocencia" del propio Wang.» 
  6. Abelson, Robert P. (1995). «Credibility of argument». Statistics as principled argument. Hillsdale, NJ: Lawrence Erlbaum Associates. p. 170. ISBN 0805805273. OCLC 31011850. «Cuando las presentaciones de investigación presentan afirmaciones que muchos o la mayoría de los lectores consideran increíbles, estas afirmaciones son vulnerables a un desafío severo. En respuesta, normalmente habrá una refutación por parte del investigador y luego una nueva ronda de críticas. La carga de la prueba va y viene entre el investigador y el crítico en lo que podría llamarse el juego del 'tenis de la carga'.» 
  7. Goldman, Alvin (1994). «Argumentation and social epistemology». The Journal of Philosophy 91 (1): 27-49. JSTOR 2940949. doi:10.2307/2940949. 
  8. van Eemeren, Frans H.; Grootendorst, Rob (2004). A systematic theory of argumentation (en inglés). Cambridge, UK; New York: Cambridge University Press. p. 60. ISBN 0521830753. «[n]o tiene sentido aventurarse a resolver una diferencia de opinión a través de un intercambio argumentativo de puntos de vista si no existe un compromiso mutuo con un punto de partida común.» 
  9. Brandom, Robert (1994). Making it explicit. Cambridge, MA: Harvard University Press. p. 222. ISBN 067454319X. «hay tipos de oraciones que requerirían una gran cantidad de trabajo para llegar a una posición de desafío, como 'El rojo es un color', 'Hubo perros negros', 'El relámpago precede con frecuencia al trueno' y lugares comunes similares. Estos son tratados como 'movimientos libres' por los miembros de nuestra comunidad de habla: están disponibles para cualquier persona en cualquier momento para usarlos como premisas, para afirmar sin cuestionamientos.» 
  10. Adler, Jonathan E. (2002). Belief's own ethics. Cambridge, MA: MIT Press. pp. 164–167. ISBN 0262011921. 
  11. Hales, Steven D. (Summer 2005). «Thinking tools: You can prove a negative». Think (Cambridge University Press) 4 (10): 109-112. S2CID 170305277. doi:10.1017/S1477175600001287. 
  12. Hales, Steven D. (Summer 2005). «Thinking tools: You can prove a negative». Think (Cambridge University Press) 4 (10): 109-112. S2CID 170305277. doi:10.1017/S1477175600001287. 
  13. Damer, T. Edward (2009). Attacking faulty reasoning: a practical guide to fallacy-free arguments. Cengage Learning. p. 17. ISBN 9780495095064.