Diferencia entre revisiones de «Nación»

Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
m Revertidos los cambios de 148.235.162.254 a la última edición de JAnDbot
Línea 1:
'''Nación''', en sentido estricto, tiene dos acepciones: la '''nación política''', en el ámbito [[Derecho|jurídico]]-[[Ciencia política|político]], es un sujeto político en el que reside la [[Poder constituyente|soberanía constituyente]] de un [[Estado]]; la '''nación cultural''', concepto [[Sociología|socio]]-[[Ideología|ideológico]] más subjetivo y ambiguo que el anterior, se puede definir a grandes rasgos, como una comunidad humana con ciertas características [[Cultura|culturales]] comunes, a las que dota de un sentido [[Ética|ético]]-político. En sentido lato '''''nación''''' se emplea con variados significados: [[Estado]], [[país]], territorio o habitantes de ellos, [[etnia]], [[pueblo (sociedad)|pueblo]] y otros.
 
== Nación política ==
'''KIIKO :)'''
En el campo del [[derecho político]], la nación política es el titular de la soberanía cuyo ejercicio afecta a la implantación de las normas fundamentales que regirán el funcionamiento del Estado. Es decir, aquellas que están en la cúspide del [[ordenamiento jurídico]] y de las cuales emanan todas las demás.
 
Han sido objeto de debate desde la [[Revolución Francesa]] hasta nuestros días las diferencias y semejanzas entre los conceptos de nación política y [[Pueblo (sociedad)|pueblo]], y por consiguiente entre [[soberanía nacional]] y [[soberanía popular]]. Las discusiones han girado, entre otras cosas, en torno a la titularidad de la soberanía, a su ejercicio, y a los efectos resultantes de ellos.
 
Una distinción clásica, con respecto a la mencionada Revolución, ejemplifica en la [[Constitución francesa de 1791|Constitución de 1791]] la soberanía nacional, ejercida por un parlamento elegido por [[sufragio censitario]] (visión conservadora), y la soberanía popular en la [[Constitución francesa del año I|Constitución de 1793]], en la que el pueblo es entendido como conjunto de individuos, lo que conduciría a la [[democracia directa]] o el [[sufragio universal]] (visión revolucionaria). Sin embargo, estos significados ya se difuminaron en la misma época revolucionaria, en la que varios autores emplearon los términos de otra forma. Según [[Guillaume Bacot]]<ref name="Bacot"><small>[[Guillaume Bacot]]: ''Carré de Malberg et l'origine de la distinction entre souveraineté du peuple et souveraineté nationale'', [[París]], [[1985]], ISBN 978-2-271-05858-4. Citado en Ramón Maiz Suárez: ''Los dos cuerpos del soberano: el problema de la soberanía nacional y la soberanía popular en la Revolución Francesa'' [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/primero/pdf/maiz.pdf], en [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/Portada.html ''Fundamentos''], [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/primero/Indice.html Volumen 1] (''Soberanía y Constitución''), [[1998]], ISSN 1575-3433</small></ref> las diferencias fueron prácticamente terminológicas y desde [[1789]] a [[1794]] hubo en el fondo un mismo concepto revolucionario de [[soberanía]].
 
En 1789 el abate [[Emmanuel-Joseph Sieyès|Sieyès]] usó, con un fuerte carácter socio-económico, ''nación'' y ''pueblo'' como sinónimos. Pero poco después modificó su significado, estableciendo una diferencia fundamental para su idea de la soberanía y del Estado constitucional. Concibió entonces la nación como propia del [[Derecho natural]], anterior al Estado ([[Derecho positivo]]), y al pueblo como determinado ''[[a posteriori]]''. En síntesis, para Sièyes la nación es titular de la soberanía, ésta se ejerce mediante el [[poder constituyente]], y después, tras el "''establecimiento público''" ([[Constitución]]), quedaría definido el pueblo como titular del [[poder constituido]]. Así pues, el pueblo sería para el abate la nación jurídicamente organizada.
 
[[Nicolas de Condorcet]] sólo emplea el término ''pueblo'', pero coincide con Sièyes al hacer énfasis en la distinción entre poder constituyente y poder constituido como base para el buen funcionamiento del Estado [[liberalismo|liberal]] y democrático.
 
Para estos dos autores, el papel del titular de la soberanía (llámese ''nación'' o ''pueblo'') se agota tras el ejercicio del poder constituyente. Tan sólo quedaría, en estado latente, como "recordatorio" del fundamento del Estado, y podría manifestarse excepcionalmente para rebelarse contra la opresión de una eventual [[tiranía]].
 
