Diferencia entre revisiones de «Maximilien Robespierre»

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Actuar en ejercicio de la Virtud, esto es, ejercerla individual y colectivamente, es una de las claves del pensamiento republicano de Robespierre; pero en los momentos históricos que atravesaba Francia y su nueva república democrático popular (la del periodo de dominio [[jacobino]]), el peligro que representaban los enemigos de la república era real: los [[legitimistas franceses]], los [[expatriados franceses]] en Inglaterra o en los reinos alemanes y los conflictos constituían una amenaza. Robespierre consideraba que la República debía defenderse de forma contundente y rápida, arrebatando a sus enemigos la iniciativa, y a esa acción la denominaba el «[[Terror]]», esto es, según él, la aplicación inmediata de la justicia republicana al objeto de neutralizar a los enemigos de la República. De esta forma, el Terror, en el lenguaje republicano jacobino, es una acción en defensa de la Virtud, al objeto de defender el bien público, la República, estando obligado el Comité de Salvación Pública que asumía la defensa de ésta a dar cuenta pública de sus acciones. Desafortunadamente, la puesta en práctica de tales principios a manos de algunos "delegados en misión" (comisarios delegados en las provincias) condujo a ejecuciones en masa de todo sospechoso de ser contrarrevolucionario.
 
El periodo del Terror supuso la muerte en la [[guillotina]] de más de 50.000miles de personas, muchas de ellas obreros y campesinos, pero sobre todo fue un símbolo de ruptura total con el pasado absolutista y la monarquía. Robespierre había sido un firme partidario de la abolición de la pena de muerte, pero su percepción se modificó al asumir la obligación de defender la República de sus enemigos, [[consideraba que todo aquel que no pensara como él estaba en contra de Francia]],llegando a considerar que estaba justificada, siempre y cuando el ejecutado fuese un "enemigo".
 
La dinámica de continuos enfrentamientos internos sometió a la República de Robespierre a una gran tensión. Robespierre jugaba un papel más o menos centrista en el gobierno revolucionario. Se enfrentó a los ultrarrevolucionarios (seguidores de [[Hébert]]) ([[24 de marzo]] de [[1794]]), así como a los llamados «Indulgentes» agrupados en torno a [[Danton]] y Desmoulins ([[5 de abril]] de 1794). Actuando según el procedimiento habitual, la Comité de Salvación Pública procedió a eliminar a la oposición, tal y como se había hecho con los girondinos: Danton, Desmoulins y Hébert fueron detenidos, juzgados sumariamente y ejecutados en la guillotina.