Diferencia entre revisiones de «Reforma o ruptura»

Contenido eliminado Contenido añadido
Haebel (discusión · contribs.)
Sin resumen de edición
Haebel (discusión · contribs.)
Sin resumen de edición
Línea 52:
y que van a ir desarrollándose hasta formar el hilo de un discurso de falsas
identidades del que nos ocuparemos a continuación.|Rafael del Aguila Tejerina}}
Este autor continúa en su trabajo y afirmaafirmando que, a partirtravés dedel lapacto Constitución paraconstitucional, algunos autores (como el Profesor [[Pedro de Vega]] o el político [[Miquel Roca]]) manifiestan que se realizó en realidad una ruptura aconsensuada partirque de esa reforma, mediantedemolió el consensoanterior constitucionalrégimen.<ref>[http://www.cepc.es/rap/Publicaciones/Revistas/3/REPNE_025_112.pdf Rafael del Águila tejerina. "La transición a la democracia en España: Reforma, Ruptura y consenso" págs 102-127]</ref>
 
ElEse mismo posicionamiento de ruptura es el que defiende el periodista y escritor [[Javier Cercas]], quién asevera en su, laureada, obra [[Anatomía de un instante]] que la transición se fijó en el marco de una ruptura pactada: {{cita|...a principios de 1976 el secretario general [por [[Santiago Carrillo]]] introdujo un matiz terminológico en su discurso y dejó de hablar de «ruptura democrática» para hablar de «ruptura pactada» (...) La predicción de Carrillo fue exacta. O casi exacta: Suárez no sólo llevó la negociación que condujo a la ruptura; también la formuló en unos términos que nadie esperaba: para Carrillo, para la oposición democrática, para los reformistas del régimen, la disyuntiva política del posfranquismo consistía en elegir entre la reforma del franquismo, cambiando su forma pero no su fondo, y la ruptura con el franquismo, cambiando su forma para cambiar su fondo; Suárez sólo tardó unos meses en decidir que la disyuntiva era falsa: entendió que en política la forma es el fondo, y que por tanto era posible realizar una reforma del franquismo que fuese en la práctica una ruptura con el franquismo.<ref> Anatomía de un instante Javier Cercas ISBN 9788439722137 [http://books.google.es/books?id=LMu-WdhYRP4C&pg=PT39&lpg=PT39&dq=%22El+gobierno+Su%C3%A1rez+%E2%80%94conclu%C3%ADa%E2%80%94+podr%C3%ADa+servir+para+llevar+la+negociaci%C3%B3n+que+conduzca+a+la+ruptura+pactada%22&source=bl&ots=pABTULAPBz&sig=PnCH99VTg21PsPLmtOcdWW-OwAs&hl=es&sa=X&ei=Sl2PUrK2MaSv7Aab2YHwDA&ved=0CDEQ6AEwAA#v=onepage&q=%22El%20gobierno%20Su%C3%A1rez%20%E2%80%94conclu%C3%ADa%E2%80%94%20podr%C3%ADa%20servir%20para%20llevar%20la%20negociaci%C3%B3n%20que%20conduzca%20a%20la%20ruptura%20pactada%22&f=false se puede ver esta parte del libro en google books]</ref>}}
 
El historiador [[Santos Julia]] también concibe el proceso hacía la democracia como una ruptura pactada:
{{Cita| La ruptura, que siempre se había entendido como vía pacífica a la democracia con el momento clave de una huelga general, comenzó a entenderse como vía negociada: ruptura dejó por completo de referirse al agente que debía conducir el proceso para designar únicamente su fin, una constitución. Sería, como la había bautizado Carrillo y la saludaron todos los demás, una ruptura pactada.<ref name="Santos Julia"></ref>}}
 
El mismo autor también cita: {{cita|El proyecto de ruptura, tal como fue formulado en declaraciones conjuntas por los diferentes organismos de la oposición, fue en definitiva el que acabó realizándose excepto en un punto: no fue la oposición democrática la que dirigió el proceso a la democracia. Pero, señalada esta obviedad, no tiene mucho sentido lucubrar sobre qué tipo de democracia habría sido posible si el proyecto de ruptura –en resumen, unas elecciones generales de las que habría de salir unas Cortes que procedieran a elaborar una Constitución-hubiera sido conducido por la oposición. Se ha argumentado que al renunciar a dirigir el proceso y sumarse en definitiva al proyecto del Gobierno, la oposición abandonó en el camino la voluntad de instaurar un modelo de democracia diferente a la realmente existente. Pero a la hora de definir en qué consistiría este modelo inédito de democracia, nadie es, ni puede ser, muy específico: se lamenta que la democracia resultante no sea muy participativa, que los partidos hayan desarrollado tendencias oligárquicas, que la sociedad no esté muy movilizada, que la calidad de la democracia sea baja, que no sea, en definitiva, una democracia ciudadana. Pero todo esto se podría decir, en un grado u otro, de cualquier democracia de nuestro tiempo sin que pueda establecerse un vínculo entre los orígenes y el funcionamiento...<ref name="Santos Julia">[http://santosjulia.com/Santos_Julia/2005-09_files/En%20torno%20a%20los%20proyectos.pdf Santos Julia]</ref>}}
 