De los mencionados argumentos de Sieyès y Condorcet se deriva una idea básica respecto al Estado constitucional, que perdura hasta hoy, según la cual, como señalan, por ejemplo, [[Martin Kriele]] e [[Ignacio de Otto]], en dicho Estado no hay soberano. Esto se basa en que si consideramos la soberanía como ''summa potestas'' o poder ilimitado (y por tanto con facultad para crear leyes sin ningún freno a priori), ello es incompatible con la existencia de una norma fundamental que establezca su supremacía. Otros autores<ref name="Punset"><small>Por ejemplo, [[Ramón Punset]]: ''En el Estado constitucional hay soberano (reflexiones para una teoría jurídica de la soberanía nacional)'' [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/primero/pdf/punset.pdf], en [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/Portada.html ''Fundamentos''], [http://web.uniovi.es/constitucional/fundamentos/primero/Indice.html Volumen 1] (''Soberanía y Constitución''), [[1998]], ISSN 1575-3433</small></ref> sostienen que el proclamar la soberanía nacional tiene por objetivo propugnar o establecer una estructura constitucional propia del Estado liberal de Derecho: al atribuir la titularidad (que no el ejercicio) de la soberanía a un ente unitario y abstracto, se proclaman como no originarios los órganos estatales, evitando que cualquiera de ellos reclame para sí poderes que considere anteriores a la Constitución, lo que además favorece la articulación policéntrica de dichos órganos (pues ninguno prevalecería sobre los demás).
 
[[Derecho internacional|Internacionalmente]] hablando, la nación no es [[Sujetos de derecho internacional|sujeto de Derecho]], característica que sí posee el [[Estado]].
 
== Nación cultural ==
{{referencias}}
El concepto de nación cultural es uno de los que mayores problemas ha planteado y plantea a las ciencias sociales, pues no hay unanimidad a la hora de definirlo. Un punto básico de acuerdo sería que los miembros de la nación cultural tienen conciencia de constituir un cuerpo ético-político diferenciado debido a que comparten unas determinadas características [[cultura]]les. Estas pueden ser la [[lengua]], [[religión]], [[tradición]] o [[historia]] común, todo lo cual puede estar asumido como una [[cultura]] distintiva, formada históricamente. Algunos teóricos{{demostrar}} añaden también el requisito del asentamiento en un territorio determinado.
 
El concepto de nación cultural suele estar acoplado a una doctrina [[Historia|histórica]] que parte de que todos los [[humano]]s se dividen en grupos llamados naciones. En este sentido, se trata de una doctrina [[ética]] y [[Filosofía|filosófica]] que sirve como punto de partida para la ideología del [[nacionalismo]]. Los (co)nacionales (miembros de la nación) se distinguen por una identidad común y generalmente por un mismo origen en el sentido de ancestros comunes y [[parentesco]].
 
La [[identidad nacional]] se refiere especialmente a la distinción de características específicas de un grupo. Para esto, muy diferentes criterios se utilizan, con muy diferentes aplicaciones. De esta manera, pequeñas diferencias en la pronunciación o diferentes dialectos pueden ser suficientes para categorizar a alguien como miembro de una nación diferente a la propia. Asimismo, diferentes personas pueden contar con personalidades y creencia distintas o también vivir en lugares [[Geografía|geográficamente]] diferentes y hablar idiomas distintos y aun así verse como miembros de una misma nación. También se encuentran casos en los que un grupo de personas se define como una nación más que por las características que comparten por aquéllas de las que carecen o que conjuntamente no desean, convirtiéndose el sentido de nación en una defensa en contra de grupos externos, aunque éstos pudieran parecer más cercanos ideológica y [[Etnia|étnicamente]], así como en cuestiones de origen (un ejemplo en esta dirección sería el de "Nación por Deseo" (''Willensnation''), que se encuentra en [[Suiza]] y que parte de sentimientos de identidad y una historia común).
 
=== La nación cultural y el Estado ===
Un [[Estado]] que se identifica explícitamente como hogar de una nación cultural específica es un [[Estado-nación]]. Muchos de los Estados modernos están en esta categoría o intentan legitimarse de esta forma, aunque haya disputas o contradicciones en esto. Por ello es que en el uso común los términos de nación, país, tierra y Estado se suelan usar casi como sinónimos (pese al sentido ideológico profundo adverso).
 
