Diferencia entre revisiones de «Gastronomía sefardí»

Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
Revertidos los cambios de 201.193.45.164 a la última edición de 201.143.27.90 con monobook-suite
Línea 4:
 
== Historia ==
Las comunidades sefardíes vivieron en la peninsula ibérica hasta antes del año [[1492]] en el que los [[Reyes Católicos]] dictan expulsarlos, la cocina sefardí adquiere hasta entonces todos los elementos autóctonos de la península. Algunos autores estudiosos de la cultura judía<ref>Uriel Macías Kapón: ''La cocina judía''. Red de juderías de España, 2003.</ref> afirman que no se puede hablar de una cocina judía y sefardi debido a que podría haber sido costumbre adaptar las variantes locales a la observancia [[kosher]]. Sin embargo, a pesar de intentar mantener la tradición la cantidad de técnicas y el empleo de ingredientes se ve enriquecida con las tradiciones y los ingredientes de los países que resultaron ser posteriormente la acogida durante la [[diáspora]], de esta forma toma influencia de la [[gastronomía de Marruecos|cocina de Marruecos]] (en general de la [[cocina magrebí]]) o del sur de [[gastronomía de Francia|Francia]], [[gastronomía de Bulgaria|Bulgaria]] o [[gastronomía de Turquía|Turquía]]. En todos estos países la influencia tiene una doble vía, ya que algunos platos europeos no se pueden explicar sin las costumbres culinarias de la gastronomía sefardí y viceversa. Las dos vertientes de la cocina judía europea tienen explicaciones: los sefardíes en la cocina del sur de [[Europa]]: [[cocina mediterránea]] hasta [[gastronomía de Turquía|Turquía]] y los [[askenazí]] que influenciaron los guisos de [[AmericaEuropa Central]].
 
Durante el siglo XIV en la peninsula muchos judíos se convirtieron al [[cristianismo]] con la esperanza de poder progresar y de recibir un mejor tratamiento. A estos se les denominó «conversos». Estas etnias establecidas en el territorio peninsular llegaron a influenciar directamente e indirectamente a la [[gastronomía de España|cocina española]] hasta tal punto que muchos platos considerados tradicionales hoy en día no podrían explicarse sin la influencia de la cocina sefardí.