Diferencia entre revisiones de «Fase fálica»

Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
Sin resumen de edición
Línea 3:
{{cita|«Fase de organización infantil de la libido que sigue a las fases oral y anal y se caracteriza por una unificación de las pulsiones parciales bajo la primacía de los órganos genitales. Pero, a diferencia de la organización genital puberal, el niño o la niña no reconocen en esta fase más que un solo órgano genital, el masculino, y la oposición de los sexos equivale a la oposición fálico-castrado. La fase fálica corresponde al momento culminante y a la declinación del complejo de Edipo; en ella predomina el complejo de castración».|J. Laplanche& J.-B.Pontalis<ref>{{cita libro |apellido=Laplanche |nombre=Jean |enlaceautor=Jean Laplanche |título=Diccionario de psicoanálisis |url= |fechaacceso= |idioma= |otros= |edición= |año=1996 |editor= |editorial=Paidós |ubicación=Barcelona |isbn=9788449302565 |capítulo= |páginas=148 |cita= }}</ref>}}
 
La fase fálica es una de las [[pulsión|fases pulsionales]] de la teoría sobre el desarrollo psicosexual de Sigmund Freud. Sobreviene a continuación de la [[fase anal]] y tiene lugar en la primera infancia, entre las edades de 3 y 6 años. En esta etapa, la [[zona erógena]] predominante son los genitales ([[clítoris]] en el cuerpo femenino y [[pene]] en el cuerpo masculino) y las sensaciones placenteras se obtienen en el niño y la niña al tocarse sus genitales. Según Freud, durante esta fase se superan los conflictos emocionales conocidos como [[complejo de Edipo]]. Según la teoría freudiana, en la etapa fálica puede desarrollarse el [[complejo de castración]] en las niñas junto a la denominada [[envidia del pene]]. Más precisamente, mientras en el niño el complejo de castración marca la ''salida'' del complejo de Edipo (ante la amenaza de ser castrado, renuncia a sus deseos incestuosos hacia la madre), en la niña la organización fálica determina su ''entrada'' al complejo de Edipo: el descubrimiento de que no posee un pene suscitaría la envidia de este, al tiempo que provocaría sentimientos de rabia y animadversión contra la madre por no haberle dado uno, inclinándose la niña hacia su padre como objeto de amor, quien, por un lado, posee un pene y, por otro, es capaz de entregar un hijo, que en la teoría freudiana funciona como falo, es decir, como equivalente simbólico del pene.
La fase fálica es una de las [[pulsión|fases pulsionales]] de la teoría sobre el desarrollo psicosexual de Sigmund Freud. Sobreviene a continuación de la [[fase anal]] y tiene lugar en la primera infancia, entre las edades de 3 y 6
años. En esta etapa, la [[zona erógena]] predominante son los genitales ([[clítoris]] en el cuerpo femenino y [[pene]] en el cuerpo masculino) y las sensaciones placenteras se obtienen en el niño y la niña al tocarse sus genitales. Según Freud, durante esta fase se superan los conflictos emocionales conocidos como [[complejo de Edipo]]. Según la teoría freudiana, en la etapa fálica puede desarrollarse el [[complejo de castración]] en las niñas junto a la denominada [[envidia del pene]]. Más precisamente, mientras en el niño el complejo de castración marca la ''salida'' del complejo de Edipo (ante la amenaza de ser castrado, renuncia a sus deseos incestuosos hacia la madre), en la niña la organización fálica determina su ''entrada'' al complejo de Edipo: el descubrimiento de que no posee un pene suscitaría la envidia de este, al tiempo que provocaría sentimientos de rabia y animadversión contra la madre por no haberle dado uno, inclinándose la niña hacia su padre como objeto de amor, quien, por un lado, posee un pene y, por otro, es capaz de entregar un hijo, que en la teoría freudiana funciona como falo, es decir, como equivalente simbólico del pene.
 
Freud especifica con el término fase fálica la primera maduración genital que se caracteriza por la dominación imaginaria del atributo fálico, y por el goce masturbatorio; localiza este goce en la mujer en el clítoris, promovido así a la función de falo.