{{VT|Crisis del petróleo de 1973|Crisis del petróleo de 1979|Invasión de Iraq de 2003 |Guerra del Golfo}}
Sólo hay que echar un vistazo diario a la prensa internacional para darse cuenta de la envergadura del problema. Sin ir más lejos, en la primera práctica de clase, ponía por ejemplo el conflicto resurgido entre Gran Bretaña y Argentina por las islas Malvinas. El trasfondo, la disputa por las exploraciones petrolíferas en el archipiélago.
La actualidad no se frena ahí. El petróleo es una fuente inagotable de noticias; el público las pide sin cesar y los medios sacian el apetito informativo. En el mes de marzo, pudimos ver los problemas de financiación de los Juegos Olímpicos de Río 2016. Aquí, Brasil se enfrentaba a fuertes protestas internas provocadas nuevamente por el crudo, principal recurso de la región.
Desde las subidas y bajadas del barril de Brent, a las reuniones de la OPEP, pasando por los 20.000 millones de dólares que le ha prestado China a Venezuela. Todo está relacionado en gran medida con el petróleo. Incluso en estos últimos días de abril, donde la inmensa nube de ceniza islandesa que ha cerrado los aeropuertos de media Europa es la que concentra todas las miradas, se habla de todo el dinero que se está ahorrando en combustible aéreo (que supone la quinta parte del consumo diario de petróleo).
Las principales empresas estatales son [[Aramco]] (Arabia Saudita), National Iranian Oil Company ([[Irán]]), ''Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima'' [[PDVSA]] ([[Venezuela]]), ''China National Petroleum Corporation'', Kuwait Petroleum Company, Sonatrach, ''Nigerian National Petroleum Corporation'', ''Libya National Oil Co'', Petróleos Mexicanos ([[PEMEX]]) (México) y Abu Dhabi National Oil Co. En el caso de la mayor empresa rusa, [[lukoil]], la propiedad gubernamental es parcial.
