La gismondina es un mineral de la clase de los tectosilicatos, y dentro de esta pertenece al llamado grupo de las zeolitas. Fue descubierta en 1817 en Capo di Bove, en la región de Lacio (Italia), siendo nombrada así en honor de Carlo G. Gismondi, mineralogista italiano que previamente había descubierto el mineral "zeagonita", que hoy día no se considera propiamente una especie mineral, sino un tipo de gismondina, y que fue el primero en examinarla.

Gismondina

Campo de Calatrava, Ciudad Real, España (Colección Rafa Muñoz Alvarado; encuadre 3 mm)
General
Categoría Minerales tectosilicatos - Zeolitas
Clase 9.GC.05 (Strunz)
Fórmula química Ca2(Si4Al4)O16·8H2O
Propiedades físicas
Color Incoloro a blanco, rosa muy pálido
Raya Blanca
Lustre Vítreo
Transparencia Transparente a translúcido
Sistema cristalino Monoclínico, prismático
Hábito cristalino Globular o pseudotetragonal
Macla En cristales pseudotetragonales
Fractura Concoidea muy exagerada
Dureza 4 - 5 (Mohs)
Densidad 2,26
Propiedades eléctricas Piezoeléctrico
Variedades principales
Gismondina-Ba rica en bario
Gismondina-Ca rica en calcio

Características físicas y químicas editar

Es un aluminosilicato de calcio. Como las demás zeolitas, lo que antes era la especie gismondina está actualmente dividida en función de cual sea el catión intercambiable dominante. En el caso de la gismondina, solamente se conoce en la naturaleza hasta ahora la gismondina-Ca, que responde a la fórmula indicada anteriormente. No obstante, en algunas escorias de fundición antiguas se ha encontrado la gismondina-Ba,[1]​ y es probable que se encuentre la gismondina con otros cationes.

Los cristales de gismondina tienen una morfología muy característica, que permite distinguirla con facilidad de muchas otras zeolitas. Habitualmente tienen forma de dipirámide pseudotetradonal, aunque realmente se trata de una macla formada por dos cristales.[2]

Formación y yacimientos editar

La gismondina es una zeolita comparativamente poco frecuente, de la que se conocen unas 50 localidades en el mundo.[1]​ Se encuentra habitualmente en cavidades de distintos tipos de rocas volcánicas, asociada a otras zeolitas, como la phillipsita-Ca. También aparece en fisuras de rocas calcosilicatadas, formada por acción hidrotermal. En España se ha encontrado en algunos de los volcanes extinguidos del Campo de Calatrava (Ciudad Real), especialmente en el conocido como Cerro Moreno.[3]

Referencias editar

  1. a b «Gismondine. Mindat». 
  2. Tschernich, Rudy W. (1992). Zeolites of the World. Geoscience Press. p. 188-197. 
  3. Calvo Rebollar, Miguel (2018). Minerales y Minas de España. Vol. IX. Silicatos. Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas de Madrid. Fundación Gómez Pardo. pp. 654-655.