Diferencia entre revisiones de «Vía Láctea»

Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
Diegusjaimes (discusión · contribs.)
m Revertidos los cambios de 189.133.200.55 a la última edición de Diegusjaimes
Línea 19:
}}
 
La '''Vía Láctea''' es la [[galaxia]] en la que se encuentra el [[Sistema Solar]] y, por ende, la [[Tierra (planeta)|Tierra]]. Según las observaciones, posee una masa de 10<sup>12</sup> [[Sol|masas solares]] y es una [[galaxia espiral barrada|espiral barrada]]; con un diámetro medio de unos 100.000 [[año luz|años luz]], se calcula que contiene entre 200 y 400 mil millones de [[estrella]]s. La distancia desde el [[Sol]] hasta el centro de la galaxia es de alrededor de 27.700 años luz (8,5 [[kiloparsec|kpc]], es decir, el 55 por ciento del radio total galáctico). La Vía Láctea forma parte de un conjunto de unas treintacuarenta galaxias llamado [[Grupo Local]].
galaxias llamado [[Grupo Local]].
 
El nombre ''Vía Láctea'' proviene de la mitología griega, y en [[latín]] significa ''camino de leche''. Ésa es, en efecto, la apariencia de la banda de luz que rodea el firmamento, y así lo afirma la mitología griega, explicando que se trata de leche derramada del pecho de la diosa Hera, esposa de Zeus, quien se negaba a amamantar al pequeño Hércules pues había sido fruto de una aventura. En una ocasión lo acercaron a su pecho mientras dormía, pero Hera despertó, lo retiró suavemente de su pezón y la leche se derramó por los cielos, dando forma a las brillantes constelaciones que admiramos en la noche. Sin embargo, ya en la [[Antigua Grecia]] se tiene conocimiento de un astrónomo que sugirió que aquel haz blanco en el cielo era en realidad un conglomerado de muchísimas estrellas. Se trata de [[Demócrito]] (460 a.C. - 370 a.C.), quien sostuvo que dichas estrellas eran demasiado tenues individualmente para ser reconocidas a simple vista. Su idea, no obstante, no halló respaldo, y tan sólo hacia el año 1609 de nuestra era, el astrónomo [[Galileo Galilei]] haría uso del [[telescopio]] para observar el cielo y constatar que Demócrito estaba en lo cierto pues, por donde quiera que mirase, aquél se encontraba lleno de estrellas.