Interpretaciones del concepto de nación cultural únicamente por razón de etnia o "raza" llevan también a diversas naciones sin territorio como la ''nación gitana'' o la ''nación negra'' en los EEUU (pese a que los últimos, de origen, pertenecerían a diferentes naciones africanas, así como existen diferentes "naciones blancas"). Según este punto de vista, sin embargo, queda claro que una nación cultural no necesita ser explícitamente un Estado independiente y que no todos los Estados independientes son naciones culturales, sino que muchos simplemente son uniones administrativas de diferentes naciones culturales o pueblos, en ocasiones parte de naciones geográficamente más grandes. Algunas de estas uniones se ven, a sí mismas como naciones culturales, o intentan crear un sentimiento o historia nacional de legitimación.
 
Otro ejemplo de nación cultural sin Estado propio es el del pueblo [[judío]] antes de la aparición del Estado de [[Israel]] o el del pueblo [[Palestino]], cuyos miembros se encuentran en diferentes países, pero con un origen común, según el sentido de la [[diáspora]]. También se encuentran pueblos como los [[kurdos]] o los asirios, que se describen como naciones culturales sin Estado. Igualmente se puede ver a Estados como [[Bélgica]] ([[Valonia|valones]] y [[Flandes|flamencos]]), Canadá (la provincia francófona de [[Québec]], ante la mayoría anglófona del resto de las provincias) o [[Nueva Zelanda]] (los [[maorí]]) como compuestos por varias naciones culturales. En España se encuentra esto también, partiendo especialmente de diversificaciones lingüísticas. No obstante, hay que tener en cuenta que, aunque común, es erróneo identificar por principio (per se) comunidad lingüística con nación cultural. El hecho de que ciertas corrientes políticas lo hagan es objeto de estudio como fenómeno [[Política|político]]–[[Ideología|ideológico]], pero no necesariamente [[Sociología|sociológico]] (sentido amplio).
 
=== La nación cultural y la religión ===
El concepto de nación cultural cambia, si para definir a la nación se da mayor relevancia a la religión. El Estado alemán, en este sentido, tradicionalmente se divide en [[catolicismo|católicos]] y [[Lutero|luteranos]] (religión dada originalmente, de acuerdo a la religión del señor feudal: ''cuius regio, eius religio''), de facto en más. El Estado español, así como el Italiano, por ejemplo, tradicionalmente no se subdivide entonces. La interpretación de nación cultural por base religiosa tuvo una mínima importancia en la formación de los Estados europeos (por formarse las bases de los Estados antes de la aparición del concepto de nación); éstos ven muchas veces su origen especialmente en las divisiones dadas tras [[Carlomagno]] y en las divisiones romanas clásicas, cuando la religión no tomaba un papel para ello (la cristianización de la Germania y Alamania no era total en esas fechas e incluso Carlomango se dejó bautizar muy tarde) o era clara (en el Imperio Romano tardío, la religión oficial era la católica). El caso de España, por ejemplo, es más complejo, pues apareció básicamente en lo que era la Hispania romana, pero tomando la religión un carácter especial, que se encuentra en el concepto de la [[Reconquista]] del [[Emirato de Córdoba]]. A diferencia de en Europa Central, donde apareció tras la caída del [[Imperio Romano]] un Estado supranacional (el [[Imperio Franco]]) que se dividió a grandes rasgos de manera tal que aparecieran las futuras naciones, en España aparecieron señoríos y reinos diferentes que más adelante se unificaron bajo el concepto del Reino de España y del [[monarca|Rey]] español).
Sin embargo, la religión toma un papel muy diferente en la aparición de los Estados-Nación de África del Norte y del concepto de nación de Medio Oriente y del [[Islam]]. En estos países, el Estado suele estar íntimamente relacionado con la religión y los miembros de estos países suelen verse como parte de una nación islámica, en muchas ocasiones, por sobre diferencias étnicas o lingüísticas, también de origen histórico de grupos especiales (excepción suele ser hasta cierto grado Irán, que suele basar su sentido nacional en el origen [[Persia|persa]], así como se suele excluir a [[Turquía]] por su origen [[Imperio Otomano|otomano]], cuyo imperio dominó el Medio Oriente y al cual se suele ver como una razón de inestabilidad actual).
 
Igualmente se puede encontrar el pueblo [[judío]], que se ve como nación especialmente con base en la religión común, con o sin la existencia de un Estado propio (que actualmente es [[Israel]]).
 
