Diferencia entre revisiones de «Tratado de Guadalupe Hidalgo»

Contenido eliminado Contenido añadido
Deshecha la edición 32131975 de 189.242.134.209 (disc.) - revirtiendo
Línea 4:
 
== Antecedentes ==
La política de inmigración mexicana, junto con el afán expansionista de los Estados Unidos de América, son dos de las principales causas de la Guerra Mexicano Estadounidense. Tras la independencia de México, el país estaba profundamente desgastado tras once años de guerra intensiva. La producción de bienes manufacturados estaba detenida, el campo estaba en estado lamentable, la hacienda pública estaba quebrada, y las luchas por el poder no hacían más que sumir a la población en la confusión y el miedo. Paralelamente, los Estados Unidos eran un país pujante, con una industria creciente, una economía floreciente, y una población que crecía a ojos vistas. Estados Unidos acababa de adquirir los territorios de la Louisiana a Francia y las Floridas a España, pero aún soñaban con extender sus territorios hasta el pacífico, donde estaban instalados los primeros colonos estadounidenses. Ya desde el gobierno colonial, y aún después de la Independencia, el Gobierno de México tuvo que impulsar la colonización de los vastos territorios del norte, entre ellos las Californias, el Nuevo México y Texas, cuya población total no excedía los 50 000 ciudadanos mexicanos. Para ello, se planteó una política de colonización muy sencilla e inclusiva, en la cual se venderían grandes cantidades de terreno a bajo precio, a crédito y con exención de impuestos y de aduanas por 5 años a todo extranjero que quisiera convertirse en ciudadano mexicano, aprendiera a hablar español, fueran católicos y se comprometiera a acatar las leyes mexicanas, con el objetivo de mejorar la economía del país, que pensaban, podría subsanarse con la inversión de capitales. Para facilitar las cosas, Moses Austin sugirió al Gobiernode puro `pito Gobierno que se otorgaran concesiones, que permitían a una persona colonizar una porción importante de territorio y recibir tierras a cambio de sus servicios. Si bien Moses Austin murió poco después, su hijo Stephen recibiría el permiso para realizar una colonización con 300 familias en las planicies de Texas. Esta concesión fue ratificada por Iturbide y después por la República Federal. A esta primera concesión le siguieron muchas más, tanto para Stephen Austin como para otros empresarios. Muchos concesionarios cobraron precios exorbitantes a los colonizadores, que sin embargo los aceptaron por ser la décima parte de lo que costaba una concesión de tierra equivalente en los Estados Unidos.
 
Gran número de personas procedentes de otros países se asentaron en las fértiles planicies de Texas y se convirtieron en ciudadanos legales, pero también llegaron multitudes de ciudadanos estadounidenses que aceptaron las condiciones exigidas. También comenzaron a rebelarse contra el gobierno dictatorial establecido por el general Santa Anna. Las cosas llegaron a un punto peligroso, y en 1827 se envió al general [[Manuel de Mier y Terán]] a observar y diagnosticar la situación.