Diferencia entre revisiones de «Cuádruple Alianza (1834)»

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El acercamiento entre Inglaterra y Francia se produjo por "''múltiples intereses, y no sólo por afinidades ideológicas''" aunque éstas eran evidentes.<ref>López-Cordón, 1981, p. 848</ref> En Francia la revolución de 1830 dio el poder a [[Luis Felipe I de Francia|Luis Felipe]] que adoptó al principio posturas liberales. En Inglaterra los [[whig]] se hicieron con el gobierno e impusieron la [[Reform Act de 1832|Gran Reforma]] en 1832 que permitió cierto aperturismo político y una ampliación de las bases del régimen parlamentario. Un punto importante de los planteamientos ''[[whig]]'', y especialmente de los radicales que les apoyaban en el [[Parlamento del Reino Unido|Parlamento]], era la defensa de los ideales liberales en [[Europa]]. De defensa y unión que explicaba el acercamiento a Francia que se concretó en una ''Entente Cordiale'', un frente común contra las monarquías absolutistas. En todo caso, esta colaboración tenía dos importantes limitaciones: el tradicional principio de no intervención inglés y los diferentes y contrapuestos intereses económicos de cada país.<ref>Rodríguez, 1991, pp. 6-11</ref>
 
En cuanto a [[España]] y [[Portugal]] ambos países tenían una situación interna muy difícil. En Portugal desde mediados de los años veinte se desarrollaba una [[guerras Liberales|guerra sucesoria]]. En España la situación también era similar aunque la [[Primera Guerra Carlista|guerra]] no estallaría hasta después de firmar el tratado. En política internacional el tratado, y la dependencia que supone, es "''resultado del aislamiento internacional del régimen isabelino''".<ref name=vilarcinco>Vilar, 2003, p. 405</ref> [[Maria Victoria López-Cordón Cortezo|López-Cordón]] incide en ese aislamiento añadiendo además que procede de la "''descalificación de España como potencia europea, fruto de la desafortunada política exterior de Fernando VII''".<ref name=cordoncuarentaynueve>López-Cordón, 1981, p. 849</ref> Que sólo Francia e Inglaterra reconocieran a Isabel II como legítima heredermaheredera demuestra el aislamiento español. Su ejemplo sólo fue seguido por países dependientes de esas potencias.<ref name=vilarcinco/>
 
== Significado ==
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== Partes contratantes ==
[[File:Talleyrand 01.jpg|left|thumb|100px|Talleyrand, embajador francés en LondrésLondres, consiguió que Francia se incluyera en el tratado pese a la reticencia inglesa.<ref name=menchentreintayocho/>]]
La iniciativa del tratado partió de Gran Bretaña.<ref name=menchencuarenta/> Portugal, pese a considerar el apoyo militar como imprescindible, se unió al tratado con poco entusiasmo viéndolo como algo necesario e inevitable.<ref name=menchencuarenta>Menchén, 1989, p. 40</ref> Vilar cree que incluso Portugal se unió al tratado "''de forma un tanto forzada''".<ref name=vilarcinco/> En cambio, España firmó como entusiasmo ya que se vio como un éxito diplomático, como la "''coronación del proceso de acercamiento a Gran Bretaña''.<ref name=rodrigueztressiete/>
 
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El fin de la ''Entente'' entre franceses e ingleses, y con ella del "espíritu" de la Cuádruple, se debía también a la debilidad que tenía desde su formación por la contraposición de intereses económicos que hacían imposible la unión política.<ref>Menchén, 1989, p. 48</ref><ref>Rodríguez, 1991, p. 11</ref> En el plano internacional las primeras divergencias, sin causar graves problemas en todo caso, se dieron en [[Egipto]], en [[1840]], cuando Francia apoyó a [[Mehmet Alí]] en su intento de independencia del [[imperio otomano]], teniendo finalmente que ceder y abandonar a Alí.
 
En el plano español las divergencias se notaban por ejemplo en la influencia de cada Estado en el gobierno. Así en el momento de la caída de [[Espartero]] se entendió que se abría un periodo de influencia francesa.<ref>López-Cordón, 1981, p. 854</ref> En Portugal las pugnas entre franceses e ingleses siempre tuvieron menor importancia, pues se siguió manteniendo sin más la tradicional influencia británica. El punto de inflexión de la ''Entente'' y del "espíritu" de la Cuádruple también se diódio en España, con el asunto de los matrimonios reales que supone el definitivo "''distanciamiento franco-británico, hasta el punto de que fácticamente dejó de existir la Cuádruple Alianza''".<ref name=vilarsiete>Vilar, 2003, p. 407</ref> Se trató de los matrimonios de la reina [[Isabel II de España|Isabel II]] y la [[infanta]] [[Luisa Fernanda de Borbón|Luisa Fernanda]]. Ambos países intentaban evitar que el príncipe que se casara con Isabel perjudicara a sus intereses. Aunque finalmente la Reina tuvo que conformarse con un príncipe español para evitar suspicacias, Francia logró que la infanta se casara con uno francés, el [[Antonio de Orleans|duque de Montpensier]], algo que [[Narváez]] permitió "''sobre todo para impedir que una eventual ventaja británica fuera aprovechada por los progresistas''".<ref name=cincuentaycinco>López-Cordón, 1981, p. 855</ref> Se rompía así el equilibrio por una cuestión de partido, el [[Partido Moderado|moderado]], no de Estado.
 
La última invocación del Tratado de la Cuádruple se produjo durante la [[Revolución de Maria da Fonte|crisis portuguesa]] de 1846-1847 y es la demostración práctica de la pérdida de su “espíritu” con el distanciamiento franco-británico. El intervencionismo español en Portugal inquieta a los ingleses que temen la influencia de Francia y eso llevó a que se llegue a un acuerdo para solucionar de nuevo la cuestión portuguesa de forma conjunta, con la excusa del tratado de la Cuádruple.<ref>Menchén, 1989, p. 50</ref> Por parte de España y Francia se pensaba en la "intervención plural como el mejor modo de hacer frente al predominio británico".<ref>López-Cordón, 1981, p. 856</ref>