== Otros usos ==
Además de los dos usos rigurosos de ''nación'' antes expuestos, existen otros latos, y algunos de ellos son muy frecuentes en el lenguaje coloquial y en el [[Periodismo|periodístico]].
 
En ocasiones el término ''nación'' (política) se equipara, por extensión, a ''Estado'', incluso cuando éste no es democrático. Así, por ejemplo, la llamada [[Organización de las Naciones Unidas]] en puridad hace referencia a Estados. También se emplea como ''territorio'', ''país'', o "''conjunto de los habitantes de un país regido por el mismo gobierno''".<ref name="DRAE"><small>Primera acepción de la entrada ''nación'' en el [[Diccionario de la lengua española de la Real Academia Española|DRAE]] (vigésima segunda edición, [[2001]]).</small></ref>
 
El vocablo ''nación'' se encuentra también como sinónimo de grupo étnico, cultural o lingüístico, pero desprovisto del sentido ético-político que caracteriza a la definición estricta de nación cultural. En este sentido puede coincidir con alguno de los usos de la palabra que se daban antes del surgimiento del concepto de nación cultural a principios del siglo XIX. En tal caso, su aplicación como concepto histórico a dichos grupos anteriores a las mencionadas fechas sí sería ajustado.
 
== Historia ==
El concepto de nación (tanto política como cultural) tal como lo entendemos hoy, es decir, con su intrínseco componente político, no surge hasta fines del siglo XVIII, coincidiendo con el fin del [[Antiguo Régimen]] y el inicio de la [[Edad Contemporánea]]. Es entonces cuando se elaboran las primeras formulaciones teóricas sólidas de la nación y su plasmación en movimientos políticos concretos. Es decir, las obras de los [[Ilustración|ilustrados]] de fines del s. XVIII y las Revoluciones [[Revolución Americana|Americana]] y [[Revolución Francesa|Francesa]]. Desde entonces los dos tipos de nación han ido evolucionado entrelazadamente hasta hoy. Sin embargo el término, de origen latino, existió antes, con otros significados.
 
=== Etimología ===
La palabra ''nación'' proviene del [[latín]] ''nātio'' (derivado de ''nāscor'', nacer), que podía significar ''nacimiento'', ''pueblo'' (en sentido étnico), ''especie'' o ''clase''.<ref name="Dicclatín"><small>''Diccionario básico latino-español, español-latino'', Eustaquio Echauri Martínez, [[Barcelona]], [[1989]], ISBN 84-7153-222-0</small></ref> Escribía, por ejemplo, [[Marco Terencio Varrón|Varrón]] ([[116 a. C.|116]]-[[27 a. C.|27&nbsp;a.&nbsp;C.]]): ''Europae loca multae incolunt nationes'' ("''Son muchas las naciones que habitan los diversos lugares de Europa''").<ref name="Varrón"><small>[[Marco Terencio Varrón]]: ''De lingua latina'' (''La lengua latina''), V, XXXII, IV, ISBN 84-249-1895-9</small></ref> En los escritos latinos clásicos se contraponían las ''nationes'' ([[bárbaros]] no integrados en el [[Imperio Romano|Imperio]]) a la ''civilitas'' (ciudadanía) romana. Dice [[Cicerón]]: ''Todas las naciones pueden ser sometidas a servidumbre, nuestra ciudad no''.<ref name="Cicerón"><small>"''Omnes nationes servitutem ferre possunt: nostra civitas non potest.''", [[Marco Tulio Cicerón]], ''Filípicas'', ISBN 84-08-01178-2</small></ref>
 
En la [[Edad Media]] y [[Edad Moderna|Moderna]] el término se continuó empleando en sentido étnico, al margen de que ahora las ''naciones'' estuvieran integradas en diversas entidades políticas como Reinos e Imperios. También se usaba para designar a grupos de personas según su procedencia, siguiendo un criterio muy variable (a veces simplemente geográfico), con el fin de distinguir a unos de otros.
 
En el año [[968]], el obispo [[Liutprando de Cremona]], en enfrentamiento con el [[Emperador Bizantino]] [[Nicéforo II]] en pos del patrón [[Otón I]], Emperador del [[Sacro Imperio Romano]], declara en su crónica: "''lo que dices que pertenece a tu Imperio, pertenece, como lo demuestran la nacionalidad y el idioma de la gente, al Reino de Italia.''".<ref name="Liutprando"><small>[[Liutprando de Cremona]]: ''Relatio de legatione Constantinopolitana ad Nicephorum Phocam.''</small></ref>
 
En las [[Universidad medieval|universidades medievales]], cuya lengua académica era el latín, los estudiantes (provenientes de toda Europa) solían agruparse en ''nationes'', en función de su lengua materna vernácula o su lugar de nacimiento. En 1383 y 1384, mientras estudiaba teología en [[París]], Jean Gerson fue electo dos veces procurador de la ''nación francesa'' (esto es, de los estudiantes francófonos de la Universidad). La división en París de estudiantes en ''naciones'' fue adoptada por la Universidad de [[Praga]], donde desde su apertura en 1349 el ''Studium Generale'' se dividió entre bohemios, bávaros, sajones y en diversas naciones.
 