El [[política|político]] [[Alfonso Osorio]] expresa con claridad como la reforma que quería el Jefe del Estado, el rey [[Juan Carlos I]], debía contemplar un Estado democrático y de Derecho que garantizase la igualdad y las libertades públicas de todos los ciudadanos.
Línea 64 ⟶ 71:
{{Cita|No se había logrado la ruptura y la incipiente democracia, democracia controlada, vigilada, comenzaba a caminar bajo el signo de la reforma. En ese contexto, y con la atenuación de las movilizaciones populares, el cambio fue pilotado fundamentalmente desde la Zarzuela a través de la UCD y Adolfo Suarez y también en menor medida por el PSOE. Vino a ocurrir lo dicho por Lampedusa en su novela "El Gatopardo", que es todo un tratado de filosofía política de las clases dominantes: es necesario que algo cambie para que todo siga igual. Se trata de garantizar hasta donde fuera posible, en una nueva situación política, el dominio de una oligarquía que se había ido pasando con armas y bagajes del campo dictatorial al de una monarquía constitucional.|Armando López Salinas<ref>[http://www.nodo50.org/unidadcivicaporlarepublica/opinion2/transicion%20armando.htm Notas de un testigo: La transición española inacabada. Armando López Salinas]</ref>}}
 
El periodista y escritor [[Javier Cercas]] asevera en su, laureada, obra [[Anatomía de un instante]] que la transición se fijó en el marco de una ruptura pactada: {{cita|...a principios de 1976 el secretario general [por [[Santiago Carrillo]]] introdujo un matiz terminológico en su discurso y dejó de hablar de «ruptura democrática» para hablar de «ruptura pactada» (...) La predicción de Carrillo fue exacta. O casi exacta: Suárez no sólo llevó la negociación que condujo a la ruptura; también la formuló en unos términos que nadie esperaba: para Carrillo, para la oposición democrática, para los reformistas del régimen, la disyuntiva política del posfranquismo consistía en elegir entre la reforma del franquismo, cambiando su forma pero no su fondo, y la ruptura con el franquismo, cambiando su forma para cambiar su fondo; Suárez sólo tardó unos meses en decidir que la disyuntiva era falsa: entendió que en política la forma es el fondo, y que por tanto era posible realizar una reforma del franquismo que fuese en la práctica una ruptura con el franquismo.<ref> Anatomía de un instante Javier Cercas ISBN 9788439722137 [http://books.google.es/books?id=LMu-WdhYRP4C&pg=PT39&lpg=PT39&dq=%22El+gobierno+Su%C3%A1rez+%E2%80%94conclu%C3%ADa%E2%80%94+podr%C3%ADa+servir+para+llevar+la+negociaci%C3%B3n+que+conduzca+a+la+ruptura+pactada%22&source=bl&ots=pABTULAPBz&sig=PnCH99VTg21PsPLmtOcdWW-OwAs&hl=es&sa=X&ei=Sl2PUrK2MaSv7Aab2YHwDA&ved=0CDEQ6AEwAA#v=onepage&q=%22El%20gobierno%20Su%C3%A1rez%20%E2%80%94conclu%C3%ADa%E2%80%94%20podr%C3%ADa%20servir%20para%20llevar%20la%20negociaci%C3%B3n%20que%20conduzca%20a%20la%20ruptura%20pactada%22&f=false se puede ver esta parte del libro en google books]</ref>}}
 
El historiador [[Santos Julia]] también concibe el proceso hacía la democracia como una ruptura pactada:
{{Cita| La ruptura, que siempre se había entendido como vía pacífica a la democracia con el momento clave de una huelga general, comenzó a entenderse como vía negociada: ruptura dejó por completo de referirse al agente que debía conducir el proceso para designar únicamente su fin, una constitución. Sería, como la había bautizado Carrillo y la saludaron todos los demás, una ruptura pactada.<ref name="Santos Julia"></ref>}}
 
El mismo autor también cita: {{cita|El proyecto de ruptura, tal como fue formulado en declaraciones conjuntas por los diferentes organismos de la oposición, fue en definitiva el que acabó realizándose excepto en un punto: no fue la oposición democrática la que dirigió el proceso a la democracia. Pero, señalada esta obviedad, no tiene mucho sentido lucubrar sobre qué tipo de democracia habría sido posible si el proyecto de ruptura –en resumen, unas elecciones generales de las que habría de salir unas Cortes que procedieran a elaborar una Constitución-hubiera sido conducido por la oposición. Se ha argumentado que al renunciar a dirigir el proceso y sumarse en definitiva al proyecto del Gobierno, la oposición abandonó en el camino la voluntad de instaurar un modelo de democracia diferente a la realmente existente. Pero a la hora de definir en qué consistiría este modelo inédito de democracia, nadie es, ni puede ser, muy específico: se lamenta que la democracia resultante no sea muy participativa, que los partidos hayan desarrollado tendencias oligárquicas, que la sociedad no esté muy movilizada, que la calidad de la democracia sea baja, que no sea, en definitiva, una democracia ciudadana. Pero todo esto se podría decir, en un grado u otro, de cualquier democracia de nuestro tiempo sin que pueda establecerse un vínculo entre los orígenes y el funcionamiento...<ref name="Santos Julia">[http://santosjulia.com/Santos_Julia/2005-09_files/En%20torno%20a%20los%20proyectos.pdf Santos Julia]</ref>}}
== Referencias ==
{{Listaref}}