Juana García Ugalde

actriz española

Juana Ramona García Ugalde y Alcázar, actriz española.

La S.ra Juana García. En la Comedia Nueva, el Café. Grabado a puntos, 1792. Biblioteca Nacional de España.[1]

Nacida en Madrid en la calle de Fúcares el 23 de junio de 1764 y bautizada en la parroquia de San Sebastián, fue hija del matrimonio de tonadilleros cómicos valencianos formado por Mariana Alcázar y José García Ugalde, conocido como el Redentor.[2]​ Mereció el elogio de Leandro Fernández Moratín, de quien estrenó el papel de D.ª Isabel en El viejo y la niña y el de D.ª Mariquita en La comedia nueva o el café, presentada en Madrid con notable éxito en 1792.[3]

Rival de Rita Luna, cuyo triunfo en Madrid «la lanzó a provincias en 1795»,[4]​ se pierde su pista tras su jubilación en 1804, en Cádiz, donde anteriormente, en 1787, había triunfado como primera dama tras la jubilación de Pepa Figueras en la compañía de Eusebio Ribera.[3]

Según Manuel Gómez García, «fue muy agraciada, pero de escasas cualidades».[5]

Referencias editar

  1. La estampa se anunciaba en la Gaceta de Madrid del 15 de enero de 1793: «Retrato de la Sra. Juana García, primera Dama de la Compañía de Ribera, en la comedia El café: grabada á la Inglesa. Véndese a 2 rs. en la Librería de Tieso, calle de las Carretas. Puede ir en carta».
  2. Fernández García, Matías, Parroquia madrileña de San Sebastián. Algunos personajes de su archivo, Madrid, Caparrós editores, 1995, p. 318.
  3. a b Román Fernández, Manuel, «Juana García Ugalde y Alcázar», Diccionario biográfico español, Real Academia de la Historia.
  4. Sánchez Esteban, Ismael, Rita Luna. Comedia dramática en un prólogo y cuatro actos, con notas, Renacimiento, Madrid-Buenos Aires, 1915, nota 10, pp. 230-231. El autor se basa en documentos exhumados por Emilio Cotarelo y Mori para pintar la rivalidad entre las dos actrices en un diálogo entre el corregidor José Antonio de Armona y Pinedo:
    Armona —¿No se convence la señora García?
    Pinedo —¿Qué se ha de convencer? Dice que la aparición de la Rita á su lado redundaría en descrédito de su opinión; que desde hace seis años viene sirviendo á Madrid sola, de dama, sin que el público jamás la desairase, y que no puede admitir la competencia.
    Armona —Lo que teme es que en cuanto la Rita Luna haga dos comedias, ni con candil va á encontrar apasionados dispuestos á aplaudirla. Y eso que sabe buscarlos por todos los medios.
  5. Gómez García, Manuel, Diccionario Akal de Teatro, Madrid, Ediciones Akal, 1998, p. 349.