En los grandes mercados de la Edad Media los comerciantes se reunían en ''naciones'', identificándose así el origen de los productos en venta.
 
=== Antecedentes ===
Existen antecedentes de la nación a los que se ha otorgado diversa importancia en función del punto de vista del investigador.
 
Algunos autores han tratado de buscar unos fundamentos antropológicos primigenios de la nación cultural, que son inciertos, y las disputas en cuanto a ellos conforman un capítulo importante de la teoría del [[nacionalismo]]. Existen teorías biológicas de sus orígenes que ven al humano como animal territorial y a la nación como a un territorio en este sentido. Sin embargo, la mayoría de los teóricos rechazan esta teoría por simplista y tratan a las naciones como a una agrupación social humana relativamente nueva. El filósofo [[Avishai Margalit]] en ''La Ética de la Memoria'' (2002) discute el papel principal de la memoria en formar naciones: "''Una nación''", dice acérbicamente, "''se ha definido como una sociedad que alimenta un embuste sobre los ancestros y comparte un odio común por los vecinos. Por lo tanto, la necesidad de mantener una nación se basa en memorias falsas y el odio a todo aquél que no lo comparte.''"
 
Históricamente hablando, la tardía aparición de la nación se explica por la existencia de elementos de cohesión infra-estatales y supra-estatales entre las gentes. De los primeros, por ejemplo, la [[ciudad-estado]], el [[feudo]] o la secta. Entre los segundos, la persecución de un ideal común por encima de entidades políticas separadas. Hasta el [[siglo XV]] este ideal fue el Estado universal y su más importante materialización el [[Imperio Romano]], cuyo influjo se mostró en la [[Edad Media]] en los conceptos de ''Sacro Imperio Romano'' ([[Imperio Carolingio|Carolingio]] y [[Sacro Imperio Romano Germánico|Germánico]]) y de ''Res publica christiana'' ("república" o "comunidad cristiana").
 
Un síntoma de formación entre ciertas élites culturales del concepto de nación es la evolución en ellas de la idea de civilización, que pasará progresivamente de tener carácter de norma cultural universal a vincularse fuertemente a un Estado determinado. En la Edad Media se consideraba que existía una sola civilización unida básicamente por una religión y una lengua culta común (p.ej. Cristianismo y latín, Islam y [[Idioma árabe|árabe]], etc.). Lo mismo ocurría en el [[Renacimiento]] respecto al saber clásico greco-romano. Poco después se tomaba a Francia como modelo cultural válido para toda Europa. Pero todo esto empezará a cambiar a partir de finales del siglo XVIII, cuando de la mano de intelectuales y literatos surge un concepto de civilización ligado a las características culturales preponderantes de un Estado en particular. Así, por ejemplo, se hace hincapié en el conocimiento y desarrollo de la lengua madre vernácula como aquella en la que todo individuo debería ser instruído para alcanzar una formación plena.
 
Además de estos cambios en el campo de las ideas, e interrelacionados con ellos, se dan los políticos, económicos y sociales, y todos confluyen en un mismo sentido unificador: El Estado absolutista, centralizador, sustituye a los regímenes [[Feudalismo|feudales]] disgregadores; la [[secularización]] de la vida cotidiana y la educación reduce la importancia de los vínculos religiosos y a la vez fortalece las lenguas vernáculas; el aumento del comercio y la aparición de la [[burguesía]] reclaman una mayor unidad de mercado; etc. El nuevo Estado y la nueva sociedad serán el germen de una posterior gran transformación política a fines del XVIII, pues en la cada vez más poderosa alta burguesía calarán nuevas teorías que reivindican el poder para los gobernados. Así surgirá la nación.
 
