Una especie desconocida de pulpo gigantesco ha sido hipotetizada como fuente de reportes de monstruos marinos como el lusca, kraken y akkorokamui así como la fuente de algunos cadáveres de origen desconocido conocidos como globsters, como el Monstruo de San Agustín. A la especie que presuntamente representa este monstruo se le ha asignado el nombre binomial de "Octopus giganteus" (Latín: pulpo gigante) y "Otoctopus giganteus" (prefijo griego: oton = oreja; pulpo de oreja gigante), a pesar de que estos no son válidos bajo las reglas del ICZN.[1][2]

Dibujo del  malacólogo Pierre Dénys de Montfort, 1801, de las descripciones de los marineros franceses según se dice fueron atacados por tal criatura en la  costa de Angola
Dénys de Montfort "Poulpe Colossal" ataca un barco de mercaderes.
Representación imaginaria de un pulpo gigantesco atrapando un barco.

No deben ser confundidos con los conocidos pulpos gigantes del Pacífico, los cuales son miembros del genus Enteroctopus, y pueden crecer a una longitud total de más de 6m (20ft).[3]​ El pulpo gigantesco se asume es mucho más grande.

Historia editar

En 1802 el malacólogo francés Pierre Denys de Montfort en su Histoire Naturelle Générale et Particulière des Mollusques reconoció la existencia de dos clases de pulpo gigante. El primero es el kraken pulpo, que Denys de Montfort creyó había sido descrito no solo por marineros noruegos y balleneros americanos, sino también por escritores antiguos como Plinio el Viejo. El segundo, el mucho más grande pulpo colosal, que se dice atacó un barco de navegación de Saint-Malo en la costa de Angola.

Un pulpo gigantesco ha sido propuesto para identificar el cadáver gigante, conocido como el Monstruo de St. Augustine, que encalló en St Augustine, Florida, en 1896. Sin embargo, las muestras de este espécimen sometidas a microscopia de electrón y a análisis bioquímico fueron identificadas como «masas de colágeno puro» y no poseían las «características bioquímicas de colágeno de invertebrado, ni el arreglo de fibra del colágeno del manto de pulpo». Los resultados sugieren que las muestras son «piezas grandes de piel vertebrada [...] de un enorme ser de sangre caliente».[4]

Véase también editar

Referencias editar

  1. Verrill, A. E. 1897.
  2. Raynal, M. 1987.
  3. Cosgrove, J.A. 1987.
  4. Pierce, S., G. Smith, T. Maugel & E. Clark 1995.

Lectura adicional editar

  • Heuvelmans, B. El Kraken y el Pulpo Colosal (2003) Kegan Paul. Londres.
  • Raynal, Michel (1994). «The Case for the Giant Octopus». En Steve Moore, ed. Fortean Studies 1. London: John Brown Publishing. pp. 210-234. ISBN 1-870870-557.