Una columna de platos (o columna de placas[1]​) es un equipo químico utilizado para llevar a cabo operaciones unitarias donde es necesario transferir masa entre una fase líquida y una fase gaseosa. En otras palabras, es un contactor particular de gas-líquido.[2]​ La peculiaridad de este contactor de gas-líquido es que el gas entra en contacto con el líquido a través de diferentes etapas;[1]​ cada etapa está delimitada por dos placas (excepto la etapa en la parte superior de la columna y la etapa en la parte inferior de la columna).

Algunas aplicaciones comunes de las columnas de placa son la destilación, la absorción de gas-líquido y la extracción de líquido-líquido. En general, las columnas de placa son adecuadas tanto para operaciones continuas como de lotes.

Dinámica de fluidos editar

 
Esquema de una columna de placa con bandejas de tapa de burbuja.

La alimentación a la columna puede ser líquida, gaseosa o gaseosa y líquida en equilibrio. Dentro de la columna, en cambio, siempre hay dos fases: una fase gaseosa y una fase líquida. La fase líquida fluye hacia abajo a través de la columna a través de la gravedad,[1]​ mientras que la fase gaseosa fluye hacia arriba. Estas dos fases entran en contacto en correspondencia con orificios, válvulas o tapas de burbujas que llenan el área de las placas.[2]​ El gas se mueve a la placa superior a través de estos dispositivos, mientras que el líquido se mueve a la placa inferior a través de un tubo descendente.[1]

El líquido se recoge en la parte inferior de la columna y se evapora a través de un hervidor, mientras que el gas se acumula en la parte superior y se condensa a través de un condensador. El líquido y el gas producidos en la parte superior y en la parte inferior son en general recirculados.

En el caso más simple, solo hay una corriente de alimentación y dos secuencias de productos. En el caso de la columna de fraccionamiento, en cambio, hay muchos flujos de productos.

Notas editar

Bibliografía editar

Véase también editar