En una vertiente más puramente política, dado su carácter anti-[[autocracia|autocrático]], algunos estudiosos ven también precedentes en algunos levantamientos populares de la [[Edad Moderna]] guiados a su juicio por principios de equidad, parlamentarismo y rechazo a residuos discriminadores del feudalismo. Por ejemplo, la [[Guerra de las Comunidades de Castilla|Guerra de las Comunidades]] en [[Corona de Castilla|Castilla]] ([[1520]]-[[1521]]) y la [[Reforma Protestante]] en Europa Central, ambas contra el Emperador [[Carlos I de España|Carlos V]]. Sin embargo estos movimientos no lograron crear la fuerza y unión suficiente ni consolidar una teoría filosófico-política homogénea en este aspecto.
 
=== La nación liberal ===
El [[Liberalismo]], que hunde sus raíces en el [[siglo XVII]] con autores como [[John Locke]], será la amplia corriente filosófica y política de la que se nutrirán las primeras teorías sistemáticas de la nación y sus realizaciones políticas. Como una oposición a los principios teóricos del [[Antiguo Régimen]], los liberales del XVIII cuestionaron los fundamentos de las [[Monarquía absoluta|monarquías absolutas]], y esto afectaba especialmente a la soberanía. Frente al concepto de súbdito introdujeron el de ciudadano, y el sujeto de soberanía dejaba de ser el rey para ser la nación. Sus criterios estaban basados en el racionalismo, la libertad individual y la igualdad ante la ley, al margen de consideraciones étnicas o culturales. Se trataba, por tanto, de nación política.
 
La [[Revolución Americana]] marca un hito en este sentido e influirá notablemente en la [[Revolución Francesa|Francesa]]. La [[Declaración de Independencia de los Estados Unidos]] en el primer caso y la [[Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano]] en el segundo, son textos muy representativos del espíritu que animaba la nueva mentalidad. Como muestra explícitamente la segunda declaración citada, existía en el ambiente intelectual de la época una concepción universalista de los nuevos valores liberales y democráticos. Y esto se traducía en que los requisitos considerados para la formación de naciones eran iguales para todo el mundo. Bastaba la voluntad de los individuos de constituírse en comunidad política. La [[autodeterminación]] se entendía entonces como el paso de la condición de súbditos (siervos de un rey) a la de ciudadanos (hombres libres e iguales ante la ley), o dicho de otro modo, como la instauración de la [[democracia]].
 
=== La nación romántica ===
La expansión militar [[Napoleón Bonaparte|napoleónica]] por Europa, que en teoría pretendía extender los valores heredados de la Revolución Francesa, propició el surgimiento de reacciones nacionalistas contra el invasor. Resalta el nacionalismo germánico, pues sus características son justamente las opuestas al liberal estadounidense y francés, configurando así un concepto distinto de nación: la nación cultural en sentido contemporáneo, es decir, con un componente ético-político.
 
Los principales inspiradores del nacionalismo germánico fueron intelectuales y literatos adscritos a las corrientes [[Idealismo|idealistas]] y [[Romanticismo|románticas]] como [[Johann Gottfried Herder|Herder]] o [[Johann Gottlieb Fichte|Fichte]]. Este movimiento se puede definir en esencia por su contraposición a los valores del anterior: Frente al cambio racional hacia el progreso y la justicia, el peso de la historia y las tradiciones; frente al cosmopolitismo, las particularidades de los pueblos; frente a la razón, el instinto.
 
Para los mencionados teóricos, la nación definida por ellos tiene un derecho inalienable a dotarse de una organización política propia. Es decir, a constituirse en Estado. Pero a diferencia del modelo liberal franco-estadounidense, ésta nación, en tanto que sujeto político, no se entiende simplemente como una suma de individuos que ejercen su voluntad, sino como algo superior. Todo pueblo, según ellos, tiene unos rasgos propios que le definen, distinguiéndole así de todos los demás. Es esta personalidad cultural diferenciada, o esencia propia (''Volkgeist'', "[[espíritu del pueblo]]", escribía Herder), la que permite singularizar al pueblo con vistas a determinar quién es el sujeto político (es decir, la nación tal como la entendían ellos) con auténtica legitimidad para constituirse en Estado. Pero dicha identidad no se hace visible por la mera expresión de la voluntad de un conjunto de individuos en un momento dado. Es algo más trascendente, pues el pueblo que es base de la nación romántica sería como un organismo vivo y perdurable, y una entidad moral de orden superior a la simple suma de sus partes. Para los nacionalistas románticos germanos el ''Volkgeist'', permanente y supraindividual, es objetivo, mientras que el sufragio es subjetivo. Es decir, inviertien las categorías de los liberales.
 
=== El Estado-nación ===