Costra (medicina)

formación cutánea temporal que cubre una herida al cicatrizarse

Una costra/cáscara es una formación cutánea temporal, de color rojo o pardo, constituido por plaquetas y sangre, que cubre una herida al cicatrizarse y que sirve de barrera protectora para la dermis en regeneración. Es un tipo de lesión dermatológica secundaria.

Costra/Cáscara
(nombre de signo clínico)

Una costra/cáscara sobre una rodilla herida.

Fisiopatología editar

Una costra es una formación sólida seca que se superpone a una lesión cutánea exudativa, segregante o hemorrágica, que se deshace fácilmente entre los dedos y está constituida por el exudado, el pus y la sangre desecados. Al proceso de formación de la costra se le denomina incrustación o encostración.[1]

Constituye una lesión elemental secundaria producida por la desecación de un exudado o secreción (serosidad, sangre o pus) que se forma sobre la superficie de la piel como consecuencia de una herida.[2]

Véase también editar

Referencias editar